La noche boca arriba Julio Cortázar
Enviado por pedrololito • 15 de Abril de 2020 • Tarea • 683 Palabras (3 Páginas) • 365 Visitas
Página 1 de 3
La noche boca arriba
Julio Cortázar
[pic 1]
Alumna: Saúl Ludmila
Materia: Literatura
Especialidad: Programación
Curso: 6º2
Actividad
- Transcribe los elementos fantásticos que encontraste en el cuento.
- A medida que avanzamos en la lectura del cuento “La noche boca arriba”, podemos señalar la descripción de más de una historia. Responde:
- ¿Cuáles son?
- ¿Dónde se desarrolla cada una?
- ¿Qué personajes las protagonizan?
- Responde:
- ¿Cuál historia es real y cual es imaginaria?
- ¿Qué elementos u objetos parecen confundirse, relacionarse o asemejarse entre las “historias”?
- Transcribe dos oraciones donde el narrador cambia de una historia a otra.
- ¿Qué cosas describe el moteca cuando dice “Un enorme insecto de metal que zumbaba y luces verdes y rojas que ardían sin llama ni humo”?
- ¿En qué persona gramatical está narrado el cuento?
RESOLUCION
- "... Como sueño era curioso porque estaba lleno de olores y él nunca soñaba con olores"; en este ejemplo se incluye una pesadilla que tiene el personaje principal, el hecho es que en ningún sueño pueden percibirse olores.
"... Sintió el sabor del caldo..."; en este ejemplo se ve un elemento fantástico como el sentir sabores en un sueño.
- El accidente y lo que sucede en el hospital y el sueño como un moteca perseguido por tribus enemigas para ser sacrificado.
- El cuento se desarrolla en dos historias simultáneas, un sueño y la realidad. La realidad sucede en la guerra florida y el sueño, según las descripciones del cuento, en la época actual.
- En la realidad protagoniza en indio moteca y en el sueño un hombre normal.
- La historia real es la del indio moteca y la imaginaria es la del hombre se accidenta y lo mandan al hospital.
- El hecho que se asemeja en ambas historias es la expresión “Boca arriba”, en la realidad él esta boca arriba a punto de ser sacrificado y en el sueño esta boca arriba en la camilla del hospital.
- “Como dormía de espaldas, no lo sorprendió la posición en que volvía reconocerse, pero en cambio el olor humedad, a piedra rezumante de filtraciones, le cerró la garganta y lo obligo a comprender”
“El boca arriba gimió apagadamente porque el techo iba acabarse, subía, abriéndose como una boca de sombra y los acólitos se enderezaban y de la altura una luna menguante le cayó en la cara donde los ojos no querían verla, desesperadamente se cerraban y se abrían buscando pasar al otro lado, descubrir de nuevo el cielo raso protector de la sala”
...
Disponible sólo en Clubensayos.com