La Porota

Muchos de los que han conocido la historia de “La Porota” sostienen que esta obra de Hernán del Solar no sólo es especial por su contenido sino también por ayudarlos a recordar con alegría una etapa mágica de la vida como lo es la infancia.

Por esa razón, en los párrafos siguientes cada uno de ustedes, hayan leído o no el mencionado libro, encontrarán una serie de datos que, más que dar a conocer un argumento, invitan a disfrutar de un viaje en el tiempo lleno de aventuras fantásticas gracias a sus referencias infantiles.

Como toda obra literaria, “La Porota” no tiene fecha de vencimiento. Su contenido pudo haber cautivado a niños que hoy son adultos y a los hijos de éstos, pero aún conserva esa esencia que le permite asombrar a todo aquel que la lee, sea adulto, adolescente o niño de la generación actual.

En esta novela que ha sido representada en teatro en varias oportunidades, el escritor chileno Hernán del Solar (quien a lo largo de su trayectoria se destacó como crítico, ensayista, poeta, novelista y creador de cuentos infantiles), nos acerca la historia de Porota, una niña cuya vida se transforma a partir de la desaparición de Mimí, su muñeca de trapo. Al emprender la búsqueda de su compañera, la pequeña descubre un secreto que la lleva hacia un mundo que, hasta entonces, era desconocido para ella: el de la tierra natal de su muñeca, una ciudad habitada por seres de trapo que intentan continuar con sus vidas a pesar del peligro que representan los murciélagos en ese rincón del planeta.

La síntesis de “La Porota” termina aquí. Sabemos que más de un lector considerará insuficiente la descripción de la historia pero esa es, precisamente, la excusa que tienen a su disposición para animarse a descubrir el relato completo.

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