Critica y Propuesta ¿Por qué dejar de consumir Fast Fashion?

Universidad de Guadalajara

Preparatoria No. 10

Critica y Propuesta

¿Por qué dejar de consumir Fast Fashion?

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Maestra Marta Georgina López Vargas

Sánchez Rangel Dafne Tamara

Código de estudiante: 219630609

4°A Matutino

¿Por qué dejar de consumir Fast Fashion?

¿Por qué dejar de consumir Fast Fashion? Porque la industria de la moda rápida es una de las más contaminantes en cuestión del alto consumo de agua, energía, reactivos químicos y los residuos que producen; además la ropa que producen es desechable, ya que las prendas son atemporales, y como la moda es muy cambiante y cuando hay nuevas tendencias las personas dejan de usar esas prendas que pueden llegar a durar para toda la vida, pero serán usadas un número mínimo de veces. Podrás ver lo bonito de tu ropa a simple vista, pero no ves todos los problemas que produce la producción de esta. En este ensayo intentaré concientizarte sobre las consecuencias que trae consigo el fast fashion y te enseñaré alternativas a él. Acompáñame a lo largo de este ensayo para hablarte más a fondo de este tema.[pic 2]

Primero que nada, hay que definir qué es el fast fashion o también conocido como moda rápida en español, es una gran constante en las grandes marcas del mundo de la moda,  en donde según  Nebahat (2008)  “Las  principales  características  de  estas  prendas  es  su  bajo  costo;  esto  es  causado  por  la  mano  de  obra  barata, tiempo de distribución corto y por el tipo de material utilizado; con el fin de conseguir que los consumidores  puedan  obtener  un  producto  que  satisfaga  sus  necesidades  inmediatas;  destacan  marcas  como  Pull&Bear, Zara, H&M, Shein, Forever 21, siendo Zara una de las empresas pionera en la moda rápida”. Las tiendas de moda rápida tratan de introducir prendas que estén en las últimas tendencias de moda, así que imitan diseños y tendencias de las principales casas de moda del mundo, teniendo “una necesidad inventada de innovación, lo que contribuye a poner en el mercado millones de prendas y fomentar en los consumidores una sustitución acelerada de su inventario personal” Greenpeace (2021). sacando nuevas colecciones cada 15 días. [pic 3]

El impacto que pueden causar el sector textil al ambiente es grandísimo por sus irresponsables métodos de producción y tomando en cuenta que “Anualmente se consumen alrededor de 80 millones de toneladas de ropa, de manera que para fabricar esa desmesurada cantidad de prendas se necesita hacer uso de gran variedad de recursos naturales como son el agua y el algodón”. Villaño (2020).                                                                                                                                                         Primero, el consumo de agua para producir la ropa es altísimo, es la segunda industria más demandante. Siendo responsable de 20% de las aguas residuales con complejidad química que termina dañando la tierra, biodiversidad, ríos, etc., debido a los procesos que utilizan para su producción. En segundo lugar, la industria textil es responsable de la emisión de 1.200 millones de gases efecto invernadero. En tercer lugar, se produce plástico, el cual es el 2% de la ropa producida, que termina en los océanos, convirtiéndose en microfibras de plástico, produciendo muchas muertes de especies marinas. En cuarto lugar, se encuentra la contaminación de tierras gracias a la intensificación de la agricultura para la producción de materia prima. En sexto lugar, según Greenpeace (2021) “se estima que el 73% de la ropa producida anualmente termina incinerada o en basureros, lo que contribuye a la contaminación terrestre y atmosférica”[pic 4]

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 Para una producción masiva y acelerada de prendas fast Fashion muchas marcas de ropa suelen producir sus prendas en países con condiciones laborales precarias y con derechos de trabajadores limitados o inexistentes; acudiendo a lugares como Bangladesh, la India, Camboya, Indonesia, Malasia, Sri Lanka y China. Las personas cuentan con pésimas condiciones laborales, teniendo un salario mínimo (en ocasiones ni a eso llegan) el cual representa un quito del salario digno, sobreexplotación, trabajo forzado de menores y de acuerdo con lo que expresa Sustain Your Style “En el sur de la India, 250 000 niñas trabajan bajo el sistema Sumangali, una práctica que consiste en enviar a chicas jóvenes procedentes de familias pobres a trabajar a fábricas textiles durante tres o cinco años. A cambio, reciben el salario base y, una vez finalizado este período, el pago de su dote. Estas chicas son explotadas y viven en pésimas condiciones; esto es, en definitiva, una forma moderna de esclavitud”. Sufren abusos verbales y físicos, jornadas laborales de más de 10 horas diarias y la mayoría no cuenta con días de descanso, trabajan en edificios inseguros y de mal estado, etc.). Aquí las empresas se aprovechan de comunidades en pobreza que trabajan en cualquier condición para tratar de cubrir sus necesidades básicas. Además de que la mayoría de los trabajadores no tienen permitido organizarse en sindicatos, haciendo caso omiso a las leyes laborales.[pic 6]

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