Derechos Del Titular De Una Patente

Una invención es todo proceso, técnica u objeto que tenga el carácter de novedoso y transformadora, o una creación innovadora sin antecedentes en la ciencia o la tecnología que amplíen los límites del conocimiento humano, y sea susceptible de aplicación industrial, aún cuando tengan por objeto un producto que esté compuesto o que contenga materia biológica, o un procedimiento mediante el cual se produzca, transforme o utilice materia biológica

La patente o el derecho de patente es una forma de proteger un invento que reconoce a su titular el derecho de explotar industrial y comercialmente en exclusiva la invención patentada; El derecho de ejecutar acuerdos para permitir a terceros la explotación comercial de su invento y la posibilidad de demandar a quienes aprovechen, copien, reproduzcan o exploten comercialmente el invento sin autorización del titular. El título de la invención o patente pertenece al primero que lo solicite, por el que se otorga a su titular un derecho exclusivo de explotación industrial y comercial, durante un periodo de 20 años.

La finalidad de las patentes son:

• Que en las actividades industriales y comerciales se desarrollen bajo un sistema permanente de perfeccionamiento de sus procesos y productos

• Promover y fomentar la actividad inventiva y la difusión de conocimientos tecnológicos

• Impulsar el mejoramiento de la calidad de los bienes y servicios en la industria y en el comercio

• Favorecer la creatividad de productos nuevos y útiles;

• Proteger la propiedad industrial mediante patentes de invención

• Prevenir los actos que atenten contra la propiedad industrial o que constituyan competencia desleal y establecer las sanciones y penas

• Establecer condiciones de seguridad jurídica entre las partes en la operación de franquicias,

DERECHOS DEL TITULAR DE LA PATENTE

Registrar un invento es un trámite necesario para obtener una patente, en el entendido que una patente es un conjunto de derechos exclusivos otorgado por el Estado al inventor; entre esos derechos destacan:

1. Gozar el usufructo de su trabajo a través del desarrollo legal de las actividades necesarias que permitan la reproducción industrial y posterior comercialización de los inventos realizados por un periodo de 20 años.

2. Negociar con terceros la transferencia del derecho de explotación

3. Demandar por daños y perjuicios a quienes sin autorización, reproduzcan o comercialicen el invento patentado.

Cabe aclarar que todo invento, antes de ser patentado, es revisado por el IMPI para asegurarse que no haya un registro anterior del mismo y no sea copia o imitación de un invento patentado, en cuyo caso se negará la licencia.

Por otra parte, el obtener una patente, así como otorga derechos, confiere obligaciones, en este caso el titular tiene la obligación de dar a conocer su invento para incrementar el acervo cultural de la humanidad; no hacerlo es motivo de sanción que puede llevar a perder los derechos de exclusividad de la patente.

Sin embargo en nuestro país registrar un invento no es un trámite sencillo, con el paso de los años cada vez se han burocratizado cada vez más los servicios administrativos y esto se refleja en la complicación que significa obtener una patente que además tiene un costo que no pagarse es motivo para negar la patente…. Y dado que este costo suele ser alto la hace inaccesible para los inventores que en su mayoría carecen de recursos propios porque la iniciativa privada tiene un escaso interés en invertir en desarrollar tecnología prefiriendo adquirir maquinaria y equipos en el extranjero, dejando a inventores depender de subsidios gubernamentales o apoyos familiares para desarrollar su creatividad.

Lo anterior es causa de controversia y genera dos situaciones poco favorables:

La primera es que la mayoría de los científicos mexicanos están agrupados en los centros de investigación que pertenecen a las dos grandes universidades públicas del país: la UNAM y el IPN, quienes suelen

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