Vida Padres – Hijo

Vida Padres – Hijo

Al leer esta novela que trata en su contenido principal de la vida de Marco Tulio Cicerón, o para muchos “el Padre de la Abogacía” se puede dar cuenta de que trata sobre temas históricos y políticos importantes que marcaron a la Roma de hace casi dos mil ochocientos años atrás , religiosos , sociales, culturales, sentimentales y un sinfín de otros de diversa índole. En este ensayo quise tomar un tema de carácter sentimental y a la vez social, quizás la base de la sociedad en sí: La familia, o para ser más específico la relación entre Padres e Hijos.

Según la RAE, padre es el varón o macho que ha engendrado, producto de ese acto, el de engendrar, se crea o nace lo que llamamos de manera simple hijo. Así de simple, algo un poco fría la definición, sabiendo que este tipo de relación es la que ha dado vida a la civilización actual en que vivimos, partiendo desde la relación que tenia, si nos basamos en la concepción teológica de la historia, desde la relación que tenia Adán con sus dos hijos, Caín y Abel, Tulio y Helvia con Marco y Quinto avocándonos a los protagonistas del texto sobre el cual sacamos este tema. Pienso que esta relación, después de la Madre –hijo obviamente, por razones que van más allá de lo afectivo como todos sabemos, es una de las más importantes dentro de las que conforman la sociedad, si es que no es la segunda más relevante, ya que ha vista de muchos psicólogos, el carácter y la forma de relacionarse con sus pares que adopta o tiene o una persona va a depender en total medida de la influencia que adopta de este, ya sea por parte temperamento, que es la influencia biológica que tenemos en la personalidad , y el cual se divide en cuatro tipos de temperamentos, los cuales son: el sanguíneo, el melancólico, el flemático y el colérico, los cuales no analizaremos ya que son temas para tratar en otro momento, y por otro lado el carácter , que es la combinación entre valores, sentimientos y actitudes, es decir, lo que hace referencia a como una persona percibe a los demás , a las cosas, a los conceptos que le rodean, según la pedagoga de la Universidad Panamericana de México Maria del Carmen Solórzano Velasco.

Este vínculo es el que ha dado causa a miles de millones de generaciones, un vinculo tan antiguo y estable, permanente, sin alteraciones, en algunos casos afectividad en un cien por ciento como era en el caso de los protagonistas del libro Tulio y Marco, o personalismo, frialdad y estrategia para mantener el legado que de un clan o una familia en otros, que en una gran medida se ha ido empeorando a través del tiempo, quizás por la vida cotidiana actual, una vida sin “stop” por así decirlo, una vida que no mira a la persona que se encuentra al lado nuestro o que no deja tiempo para momentos de afecto y cariño, momentos que son de vital importancia en la formación de personalidad de los hijos; un padre no nace sabiendo ser padre, se aprende a través del tiempo, desde el primer día de vida del niño; aquí es donde nace la teoría del apego, que en resumidas palabras es el vínculo emocional que desarrolla el niño con sus cuidadores o figuras de apego y que le proporciona la seguridad emocional indispensable para un buen desarrollo del niño , los cuales si logran establecer esta relación de forma positiva hacia uno o ambos de sus progenitores, en este caso el padre, aunque la primera relación de apego es la de la madre por razones obvias, encuentran mejores condiciones de utilizar a sus padres como la base segura para empezar a explorar su entorno.(van IJzendoorn y Kroonenberg, 1988);Ejemplo de esto lo podemos ver en los comienzos del libro cuando decía la manera en la que Helvia cuidaba a marco cuando pequeño dedicándole ternura maternal un tanto ruda por decirlo en términos simples , acariciándolo con cierta brusquedad, como lo hacia a tulio ya que no quería que fuese enclenque igual que tulio y pensaba que Marco era como un corderillo que necesitaba fuerzas, cariño con firmeza y nada de mimos.

Siguiendo el tema, existen factores que influyen a futuro en el desarrollo del niño factores que influyen en el desarrollo del niño, por ejemplo la sensibilidad y la capacidad de reaccionar de manera oportuna por parte de los padres influye mayormente en el desarrollo del niño pequeño en afianzar una relación de apego segura con su progenitor, sentándose aquí bases afectivas altamente significativas de su bienestar futuro, por ejemplo , poder confiar algún secreto en su progenitor, entre muchas otras .

Otro factor, por mencionar, es la estimulación del lenguaje proporcionada por los padres, la cual es crucial para el desarrollo cognitivo y lingüístico del niño. Los ambientes lingüísticamente enriquecedores, en los cuales los padres leen, responden y conversan incluso con sus niños promueven el desarrollo intelectual. Además, es interesante observar que las destrezas cognitivas y lingüísticas pueden proteger contra la incidencia de problemas de conducta y de carácter emotivo, ya que los niños que no logran manifestar sus necesidades verbalmente frecuentemente fracasan en la escuela y en muchas otras circunstancias de la vida, en parte porque no pueden expresar sus sentimientos y explicar claramente lo que desean.(Jay Belsky, director, Instituto para el Estudio de Cuestiones lnfantiles, Familiares y Sociales, Birkbeck, Universidad de Londres, Reino Unido). Esto es solo mínima una parte de los grandes beneficios que se producen por esta buena relación de apego. Pero sin duda, y a mi parecer, el resultado más positivo y a largo alcance es la confianza; la confianza es la esperanza firme de que se cree en algo(definición RAE), en este caso, en el padre por parte del hijo la cual se afianza en la comunicación; La comunicación favorece esta relación de manera significativa, logra un ambiente de unión, de respeto, de tolerancia y de cariño y confianza. De por si es importante el diálogo en las relaciones interpersonales, y sobre todo si es en esta, la relación familiar Padre e hijo, el cual se guía (el dialogo) en su tema central por los sentimientos, y ayuda a establecer contacto con el otro en enorme medida, a dar o recibir información y así expresar aquello que quiere decir cualquiera de la dos partes, ya sean ideas, sentimientos o sufrimientos. La comunicación ayuda a fortalecer el apego en la familia y entre sus miembros.

Creo, a mi parecer que no existen padres que no les guste tener con los hijos una comunicación fluida y positiva. Cuando esto pasa, cuando la relación se deteriora y se convierte en superficial, aparecen las dudas y la desconfianza, los problemas, las peleas llevándolo a algo más extremo pero no tan alejado de la realidad, haciendo surgir a la angustia. Ello no significa que los hijos deban estar todo el tiempo contándole

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