PATRONES CULTURALES DE LA PELÍCULA "HASTA QUE NOS VOLVAMOS A ENCONTRAR"

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Una cinta bien desarrollada puede adentrarnos a una parte del maravilloso mundo cultural de un país, como a la vez fracasar en el intento. Hasta que nos volvamos a encontrar es una película peruana que si bien es cierto logra recoger pequeños extractos costumbristas en algunas de sus escenas, pero, en otras tiende a desinformar y estereotipar. Mayormente cuando vemos un filme, siempre nos tendemos a centrar en los personajes principales, ya que ellos son los encargados de llevarte por la travesía que se encuentra preparada para los ojos de los espectadores, desafortunadamente aquí no se cumple.

Esta historia se basa en una relación de polos opuestos. Por motivos de negocios, un arquitecto debe viajar hasta Cusco, ubicado en Perú, donde conoce a Ariana, una mujer libre y aventurera.  En este análisis nos centraremos en encontrar los patrones culturales peruanos que la película y los personajes pueden o no haber cumplido, dado que, la cinta se desarrolla en una de las ciudades más emblemáticas y con mayor concentración de cultura que tiene el país.

1. Personajes y contradicciones

Partiendo desde uno de los personajes principales nos encontramos con Ariana, una chica proveniente de Lima que es mochilera y fue a parar en la ciudad de Cuzco. A lo largo de toda la trama, la actriz no logra encajar ni transmitir los patrones culturales que posee el Perú. Esta película fue en parte criticada porque representaban al limeño como alguien de tez clara, cabello rubio y ojos claros, claramente lo opuesto a la realidad. El Perú es un país muy diverso también en lo que a características físicas se refiere, no se puede negar que existen personas como la descripción del personaje, pero, es imposible representar a la comunidad limeña de esa forma . Partiendo desde el censo que se realizó en 2017 por el INEI, nos arroja que el peruano promedio es mestizo, mayormente en las calles nos encontramos con personas de tez trigueña, ojos oscuros y cabello castaño, es por eso que, no existe una hilación en ese aspecto. En segundo lugar, encontramos una incoherencia con la vestimenta de ella, encasillada en un estilo hippie y descuidado, otro error más de la película dado que, no todas las personas del país se identifican con ese modo de vestir. Por último, el trato, una de las cosas que se podría decir que lo abordaron bien en la película, ya que, en toda la historia se pudo ver que era alguien alegre, modesta, sencilla y amable, características que el peruano tiende a identificarse según una encuesta realizada a 2220 personas por el Diario El Comercio.

Entrando a los personajes secundarios, nos encontramos a una familia cusqueña. A primera instancia, los actores escogidos representan correctamente a la comunidad de esta ciudad. Uno de ellos se llama Urpi, que quiere decir paloma en quechua, este nombre es muy concurrente escucharlo en la población del Cusco. El desarrollo de Urpi en la cinta es muy escaso, pero, en lo poco que podemos ver, podemos resaltar que, en cuestiones de vestimenta, habla y tradiciones esta correctamente encaminada. A primera instancia, Urpi es uno de los pocos personajes a los que escuchamos mencionar palabras en quechua. Esta lengua es muy arraigada a la cultura cusqueña, es hablado por aproximadamente 1,5 millones de personas en Cusco según el SIL.  Aparte de ello, la podemos ver vestida en algunos momentos con los famosos ponchos utilizados frecuentemente en ese lugar debido al clima frío, además de que ese ropaje en particular tiene en sus bordados los animales y las edificaciones más representativas de su historia. Mas allá de ello, el rumbo que le quieren dar a este personaje es la entrada a una nueva generación cultural, específicamente en la música, ya que en una parte de la película escuchamos una canción del género pop cantado en quechua por ella.

El segundo personaje es Uberto, el papá de Urpi, quien se podría decir que tuvo más desarrollo en cuanto a costumbres refiere. Según un informe de TV Perú, los cusqueños son personas trabajadoras, humildes y respetuosas, que llevan consigo una sabiduría milenaria: la buena alimentación, la agricultura y el amor a la madre tierra, traen consigo ese aire de lo tradicional y lo simple. Partiendo de esto, se podría decir que el desarrollo de los dos personajes calza con la descripción de un cusqueño promedio. El amor a la madre tierra, como lo menciona la nota, se trata de plasmar en la escena en que Uberto brinda un tributo a la Pachamama (madre tierra) a través de la preparación de la comida bajo suelo. En cuestiones de características físicas, el actor que interpreta a Uberto queda perfectamente con las facciones que tienen los pobladores de esa zona, muy aparte de ello, es el personaje que mas refleja parte de la cultura cusqueña, a través de los bailes, la comida, las festividades y su personalidad.

1. Arquitectura y paisajes

Cusco es la historia viva del Perú antiguo, cada lugar esta enriquecido de puros sucesos que datan desde varios años atrás, un misticismo que solo podrías admirar si algún día lo llegas a visitar. Plasmar toda la maravilla que tiene esta ciudad es todo un reto para los que la escogen como centro de sus películas. Situándonos en el paisaje que se presenta en la trama, este llega a ser muy variado y enriquecedor para toda la historia en sí. Los lugares que nos muestra el filme son: Las Dunas de Ica, conocido también como el desierto de Ica, ubicado en la costa peruana, las Islas Ballestas en la reserva nacional de Paracas, el mercado emblemático de San Pedro en Cusco, el nevado de Salcantay, los baños termales de Aguas Calientes, la Plaza de Armas de Puno, entre otros. El sitio más resaltante culturalmente vendría siendo la ciudadela de Machu Picchu, una de las siete maravillas del mundo. A pesar de que la cinta ha tenido un buen catálogo de paisajes por mostrar, no se ha metido a fondo en el panorama que cada una de ellas tiene para mostrar, lo que, por consecuencia trae que el espectador mire una imagen, mas no una historia.

La arquitectura de la ciudad de Cusco es uno de los elementos culturales más notorios y perdurables que tiene este lugar y obviamente no podía pasar desapercibido en la trama. Las principales características son el ensamblaje perfecto de los bloques de piedra y la calidad con la que estos están pulidos. Las casas que presentan en la película siguen esta línea arquitectónica, mostrándonos justamente ese elemento distintivo que la diferencia del resto y se logra transmitir de manera eficaz esa esencia tan inadmisible que contiene cada construcción.

1. Música y matiz dentro de la trama

Entrándonos mas a fondo en la película, ahondaremos en el tema de la música. Por más de cinco siglos, la música popular peruana es una de las expresiones culturales que mejor muestra nuestra diversidad. Sus diversas manifestaciones se han nutrido de numerosas influencias y referencias nacionales y extranjeras. En una de las primeras escenas vemos una fiesta en la comienza a sonar “Regresa”, uno de los temas mas populares de Eva Ayllón, la mayor exponente de la música criolla que tiene hoy en día Perú. Esta escena capta bien la unión que causa esta melodía en los peruanos y que nos identifica en cualquier tipo de reuniones o fiestas que tengamos. Siguiendo en este hilo musical, encontramos la presencia de dos instrumentos musicales que se suman al tejido cultural, estos son el cajón y el arpa andina, considerados como Patrimonio Cultural de la Nación, el cual hoy en día son un símbolo de nuestra identidad. En la narrativa, el cajón no tuvo la importancia que realmente tiene cuando se trata de un festejo o de un vals criollo, hubo pinceladas, pero no lo explotaron de la mejor manera. En el caso del arpa andina, tuvo su momento de brillar en la celebración del cumpleaños de uno de los personajes y se representó de la mejor manera que hallaron.

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