Papel de la mujer dentro de la novela de Dracula.

“Papel de la mujer dentro de la novela de Drácula”

Drácula, novela escrita por Bram Stoker. Es una obra que surge a partir de un movimiento literario que se empieza a desarrollar en Inglaterra a finales del siglo XVIII. Se caracteriza por ser una expresión estética, emocional e incluso filosófica; es conocida como la literatura “Terror gótico”. Dentro de la sociedad y la literatura las mujeres empezaron a tener otro papel ya que se le otorgan algunos de los privilegios de un hombre en la época victoriana.

La literatura gótica posee una estructura que se caracteriza por tener, horribles escenarios, sentimientos prohibidos y caos sobrenatural. El gótico quiere mezclar las normas del Racionalismo, enlazando elementos sobrenaturales y elementos inhumanos. La obra de Stoker es un claro ejemplo del uso de estos elementos.

Drácula pertenece al movimiento gótico, que surge en Inglaterra a finales del siglo XVIII. El ideal de este nuevo movimiento era:

La incapacidad del hombre caído por comprender plenamente los inquietantes guiños de un reino sobrenatural que aún parecía no haber llegado; la constante perplejidad ante los fenómenos metafísicos e inexplicables; la propensión a una conducta perversa o inmoral, sin regla ni medida, y un sentido de culpa sin nombre combinado con la sospecha de que el mundo externo no es más que una ilusión de la mente: tales son los elementos principales que opusieron los románticos oscuros a la corriente principal del romanticismo.蜉

A finales del siglo XVIII y principios del XIX, el objetivo principal de las obras góticas es inspirar el terror, ya que incorporan elementos macabros y sobre naturales; Drácula es una de las obras más representativas de esta corriente, debido a que el autor emplea todas las características que forman este movimiento.

Drácula cambió el rumbo de la novela gótica, porque reúne muchos elementos de las obras vampíricas anteriores y crea una obra donde todos estos elementos están unidos. En la novela de Stoker el vampirismo es considerado una enfermedad sobrenatural, contiene una serie de insinuaciones eróticas, sangre, muerte un estilo marcadamente victoriano.

La novela, nos presenta una gran variedad de personajes, en su mayoría hombres pero hay dos mujeres que comparten el protagonismo. Mina Murray es la protagonista de la novela, es una joven muy bella, nos demuestra la pureza y la fragilidad, Stoker nos la presenta como la esposa ideal ya que es fiel y leal a su marido. A lo largo de las narraciones, el autor nos muestra estos rasgos de una forma más directa que en el resto de los personajes y esto se nota en una serie de comentarios de Van Helsing por ejemplo, pero nunca se va a mencionar una equidad entre los personajes femeninos y masculinos.

Lucy Westenra, a diferencia de Mina que proviene de una familia adinerada, es una joven vivaz la cual es reconocida por su belleza, la pureza y su dulce naturaleza. Esta serie de cualidades es lo que atrae a sus tres pretendientes, los cuales serán una parte muy importante para la obra. Lucy al igual que Mina nos demuestran el papel que deben de seguir las mujeres durante la época victoriana ya que era una época en donde los valores debían de estar presentes en todo momento.

Nuestras dos protagonistas son la personificación de la pureza y fragilidad femenina, ya que el autor hace alusiones al estereotipo de la mujer en la época victoriana. A lo largo de la novela aparecen una serie de ejemplificaciones respecto a la inferioridad de las mujeres en lo que respecta a la fuerza, al valor, a la capacidad para enfrentarse a situaciones y una de las más importante las mujeres son las víctimas del conde Drácula. Un claro ejemplo es un fragmento del libro en el cual Lucy dice que:

“A los hombres les gusta que las mujeres, y sin duda sus esposas, sean tan leales como ellos; pero me temo que las mujeres no siempre son tan leales

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