La Metamorfosis, ¿Existencialista o Expresionista?

La Metamorfosis, ¿Existencialista o Expresionista?

El siglo XX se conoce como el periodo en el que la sociedad comenzó a cuestionar la vida e incluso la existencia de los propios humanos; Este cuestionamiento hizo que se llevaran a cabo una serie de movimientos. Entre los cuales podemos encontrar el Existencialismo, Surrealismo, Expresionismo, Romanticismo, Decadentismo, entre otros. Todos ellos compartían el fin de analizar la condición humana a su manera. “Las corrientes vanguardistas nacen entre las dos guerras mundiales, expresan una ruptura con la tradición, tienen como discurso central la polémica, ostentaban un tono agresivo y en contra de las corrientes clásicas ya establecidas” (Pérez, 2013)

En el caso del existencialismo, se destaca la idea de que el ser humano está condenado a ser libre, es decir, arrojado a la acción y así mismo responsable de su vida sin excusas. También se afirma que la existencia procede de la esencia, esto nos lleva a que el pensamiento hace referencia a la esencia, la materialización del pensamiento hace la existencia. “El hombre depende en gran medida de la idea que se hace de sí mismo” (Gabriel Marcel, 1946). Los pensadores existencialistas afirman que los humanos son malos por naturaleza o tendientes al mal. Sin embargo, como se mencionó anteriormente, la esencia será lo que definirá al ser humano. (Referencia Cárdenas y Velasco, 2010)

Esto se puede observar en los libros El Extranjero de Albert Camus y el libro de Jean Paul Sartre El Muro, los cuales analizan la condición humana a partir de la libertad y la responsabilidad individual, de sus personajes, respecto a los significados de la vida.

En los textos se muestra los terribles sentimientos desarrollados durante la Primera y Segunda guerra mundial. Revelan el lado pesimista de la vida y la violencia interhumana de la que se es capaz “Lo más aburrido del mal es que a uno lo acostumbra” (Jean Paul Sartre, 1939).

Las ideas presentadas en las novelas obligan al lector a enfrentar y reflexionar sobre el sentido de la vida y cuestionar sobre el sentido de la vida y cuestionar sobre la existencia del hombre. El mundo que se presenta en ellos es pesimista e irónico “Tan cerca de la muerte… me sentía pronto a revivir todo” (Camus, 1942). Estos sentimientos los llevan a tenerle una indiferencia al mundo. “Me es indiferente y podríamos hacer lo que tú desees… no significa nada para mi” (Camus, 1942). Aunque el desinterés es característico del existencialismo. También se puede encontrar en la Metamorfosis, novela que narra la vida de Gregorio Samsa después de convertirse en un insecto. Su vida no resulta fácil, pues debe convivir con su familia, la cual es el reflejo de una sociedad indiferente y el materialismo que se tiene. La obra muestra una existencia angustiosa y un pesimismo irónico, a los cuales se les suma el elemento fantástico y absurdo de la conversión del personaje

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