OPINIÓN PERSONAL DEL LIBRO: LA INTERRUPCIÓN LEGAL DEL EMBARAZO, EL CASO DE LA CIUDAD DE MÉXICO

OPINIÓN PERSONAL DEL LIBRO: LA INTERRUPCIÓN LEGAL DEL EMBARAZO, EL CASO DE LA CIUDAD DE MÉXICO

        El presente libro refiere una revisión histórica de las condiciones sociales, políticas e ideológicas en las cuáles se enmarca la lucha por la interrupción legal del embarazo a lo largo de la República mexicana, pero que converge en el caso de la Ciudad de México. Así mismo traza un mapa que muestra las zonas del país, los personajes relevantes, organismos e instituciones y fechas en las que dicho tema es debatido y bajo qué circunstancias.

Debo decir que la lectura de éste texto ha sido de especial relevancia para mí, en virtud de que nunca había explorado el tema de manera profunda y objetiva, al menos no en su desarrollo histórico; simplemente  me quedaba en un plano subjetivo relacionado con posturas sobre todo éticas e ideológicas que circunscriben mi educación eminentemente católica y desde ésta perspectiva siempre me resultó complicado tomar una postura con respecto al tema, curiosamente no así en otros tópicos aunados a la sexualidad femenina, género, preferencia genérica entre otros. Mi postura de hace digamos 20 años, era un rotundo no al aborto, principalmente debido a mis creencias, sobre cierta concepción de la divinidad: “Dios da la vida y él la quita”, “somos seres dotados de alma”, “no matarás: es uno de los mandamientos de la ley de Dios”, fui miembro activo de movimientos católicos como: alumna de catequesis por muchos años de mi niñez e incluso adolescencia y grupos de pastoral infantil (ahora catequizando), sin embargo, desde muy pequeña comenzaron a develarse para mí, discordancias entre dichos discursos, por una lado la vida como valor supremo y por otro actos en donde se había matado en nombre de Dios, no obstante el peso de mi educación era más fuerte que mi propia lógica, ¿quién era yo para cuestionar las formas?. Mi proceso de individuación era muy precario aún.  

A la par del avance en mis estudios, se ha dado mi evolución personal y cada vez he tenido que sortear difíciles episodios con respecto a mi sexualidad, mis vínculos, y mi rol, retomando: Hace 10 años mi referencia cercana a un aborto era por mi madre, quien me reveló haber “perdido” a dos bebés cuando yo era niña, sufrió tanto física como emocionalmente, y lo mismo con todas aquellas historias de mujeres a las que “se les había venido un niño”, nunca supe de alguien que abortara “por gusto”, pero sí supe de amigas que tenían intenciones de, pero nunca supe si llegaron a logarlo o no. Siempre en las sombras, siempre temas escondidos. Hace 7 años tal vez ese no ya no sería tan rotundo, sin embargo debido a un trance personal (infertilidad) me resultaba difícil de aceptar que alguien quisiera terminar con algo por lo que yo había luchado por tantos años: ser madre, sin embargo llegué el buen punto de juzgar no a mi misma sino al entorno, reformular mis cuestionamientos del “¿por qué no puedo ser madre?”, al “¿para qué quiero serlo?, ¿en verdad es un deseo genuino o bajo qué circunstancias se gesta mi deseo incumplido y además se transforma en sufrimiento?”, fue largo el camino de darme cuenta hasta dónde me alcanzaba el halo patriarcal.

Yo soy leonesa, vivo en el corazón de un estado conservador y católico, por eso narro mi historia brevemente ya que está permeada por todo lo que Marta Lamas narra en este libro, por supuesto que identifico a todxs los que participan e incluso tengo recuerdos vagos sobre las notas en los periódicos (Fox, Cecilia Romero). La autora hace referencia a Guanajuato como parte de la facción conservadora del país, que bajo argumentos supuestamente humanistas, se ha mantenido incluso a la cabeza en ciertos momentos (por ejemplo cuando Fox modificó la ley) como abanderada de propuestas que impiden que se lleve a cabo la interrupción legal del embarazo. Y aunque yo formo parte de dicha sociedad, y de alguna manera he estado cerca de dichos episodios, no dejó de sorprenderme el papel de los dirigentes estatales y sus ideas; me reía sola a leer sus argumentos vertidos en éste libro, tal y como yo escuchaba en las charlas de mi familia o de mis círculos cercanos: “la dignidad de las mujeres donde queda”, “se promoverá el libertinaje en la juventud”, “primero andan de locas y luego no quieren acatar las consecuencias”, me duele mirar tanta misoginia y desprecio hacia las mujeres, me duele saber que yo formaba parte de eso.

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