Historia: "Porque El Pato Cruzo La Calle"

Nuestra historia comienza con un Pato llamado Luis, remanente a no obedecer a sus padres, era todo un rebelde y parecía que jamás iba a cambiar, por supuesto, hacia todo lo que quería y aún si sus acciones perjudicaban a alguien no le importaba en lo más mínimo, pero todo esto algún día iba a cambiar.

Todos los Domingos con sus padres y hermanos paseaba por la cuidad, era día familiar y había una razón particular, era por que los padres de Luis trataban de inculcar a sus hijos cómo cuidarse de los peligros de la gran ciudad, claro que todos ponían atención menos Luis, el solamente se pasaba jugando video juegos y se olvidaba de su entorno.

A Luis le encantaban los video juegos, lo único que le gustaba en la vida y creía que en un futuro no muy distante, se podría dedicar especialmente a esto.

Un Sábado, Luis y su familia salieron de casa para comprar la despensa de la semana, se dio cuenta que unas personas construían una tienda de video juegos al otro lado de la calle, donde él vivía, estaba tan emocionado, se imaginaba que todos los días salía, cruzaba la calle y entraba en la tienda. También pensaba que en un momento; cuando fuera más grande, hasta podría pedir trabajo en ese lugar y olvidarse de todas sus preocupaciones, en torno a su vida cotidiana.

Pasaban los días y el esperaba con ansias que terminara la construcción, por supuesto, él, sus hermanos y sus padres no dejaban de pasear, pero Luis seguía sin poner atención a las enseñanzas de sus padres.

Cuando menos se lo esperaba, Luis observo por la ventana que la construcción por fin había terminado, no lo podía creer, salió corriendo de su hogar sin pedir permiso con su juego en la mano y su bolsillo lleno de dinero, cerró la puerta y fue directo hacia la tienda, iba tan emocionado y distraído que no se percato que en la calle venia un camión de Marínela a toda velocidad, atropellando al patito, recordando la frase Recuérdame, creo que ni las plumas encontraron, ¡Rayos! Pobre pato.

Lo que se puede sacar de esta historia es: Siempre hacer caso a las enseñanzas o recomendaciones de los adultos, ya que tienen experiencia y lo hacen por nuestro propio bien, pero también es importante no estar distraído y atento, porque de lo contrario puedes quedar como el pato.

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