Importancia nutricional

Década de 1970 a 1990: enfermedades crónicas relacionadas con la dieta y suplementos: La aceleración del desarrollo económico y la modernización de la agricultura, el procesamiento de alimentos y las técnicas de formulación de alimentos siguieron reduciendo las enfermedades por deficiencia de un solo nutriente en todo el mundo. La mortalidad coronaria también comenzó a disminuir en los países de ingresos altos, pero estaban aumentando muchas otras enfermedades crónicas relacionadas con la dieta, como la obesidad, la diabetes tipo 2 y varios cánceres.

En consecuencia, las pautas dietéticas de 1980 se mantuvieron muy centradas en los nutrientes, esto llevó a una proliferación de productos alimenticios elaborados industrialmente bajos en grasas, grasas saturadas y colesterol y fortificados con micronutrientes, así como a la expansión de otras tecnologías enfocadas en nutrientes para reducir las grasas saturadas, como la hidrogenación parcial de aceites vegetales.  Por lo tanto, tanto en los países de ingresos bajos como en los de ingresos altos, por razones en parte superpuestas, un enfoque específico de nutrientes continuó dando forma tanto a la investigación científica como a las intervenciones de política.

Década de 1990 hasta el presente: debates sobre la evidencia, patrones de dieta, la doble carga Los estudios de cohorte proporcionaron, por primera vez, a nivel individual, hallazgos ajustados multivariables sobre una variedad de nutrientes, alimentos y patrones de dieta y una diversidad de resultados de salud. Los ensayos clínicos permitieron realizar más pruebas de cuestiones específicas en poblaciones, a menudo de alto riesgo, en particular los efectos de los suplementos vitamínicos aislados y, más recientemente, los patrones de dieta específicos. Los estudios prospectivos de cohortes y de intervención dietética mostraron que un enfoque en la grasa total, un pilar de las pautas dietéticas desde 1980, producía pocos beneficios para la salud mensurables; a la inversa, las recomendaciones basadas en nutrientes para alimentos específicos como huevos, carnes rojas y productos lácteos.

En los países de ingresos más bajos, han surgido preocupaciones sobre los suplementos vitamínicos. Además, un aumento vertiginoso de las enfermedades no transmisibles en estos países ha dado lugar a un nuevo enfoque en la "doble carga": la desnutrición tanto convencionalmente concebida que conducen a una mala salud materno infantil y a la desnutrición moderna que provocan obesidad, diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares y cáncer. Sin embargo, después de décadas de enfoque en la comunidad nutricional internacional en suplementos vitamínicos, fortificación de alimentos y alimentos básicos con almidón para proporcionar calorías, el cambio necesario hacia la calidad de la dieta se ve frenado por una inercia considerable. Incluso cuando se consideran las enfermedades no transmisibles, el enfoque predominante está en la obesidad en lugar de las diversas vías de riesgo y condiciones afectadas por la nutrición, lo que facilita un concepto engañoso de “sobre nutrición” en lugar de una composición dietética poco saludable como la raíz del problema.

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