Resumen del libro Teoría y Practica de la propaganda de Edmundo González Llaca

Opinión pública y propaganda

• Bárcena Rivera Karen Aylen
• Fecha entrega: 21 de mayo de 2022

TEORÍA Y PRÁCTICA DE LA PROPAGANDA – Edmundo González Llaca

La propaganda ha sido fundamental para la sociedad, pues ha ayudado a la formación de esta misma, es tan significativo su papel que algunos autores le atribuyen una influencia determinante en la gestación y triunfo de movimientos y conflictos como la Revolución Francesa, en la victoria del socialismo en la Unión Soviética y el ascenso de Hitler al poder, dejando en claro que la dimensión de su poder, como arma de lucha o como instrumento de legitimación es grande. [pic 1]

A diferencia de la publicidad la cual es una rama de la persuasión colectiva y una institución rentable que tiene por objeto promover las ventas, y en ese sentido su ético se mide contabilizando las ganancias, en cambio, la propaganda de manera directa, no lo es, y en virtud de ello no se encuentra presionada para obtener un éxito “cuantificable”.

La propaganda se integra como un instrumento de la acción política, bajo cuya sombra evoluciona y se transforma. Esta se puede clasificar en diversas maneras como:

• Propaganda de integración: Es la más pura de las propagandas, sus intereses no son buscar el apoyo a algún grupo o teoría política. Se caracteriza por estar basados, más que en los sentimientos o en la estética, en la reflexión y en la buena conciencia de los receptores. Se destaca como subgénero la propaganda cívica (su objetivo es capacitar al ciudadano en el ejercicio de los derechos y el cumplimiento de sus deberes dentro de la comunidad).  [pic 2]
• Propaganda de agitación: Se menciona una diferencia entre el propagandista el cual inculca muchas ideas a una sola persona o a un pequeño número de personas, mientras que el agitador inculca una sola idea o un pequeño número de ideas, pero, en cambio, las inculca a toda una masa de personas. Tiene como propósito provocar turbulencia, subversión y cambio. Caracterizándose por sus métodos explosivos, pasionales y de tensión, además de, que su duración es normalmente breve.
• Propaganda negra o acción psicológica: Se denomina de esta manera cuando la fuente de emisión oculta su identidad, que en la mayoría de ocasiones al desprestigio del emisor o de la propaganda misma, que inmediatamente es observada con desconfianza por los receptores.
• Propaganda electoral: Este se caracteriza por los lapsos cortos, lo que impone una gran actividad en todo suceso, para su éxito, no solo es necesario el buen manejo de mensajes, sino, también de una serie de dispositivos. Otra de sus características es su globalización, pues se debe dirigir a todos los sectores de la población, con el único requisito de que tengan capacidad de votar.
• Propaganda de guerra: También es llamada guerra sicológica, nació como un medio de complementar las operaciones militares.
• Contrapropaganda: Tiene como contenidos, tanto desacreditar o ridiculizar al adversario como anular los efectos de la propaganda anterior.

Entre los padres del pensamiento occidental, es Aristóteles el primero que propone un modelo para estudiar la comunicación, en su libro El arte de la retórica. El estratega considera en su obra tres componentes en la comunicación: El orador, el discurso y el auditorio, ósea: a) Quién habla b) Sobre qué habla y c) Quién lo escucha. [pic 3]

La propaganda implica la necesidad de establecer una comunicación, y para nuestros efectos el modelo que aceptamos es el siguiente:

1. La situación económica, política y social en que la comunicación se realiza
2. El emisor[pic 4]
3. El codificador
4. El mensaje
5. El medio
6. El decodificador
7. El receptor de la comunicación

La propaganda no se agota en el acto de comunicar, su finalidad, como lo señalo Goebbels, es la conquista de las masas, es decir, nuestra meta es convencer e impulsar a la acción. Es por eso que agrega los siguientes elementos:

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