La sociedad del cansancio Byung-Chul Han

Byung-Chul Han, en este libro nos dice que la sociedad occidental está sufriendo un cambio y nos lo dice con esta frase “el exceso de positividad está conduciendo a una sociedad del cansancio”. Nos hace ver que esta sociedad actual basada en la famosa frase Yes We Can produce individuos agotados, fracasados y depresivos.

Según Hang, un individuo puede ser más resistente a una presión externa que a la interna porque considera que la explotación a la que uno mismo se somete es mucho peor que la que venga de fuera, ya que cuando uno mismo se presiona se ayuda del propio sentimiento de libertad.

Además , al explotarse a sí mismo resulta más productivo y eficiente ya que es el propio individuo el que decide  exprimirse al máximo, es decir hasta la extenuación.

Por otra parte, en esta sociedad no tenemos una figura esclavizadora o tirana que esté por encima de nosotros y a la que podamos enfrentarnos y decir No. Nuestro propio sistema social ha hecho desaparecer aquello a lo que uno podría enfrentarse. Nosotros mismos somos víctima y verdugo, explotador y explotado y por ello no tenemos sobre quién revelarnos como no sea contra nosotros mismos lo cual es muy difícil.

Me detendré en alguna de las  ideas de Han que he me ha hecho reflexionar, como las siguientes:

Nuestra sociedad premia el multitasking y la positividad, aspectos enormemente negativos para el buen desarrollo humano.

El multitasking es una técnica de atención imprescindible para la supervivencia. Se debe distribuir la atención en diversas actividades, es decir la preocupación por una buena vida y además con éxito, nos lleva obsesivamente a preocuparnos únicamente por la supervivencia dejando de lado, el llamado aburrimiento profundo que sería de gran importancia para entrar en un estado creativo, es decir dejando de lado la situación de estado contemplativo, el cual permite al individuo la actitud de relajarse y poder escuchar, tan fundamental para evitar, por ejemplo un ego hiperactivo.

También nos dice que un individuo depresivo que considera que “Nada es posible” solamente puede decirse en una sociedad que cree que ”Nada es imposible”, es decir

no poder más conduce a un reproche a sí mismo y a la autoagresion.

Por otro lado nos habla de la rabia como una manera de interrumpir un estado y posibilitar uno nuevo. Sin embargo, en la sociedad actual se está dejando de lado la rabia y se está dando paso al enfado, el cual no permite la posibilidad de detenerse en el presente y cuestionarlo, como el estado de rabia, no permitiendo que se produzca un cambio decisivo.

Han dice: “No vivimos en una sociedad disciplinaria de hospitales psiquiátricos, carteles cuarteles, fábricas” sino en una sociedad de rendimiento llena de “gimnasios, bancos, aviones, centros comerciales”. El peligro llegara a nuestra sociedad cuando la ausencia de perfeccionismo y obsesión por el trabajo y por tanto exceso de positividad nos convierta en sociedades suicidas donde lo más destacado sea el “si se puede”. La  sociedad del rendimiento es una sociedad activa frente a una sociedad disciplinaria y dice que se está convirtiendo en una sociedad del dopaje.

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