Dulces Vero

1. Razón social

Dulces Vero SA de CV

Dulces Vero SA de CV como una empresa 100% mexicana, es una de las empresas más importantes del país, y líder indiscutible en el mercado de paletas de caramelo. Siempre con el compromiso de higiene e innovación, ofrece a sus consumidores una variedad de más de 200 productos, mediante los cuales fomenta la imaginación y el juego del niño, con sus diversas, y a veces chuscas formas de dulces y paletas de atractivos colores y deleita a chicos y grandes con sus ricos, originales y distintivos sabores.

2. Antecedentes y marco de referencia

Dulces Vero se ha ido forjando a través de una larga historia. Esta inicia muchos años antes de que se estableciera la primera fábrica de dulces que dio origen a esta empresa.

En 1952 Ángel Ibarra Dávila y María del Refugio Robles tomaron la decisión de iniciar su propio negocio en la ciudad de Guadalajara. Fundaron una fábrica de dulces llamada “Los Pinos”. En esta se empieza a elaborar un dulce amarillo y chicloso parecido a un turrón que era cortado en pequeños trozos y un envuelto en papel celofán de colores.

De 1957 a 1959 una fuerte sequia azoto la región, provocando una difícil situación económica tanto para la industria del dulce, como para otros tipos de comercio.

Debido a esto, la familia Ibarra Robles decide emigrar a Culiacán, Sinaloa; donde continuaría su empresa dulcera con una fabrica a la que llamarían “Dulces Gloria”.

En ella se elaboraba solamente caramelo macizo a granel: pero con el paso del tiempo se empezó a fabricar una paleta de caramelo color rojo, de gran tamaño y con palo de madera, la que fue bien recibida por los clientes, dando origen a la elaboración del dulce que en la actualidad nos distingue, la paleta de caramelo macizo.

Hacia el año de 1964 Jorge, el hijo mayor, decide regresar a la ciudad de Guadalajara y continuar con la tradición dulcera de la familia. En el año de 1965, la familia Ibarra Robles regresa a la ciudad de Guadalajara y se integran en una sola empresa.

A finales de los años 60 el negocio creció de manera significativa, estableciendo una ruta de venta por el Pacifico y vendiendo además otros dulces de la región. Años de intenso trabajo y sacrificio de cada miembro de la familia, permitieron que en la década de los 70 madurara la estructura de la empresa y se diera lugar al nacimiento de la marca “Dulces Vero”.

Los años 80 trajeron consigo la conciliación de la empresa, la creación de nuevas fabricas, la integración vertical y un fuerte incremento en la variedad de productos, derivando en la solidez y prestigio que hoy acompañan siempre a la marca Dulces Vero.

El siglo XXl se abre con grandes perspectivas: la modernización y la innovación basadas en ingenio de todos los que

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