Trabajo del libro “¡BIEN HECHO!

Resumen Inicial

El presente documento consiste en un ensayo personal del libro “¡BIEN HECHO!, el cual trata de una manera amena el tema de “liderazgo” como contenido principal de dicho libro.

A lo largo del presente documento se presentan algunas vivencias de liderazgo situacional que “Wes Kingsley”  en sus viajes de negocios y que decide ponerlos en práctica en la empresa donde labora y también se da cuenta que las técnicas aprendidas también pueden  ser aplicadas  en todas las áreas de su vida tal es el caso del hogar, ya que con dichas técnicas se puede lograr la colaboración de todas las partes.

Introducción o Justificación

El liderazgo y su aplicación en todos los campos de la vida cotidiana  de las personas, ha sido un factor determinante para poder influir en la colaboración de los sujetos, y es por eso que Ken Blanchard Thad Lacinak y otros colegas, plasma en su libro “BIEN HECHO” varios tips planteados en forma de parábola para que el lector de dicha obra lo pueda recordar de una mejor manera y poderlos aplicar en las diferentes situaciones que se le presenten al lector.

Wes Kingsley un hombre de negocios viaja a Orlando florida para concretar algunos de estos, pero como era costumbre, decide descansar y relajarse en los lugares que visita  y decide visitar el famoso parque acuático Sea World de Disney para poder observar el famoso espectáculo de las ballenas y así poder liberarse aunque sea por un momento de los problemas de la empresa y de su casa.

Al observar el espectáculo protagonizado por las ballenas, Kingsley siente tanta admiración de ver las piruetas realizadas por esos enormes animales y al terminar el espectáculo las ballenas saludaron al público de una manera muy sincronizada, lo cual hace que venga a su mente una serie de inquietudes tales como “como lo hacen”, y cuál era el principal estímulo para lograr motivar a esos increíbles animales a hacerlo y dichas inquietudes lo hacen bajar a hablar con los entrenadores a que le rebelaran el secreto de como lograban hacer que estos animales realizaran las rutinas a lo cual Dave Yardley (el entrenador), le respondió que a tanto a estos animales como a todos los demás, no se les podía castigar para forzarlos a hacer lo que se quería si no que al contrario se ganaba su confianza y que gran labor le había costado hacer que sus subalternos realicen estas tareas para no perder la confianza entre estos mamíferos y los entrenadores, al darle semejante catedra de motivación, por la mente de Kingsley no dejo pasar por alto una asociación de estos enormes animales con las personas y que quizá se podría aplicar el mismo método para los humanos comenzando con eliminar las malas actitudes, formas de pensar o de reaccionar, lo cual no se lograría de la noche a la mañana pero con el paso del tiempo en un ambiente de confianza, si se podría.

En su siguiente cita de negocios la cual se realizó en Atlanta conoce a  Anne Marie Butler, una consultora de temas empresariales, expone el método llamado “bien Hecho” y en el cual que se trataron tres aspectos importantes en el tema de desempeño: activador que les hará saber a la gente que es lo que se quiere de ellos, comportamiento que consiste en observar el desempeño y la consecuencia que será la respuesta del comportamiento esperado o no esperado, y cuando la respuesta es la que se espera, los gerentes tendrán la obligación de expresar frases como “buen trabajo”, “bien hecho” acompañado de unas palmaditas en la espalda.

Otro de los puntos que Anne Marie Butler manifestó y que a  Kingsley le pareció importante fue que no se podían dejar pasar por alto eran las malas actitudes de los colaboradores y que estas en lugar de reprenderlas, se tenían que aprovechar para tener un acercamiento con los empleados y manifestarles de manera pacífica a los empleados las consecuencias que se podrán tener si se continúan con ellas y de la misma manera, hacerles saber los beneficios que se tendrán si estas desaparecieran.

Al regresar del viaje Wes Kingsley decide poner en práctica el método “bien hecho” con una compañera de trabajo y le fue muy bien lo cual lo motiva a tratar el tema en una  reunión el día siguiente con los demás compañeros los cuales no quedaron muy convencidos de su efectividad y muestran cierta resistencia al cambio; por la tarde de ese mismo día Wes  aborda a Meredith, una de estas personas que no había quedado muy convencida y le pregunta si puede hablar un momento con ella a lo cual ella le responde que no tenía mucho tiempo a lo cual dave le dice: “Me siento muy impresionado de la manera como usted ha estado tratando con nuestros proveedores” con lo cual Wes logra persuadir la negativa y se logra ganar la confianza  y logra establecer el dialogo y ella le comenta que a pesar de tener algunos problemas de retraso de pedidos que no ha podido solucionar, al cual Wes la interrumpe y le dice: no ha podido solucionarlos… por el momento, pero estoy seguro que si lo lograra, las palabras de Dave dibujaron una Sonrisa en Meredith por percibir la confianza que tenía el de su trabajo y para recalcar esto Wes le dice que otras personas de la empresa han tenido el mismo problema con el mismo cliente y que confía en ella para poder entrenar a estas personas para resolver problemas del mismo tipo y que ellos podrían aprender mucho de ella, a lo cual Meredith respondió de una manera entusiasmada: “claro con gusto lo haré”.  Wes logro cambiar la mala actitud de Meredith a una positiva queriendo cooperar con querer alcanzar el fin que perseguía la empresa.

Al llegar a su casa  Wes puede observar que también ahí existían problemas de actitud muy similares a los del trabajo,  y al mismo tiempo, puede observar  una discusión entre su esposa Joy y a su hija Allie, para tomar la decisión de llevarlas a  Orlando para que conocieran a su amigos su amigo Dave y la entrenadora Pam, quienes en su visita,  explicaron el método “BIEN HECHO” a Joy y las niñas, quienes quedaron encantado y prometieron aplicarlo en sus relaciones con la  familia y amistades.

Al regresar del viaje Wes y su esposa deciden adoptar el método “Bien Hecho” en  casa y por su parte las hijas también se comprometen a cambiar las malas actitudes por buenas  tales como mantener limpias y ordenas sus habitaciones, colaborar en la limpieza de la casa, entre otras a lo cual la madre respondió: si ustedes están dispuestas a cambiar las malas actitudes, por parte de su papa y yo les daremos respuestas de “Bien Hecho” a cualquier mejora que se tenga en casa.

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