La producción escrita del niño.

Actividad 16. La producción escrita del niño.

Para un niño, "hacer como lee" es una experiencia muy significativa, para el aprendizaje de la lectura y la escritura; al verse a sí mismo como un lector, aumenta su interés y placer por la lectura.

Para lograr que aquellos alumnos que son escritores en potencia se motiven y produzcan textos escritos, superando el recelo y el temor propios de la edad. Proporciona algunas herramientas para promover y desarrollar la escritura en los alumnos

Es verdad que el hecho de producir textos escritos resulta siempre un reto, incluso para aquellas personas que disfrutan de la escritura como un ejercicio de placer. Si al reto le sumamos el temor de quien se enfrenta a la página en blanco, entonces tenemos una situación que requiere de estrategias adecuadas y específicas para guiar, paso a paso, a quien quiere –o tiene– que escribir.

El tema de la escritura creativa resulta muy delicado en los niños y jóvenes. Cuando el maestro les pide producir un texto sin proporcionarles directrices concretas, el alumno indefectiblemente va a sentirse a la deriva. Más allá de esto, aunque las directrices le fuesen dadas, el alumno seguirá sintiendo cierto temor frente al pedido que se le hace de producir un texto de creación propia.

La explicación a este fenómeno se centra en algo que la autora de narrativa infantil explica con mucha claridad: el niño que ha escrito un texto propio se siente juzgado por la persona que lo lee. Esto sucede porque el texto, necesariamente, tiene un destinatario. Uno escribe siempre para "alguien". Por esta razón, si el texto que el alumno produce no es leído por el maestro, o es recibido por éste sin la importancia que se merece, entonces el niño sentirá que algo de sí su producción escrita no ha sido tomada en cuenta. En consecuencia, perderá interés por escribir.

De esto se desprenden dos cuestiones fundamentales:

1. Cada texto producido por el alumno debe ser leído lo más rápidamente posible por el maestro, siempre con un comentario de retroalimentación. Esto permitirá al alumno evidenciar el interés del maestro por conocer lo que ha querido expresar a través del texto escrito.

2. Si los textos producidos son leídos en voz alta por los mismos alumnos, frente al resto de la clase el maestro jamás debe permitir que se produzcan burlas por parte de los otros compañeros, o que éstos no presten atención a lo que su compañero está leyendo, pues una situación de esta naturaleza va a ocasionar que el niño deje de producir textos o no los quiera volver a leer en público

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