“EL INSULTO” ¿PUEDE UNA DISCULPA SER SIGNO DE DECENCIA Y NO DE DEBILIDAD?

 “EL INSULTO” ¿PUEDE UNA DISCULPA SER SIGNO DE DECENCIA Y NO DE DEBILIDAD?

Autor: Leonel Andrade (C.C. 1007719240)

Basta una pequeña chispa para provocar un incendio. Precisamente, la trama del rodaje de origen libanés nos presenta cómo un insulto entre dos personas se puede intensificar hasta convertirse en una enorme disputa política y social. De la misma manera, transmite un mensaje, una lección moral, y es que, una reflexión profunda de los hechos, que involucre severamente la empatía, dirige al respeto, a la tolerancia y a la prevención de problemas sociales.

El filme “El Insulto” nos ubica en la capital de Líbano, en tiempos actuales e inicia mostrando el conflicto político que existe entre la comunidad cristiana y los refugiados palestinos. Sucesos históricos, guerras y enfrentamientos que se han arraigado durante años, demarcan odio y tensión entre ambos grupos, y también trazan la brecha que entabla el conflicto de Tony Hanna (cristiano libanés) y Yasser Salameh (refugiado palestino). La pelea se da porque Tony, al regar las plantas de su balcón, accidentalmente salpica por la tubería a Yasser. Yasser arregla la tubería, pero Tony reacciona con una actitud ofensiva y la destruye, Yasser lo insulta, Tony exige una disculpa, pero Yasser siente que no es justa, que Tony solo la exige para sentirse una raza superior y que los palestinos de alguna manera están en deuda con los libaneses (musulmanes) por dejarlos refugiarse en su país.

La pelea se transfiere a los tribunales porque Tony demanda, puesto que días posteriores al insulto, Yasser, obligado por su jefe de trabajo, en un intento por reconciliarse con Tony lo agrede físicamente, porque Tony lanza ofensas sobre su raza. El proceso de la demanda tiene una solución prometedora y lo interesante es ver cómo se desarrolla.

Tony, desde una postura intransigente y empecinado en su odio por los palestinos, demuestra que quiere hacer sentir a Yasser culpable: que su raza palestina es una invasión, que no debería estar en su ciudad y que, en resumidas cuentas, son culpables de que su país no prosperé. Por otro lado, Yasser, en su angustia, se entrega a las autoridades y en el primer juicio lo declaran inocente, la actitud afrentosa de Tony favorece la posición de Yasser. Tony, en medio de su enojo opta por apelar el primer veredicto del juez y se asesora con uno de los mejores abogados de la capital. La hija del abogado, que también es abogada, es quien apoya a Yasser, ella se da cuenta que existe una injusticia y que las condiciones sociales actuales no favorecen a los refugiados palestinos que habitan la ciudad.

El juicio toma varias sesiones, donde no solo se trata el ámbito judicial, sino que el caso provoca desmedidos conflictos en las calles, en los medios, entre personas que apoyan a Yasser y otras que apoyan a Tony. En la lucha judicial cada abogado desentraña una dimensión de profundas heridas que tienen Tony y Yasser, hechos traumáticos del pasado que tienen ambos y que viven en el presente. Finalmente, el juicio concluye con una reflexión empática por parte del abogado de Tony, quien se da cuenta de algo más profundo que el insulto y dice que, aunque ambos vienen de regiones conflictivas y han estado en una posición polarizada desde el pasado es tiempo de perdonar al prójimo y de continuar adelante.

Las actitudes, la visión y el comportamiento cultural de una sociedad en específico están determinados por diferentes factores, principalmente se han originado por la distribución geográfica; es así como han surgido las primeras guerras por el poder, por el control de territorio y por diferencias en las creencias de cada sociedad. Pero, si miramos desde una perspectiva más general, el resurgimiento que ocurre después de una guerra florece una nueva transformación cultural, es decir, nos impulsa a tener cambios o adaptaciones que definan una nueva convivencia. Sin embargo, los precedentes de una guerra o de un conflicto dejan secuelas en los mismos individuos que de algún modo no se pueden o no se quieren olvidar.

...