No Me Trajo Nada El Ratón

No me trajo nada el ratón

En un callejón olvidado del país de gatolandia se encontraba maloso, un gato arrabalero, pendenciero y jugador. Se encontraba muy enojado porque no llegaba tramposo, un gato bastante servil, cruel y lambiscón, al que había ordenado maloso que reuniera a todos los gatos de la comarca porque tenía que tratarles un asunto muy importante. En eso estaba cuando escuchó unas pisadas que lo pusieron sobre aviso, quien anda allí? Nosotros! Contestó una voz, bastante familiar… nosotros? Nosotros quiénes? Volvió a preguntar maloso al darse cuenta que se trataba de sus achichincles tramposos. Pues tramposo y miedoso!!!... Cerciorándose de que eran sus amigos, los dejó entrar… Vaya! Hasta que por fin!. Llegó tramposo acompañado de un gatito y lindo y cortés, sus modales denotaban que era minino fino y delicado, no acostumbrado a los peligros de la calle. Eso enfadó de nuevo a maloso, ya que en esos momentos lo que menos necesitaba era un gato con esas características, sino más bien todo lo contrario, reclamó a tramposo su extraño proceder al haber llevado a ese remedo de gato que solamente les iba a estorbar lo que él necesitaba eran gatos audaces, fuertes, que no le tuvieran miedo al peligro, que no les importara perder una o más vidas, porque lo que tenía que proponerles era sumamente arriesgado… Tramposo, por qué no me hiciste caso enojado exclamó…

Tramposo apenado se disculpó diciéndole que no había encontrado a ningún gato de la pandilla, y al único que había podido convencer para que lo acompañara era a Miedoso, pero que no se preocupara, que al fin y al cabo lo tenía a él para lo que gustará mandar y ordenar. No de muy buena gana Maloso aparentó creer lo que le decía Tramposo malhumorado les explicó el motivo de la reunión asuntó que alarmó enormemente a los gatos, se trataba ni más ni menos que de interceptar al ratón encargado de cambiarle a los niños los dientes que se les caen, por monedas, y robarle su dinero, queeeeee incrédulos preguntaron Miedoso y Tramposo, lo que oyen! Robarle su dinero al ratón, je jeje, dudaban los gatitos, y trataron de hacerle ver a Maloso lo osado de su plan, ningún gato se había atrevido antes a hacer algo semejante, existían tratados internacionales celebrados por sus abuelos gatunos y los abuelos ratoniles, en los que los gatos se comprometían a respetar al ratón comisionado para realizar tan importante comisión, intentaron persuadirlo para que abandonara esas locas ideas ya que a los castigos que se exponían si eran descubiertos serían terribles. Pero no entendió razones, él lo único que quería era vengarse de su amo Juanito, un simpático niño al que se le acababa de caer un diente, Maloso se enteró de que lo había escondido debajo de la almohada, con la esperanza de que el ratón se lo cambiara por algunas monedas, para comprarle un regalo a su mamá, sus amigos le preguntaron que cuál era su enojo contra Juanito, si el siempre lo había tratado muy bien, “es un niño muy bonito” le dijeron, pues no tiene nada de bonito, me había tratado muy bien, hasta hace unos días que compró a Sultán, a Sultán???? Preguntaron sus amigos, y quien es ese????? un perro! Un perrooooo???? Dondeeeeee????? Gritaron asustados tramposo y miedoso, mientras salían despavoridos tratando de ocultarse en algún lugar, Maloso los frenó y les narró el suplicio al que había estado sometido desde que llegó el tal Sultán a la casa…. Ya nadie la hacía caso, todos los mimos y las atenciones eran para la nueva mascota, y a él, que llevaba tantos años soportando las impertinencias de Juanito, lo relegaban a un segundo término, el colmo fue cuando a empujones lo sacaron de la casa y ya no lo querían dejar entrar, disque porque él había roto unas cortinas!!! Y mentira! El perro las había mordido, se dan cuenta de que me sobran razones para quererme desquitar??? No pues sí, respondieron los otros dos… pero de todas maneras es muy peligroso lo que quieres hacer dijo tramposo, yo mejor me rajo, a mí me da mucho miedo, dijo miedoso, sacando a relucir su personalidad, maloso al ver que no bastaban sus argumentos para convencer a sus amigos, y ante la posibilidad de ver frustrados sus planes, utilizó una de sus mejores armas, LA ASTUCIA, primero les picó el amor propio tachándolos de cobardes, para después deslumbrarlos con la promesa de que podrían conseguir sus más caros anhelos si le ayudaban a quitarle el dinero al ratón, les preguntó cuál era su máxima aspiración en la vida, tramposo le expreso su más grande deseo de tener un pescado tan, pero tan grande, que le durara para comer todo el año, ahí está!!!!! Con el dinero que te toque, te podrás comprar… hasta una ballena!!!!!! Le dijo Maloso, una b aba ballena????, preguntó tramposo, claro!!!! Y a ti que te gustaría hacer en la vida????? Preguntó maloso al otro gato, a a a mí????? Exclamó miedoso sorprendido, si, a ti insistió maloso, a mi???? A mi??? Se interrogaba el tímido miedosín… después de pensarlo un instante exclamó: Ya se! Ya se!!!! Queeeeee, preguntaron los otros dos gatos con curiosidad, A a a mi lo que más me gustaría ser ES UN GATO DE BARREADA, así como ustedes! Perder una o más vidas de vez en cuando pero no puedo… SOY COBARDE, ay ni modo, así nací y así me moriré…dijo con tristeza miedoso, Noooooo, estás equivocado, le dijo Maloso, con el dinero que te toqué podrás meterte a la mejor escuela de Karate del mundo, y serás el gato más valiente de todos! Tu crees??? Preguntó excéptico miedoso… Claro! Contestó Maloso… entonces que???? Vamos???? se observaron un momento y entusiasmados respondieron Pues vamos! total…

Bailan los GATOS MALOS

Miau, miau, miau,

Miau, miau, miau,

Miau, miau, miau,

Miau, miau, miau,

Nos vamos a ocultar para atrapar al ratón

No vamos a dejar que cumpla con su misión

Por fin acabará esa vieja tradición

Y Juanito no tendrá las monedas del ratón

Pues le vamos a quitar el dinero al ratón Miau, miau,

Y nos vamos a comprar, muchas cosas de a montón

Y prefiero comer al dinero entregar

Nos lo vamos para comer, está bueno para cenar…

Miau, miau, miau,

Miau, miau, miau,

Miau, miau, miau,

Ustedes niñitos nos tendrán que ayudar

A robarle el dinero a ese tonto ratón

Yo sin tu ayuda, se la dan al ratón

Pelearán a arañazos y con un moretón

le vamos a quitar el dinero al ratón Miau, miau,

Y nos vamos a comprar, muchas cosas de a montón

Y prefiero comer al dinero a entregar

Nos lo vamos comer, está bueno para cenar…

Miau, miau, miau,

Vamos a poner al mundo al revés

Por qué es que seremos tan malos los tres

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