Breve Historia de la Estrategia Empresarial

Estrategia Corporativa

Breve Historia de la Estrategia Empresarial

La evolución de la estrategia empresarial se ha visto impulsada más por las

necesidades prácticas de las empresas que por el desarrollo de la teoría. En la

década de 1950, los altos ejecutivos se dieron cuenta que era cada vez más difícil

administrar las empresas que eran cada vez más grandes y complejas y es así

como surgió el concepto de planificación corporativa, el cual impulsó una gran

ola de diversificación en los 60’s.

Durante la década de 1970 y principios de 1980, la confianza en la planificación

corporativa se vio gravemente afectada. La diversificación no logró generar las

sinergias previstas y la competencia internacional se intensificó cuando las

empresas japonesas, coreanas y del sudeste asiático entraron en el escenario

mundial. El resultado fue un cambio en el énfasis de la planificación hacia la

elaboración de estrategias, donde la atención se centró menos en la gestión en sí

y más en la selección del mercado y el posicionamiento competitivo para

maximizar las ganancias. Esta transición de la planificación corporativa a lo que se

denominó gestión estratégica implicó un enfoque en la competencia como

característica central del entorno empresarial y en la maximización del rendimiento

como objetivo principal de la estrategia.

Este énfasis en la estrategia como búsqueda del desempeño dirigió la atención

hacia las fuentes de rentabilidad. Durante finales de la década de 1970 y principios

de la de 1980, la atención se centró en cómo el entorno competitivo de una

empresa determinaba su potencial de ganancias. Durante la década de 1990, el

enfoque del análisis de estrategias pasó de las fuentes de ganancias en externas

a las fuentes de ganancias internas. Cada vez más, los recursos y las

capacidades de la empresa se convirtieron en la principal fuente de ventaja

competitiva y la base principal para formular la estrategia. Este énfasis en lo que

se ha llamado la visión de la empresa basada en los recursos. Si bien la

búsqueda de industrias atractivas y liderazgo de mercado alentó a las empresas a

adoptar estrategias similares, el énfasis en los recursos y capacidades internas ha

alentado a las empresas a identificar en qué se diferencian de sus competidores y

diseñar estrategias que aprovechen estas diferencias.

Durante el siglo XXI, nuevos desafíos han seguido dando forma a los principios y

la práctica de la estrategia. Las tecnologías digitales han tenido un impacto masivo

en la dinámica competitiva de muchas industrias, creando mercados en los que el

ganador se lleva todo y guerras de estándares. Las tecnologías disruptivas y las

tasas de cambio aceleradas han significado que la estrategia se ha convertido

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