China. Historia, geopolítica y estrategia desarrollo.

China.

Historia, geopolítica y estrategia desarrollo.

Luego de casi un cuarto de siglo de reformas y apertura, la transformación de su economía y el acelerado proceso de industrialización, China se ha posicionado de otro modo en el escenario mundial.

El alto crecimiento chino en función de una serie de innovaciones institucionales que se apartaron significativamente de las normas occidentales, pero siempre en función de lograr incentivos orientados al mercado, derechos de propiedad, y políticas macroeconómicas de estabilidad. El mix entre público y privado ha sido la clave.

Modernización de la producción y las exportaciones se llevaron a cabo en acuerdo con inversionistas extranjeros, en zonas determinadas, en su mayoría situadas en la parte costera del país.

Para contener la problemática de los sectores rurales, A los agricultores se les permitió vender los excedentes libremente en un mercado determinado por el precio sólo después de haber cumplido con sus obligaciones con el Estado, lo que ha mantenido el incentivo a aumentar la producción y lograr excedentes.

El crecimiento ha generado consecuencias no tan positivas. Por eso es que las perspectivas aun no están del todo claras. Por un lado, hay desafíos en las exigencias de urbanización, del aumento del nivel de vida y de la producción que se requiere para incorporar nueva población al sistema, por lo cual hay una marcada dependencia de insumos estratégicos.

Desde el punto de vista de la geopolítica hay que entender que debido a los balances globales existentes, hoy China y Estados Unidos son económicamente dependientes el uno del otro.

Según datos oficiales chinos, el presupuesto en defensa del 2009 fue de U$S 70.000 millones, un 14% más que lo gastado el año anterior, aunque expertos del Pentágono consideran que la cifra se habría acercado en realidad a los U$S 120.000 millones, ya cercanos a una quinta parte del presupuesto de defensa de Estados Unidos (Chirinos, 2009). El tema más ríspido en la agenda, es sin dudas la cuestión energética: las necesidades de su economía y el acuerdo estratégico con Irán para satisfacerlas ha llevado a China a intervenir activamente en Medio OrienteTambién es un actor relevante en los vínculos globales de China, la Federación Rusa, donde las relaciones suelen pasar de la cooperación a la rivalidad.Respecto a América Latina, hay un aprovechamiento de la inexistencia de conflictos históricos, con un tipo de vínculo sur-sur que interesa a ambas partes, al menos en los papeles.

China, en general ha adoptado una “estrategia calculadora”, basada en el mantenimiento de relaciones internacionales amigables con todos los estados, y una restricción deliberada en lo que respecta al uso de la fuerza. La estrategia calculadora tiene límites precisos ya que la relación con los Estados Unidos es siempre difícil y el aumento de su poder genera siempre nuevas tensiones.

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