Espíritus de la Noche Edgar Allan Poe
Enviado por germale1234567 • 19 de Agosto de 2013 • Informe • 442 Palabras (2 Páginas) • 329 Visitas
Espíritus de la Noche
Edgar Allan Poe
Tu alma, en la tumba de piedra gris
estará a solas con sus tristes pensamientos.
Ningún ser humano te espiará
a la hora de tu secreto.
¡Permanece callado en esa soledad!
No estás completamente abandonado:
los espíritus de la muerte, en la vida, te buscan
y, en la muerte, te rodean.
Te cubrirán de sombras: ¡Permanece callado!
La noche, tan clara, se oscurecerá
y las estrellas no mirarán la tierra,
desde sus altísimos tronos en el cielo,
con su luz de esperanza para los mortales.
Pero sus globos rojos apagados,
en tu hastío, tendrán la forma
de un incendio y de un fiebre
que te poseerán para siempre.
De tu espíritu no podrás desechar las visiones,
que ahora no serán rocío sobre la hierba.
La brisa - el aliento de Dios - es silenciosa,
y la niebla sobre la colina,
oscura, muy oscura, pero inmaculada,
es un símbolo y una señal.
¡Como se extiende sobre los árboles
el misterio de los misterios.
Los espíritus de los muertos
Edgar Allan Poe
Tu alma se encontrará sola, cautiva de los
negros pensamientos de la gris piedra tumbal;
ninguna persona te inquietará en tus horas de
recogimiento.
——
Quédate silenciosamente en esa soledad que
no es abandono,—porque los espíritus de los
muertos que existieron antes que tú en la vida,
te alcanzarán y te rodearán en la muerte,—y
la sombra proyectada sobre tu cara obedecerá
a su voluntad; por lo tanto, permanece tranquilo.
——
Aunque serena, la noche fruncirá su ceño,
y las estrellas, de lo alto de sus tronos celestes,
no bajarán más sus miradas con un resplandor
parecido al de la esperanza que se concede a
los mortales; pero sus órbitas rojas, desprovistas
de todo rayo, serán para tu corazón marchito
como una quemadura, como una fiebre
que querrá unirse a ti para siempre.
——
Ahora, te visitan pensamientos que no ahuyentarás
jamás; ahora surgen ante ti visiones
que no se desvanecerán jamás; jamás ellas dejarán
tu espíritu, pero se fijarán como gotas
de rocío sobre la hierba.
——
La brisa,—esa respiración de Dios,—reposa
inmóvil, y la bruma que se extiende como una
sombra sobre la colina,—como una sombra cuyo
velo no
...