El libro negro del emprendedor ¿EMPRENDEDOR O PRABADOR DE FORTUNA?

El libro negro del emprendedor:

Lo que intenta este libro es aclarar a cualquier persona que se esté planteando montar un negocio, si está preparado para todos los problemas que se le pueden presentar en el camino, y nos enseña poniéndonos ejemplos de testimonios y soluciones para ellos, o mejor dicho como podemos actuar al encontrarnos con esos problemas, como pueden ser:

¿EMPRENDEDOR O PRABADOR DE FORTUNA? Respecto a este tema el escritor nos deja muy claro que el simple hecho de tener una idea, no es un motivo valido para emprender un negocio, la idea de negocio será válida cuando sea sólida y madurada, analizando bien los pros y los contras. Hay varios motivos lamentables pero y muy habituales por los que la gente se decide a intentarlo, voy a nombrar algunos de los que cita el libro. V Estar en paro v Odiar al jefe v Compatibilizar la vida personal con la profesional v Tener libertad de horario v Ganar más dinero v Demostrar algo a los de alrededor. V Tener más vacaciones De los cinco últimos luego nos daremos cuanta conforme avance el libro de que son totalmente al contrario. En este asalto el autor nos nombra una frase literal “no tiene sentido emprender debido al síndrome del domingo por la tarde” y es que, en mi opinión haya gente que se le ocurre una idea, y da la coincidencia de que tiene a alguien al lado, que te anima porque a lo mejor ni entiende del sector que le están hablando y como al “emprendedor” no le paren los pies, luego se pega el golpazo. Llegados a este punto hay que plantearse ¿soy un emprendedor de verdad o un probador de fortuna? También nos pone algunos ejemplo de probadores de fortuna que tuvieron existo, pero todo tiene una explicación muy simple, y es que la idea, puede que no sea muy buena o puede que le falten matices, y se podrían llegar a intentar, porque hay cosas que se aprenden en camino y otras que las cubren las ganas y la ilusión de que las cosas salgan bien. Aunque no todos los que prueban tiene éxito, porque confunden la ilusión, con lo que probablemente sea un motivo momentáneo, y viven como un espejismo En este asalto vamos a hablar de dos tipos de emprendedores los verdaderos y los falsos En cuanto a estos últimos se les denomina falsos no por una razón moral sino, porque se engañan a ellos mismos. Voy a nombrar algunos errores típicos de los falsos emprendedores, creerse que por ser sociedad e ir al notario, le van a dar un carné de emprendedor, eso no es emprender es realizar trámites. Y en segundo lugar los que convierten su idea en un salvavidas, que se creen que por conseguir una franquicia, por exportar o por conseguir una marca ya son emprendedores.

¿Quién es el verdadero emprendedor? Para emprender hay que tener una serie de virtudes, como disfrutar de lo que haces, saber mantener una incertidumbre, una inseguridad, levantarte e intentar sacar adelante la aventura que te plantea el día, con ganas y decisión para ello.

En realidad todos tendríamos que saber vivir un poco así, sabiendo que todo en esta vida tiene un riesgo, y que nadie puede asegurar nada, ni si tan siquiera el presente. Para ganar cada reto hay que plantearse con ilusión y nunca dejarse vencer. Pasamos a otra característica tiene que llegar en momento en el que emprender, se convierte en un medio o instrumento y en un fin. Para ser emprendedor es necesario que el deseo de realizar las cosas te salga de dentro, definitivamente como decíamos en el asalto anterior hay que tener una motivación y una ilusión, a una persona que no le salgan de dentro las cosas, termina de cansándose, y cuando fracase no lo intentara, pero una persona que tiene ganas aunque tropiece lo volverá a intentar. De aquí podemos sacar una conclusión que, el emprendedor no es el más listo, ni necesita motivos externo, sino que es el que tiene el carácter que se necesita.

SOCIOS: CRÉDITOS A LARGO PLAZO Y AL 22%:

En este apartado nos habla, de que no todo es el carácter emprendedor, sino que hay algunas cosas que las suplen como puede tener tenacidad, espíritu luchador, sobre ponerse a las adversidades, y aprender de los errores, de cómo al principio apuestas por ti mismo y coges confianza y luego vez que puedes cometer errores o te pueden surgir imprevistos, por eso habrá que preparar los proyectos al detalle y revisando punto a punto, contando con la posibilidad de que surja algún imprevisto, ya que, un proyecto en el que has ocupado muchas horas y dinero puede suponer un gasto tremendo para la empresa, de esta manera habrá que adaptarse perfectamente a lo que nos solicite el cliente. Dicho todo lo anterior, te das cuenta de que uno de los motivos por los que has decidido montar tu empresa, es hacer las cosas que a ti te gustan como a ti te gustan, no es lo que esperabas, porque aquí, también tienes un jefe indirectamente y ese es el cliente que es el paga tu servicio, o te compra lo que tú has fabricado. Hasta aquí el escritor ha decidido hacer una reflexión que dice: “Recuerde que no fracasan las ideas, fracasan las personas. Recuerde que no fracasan los negocios, sino que son las ilusiones las dejan vencer por la falta de cintura, imaginación y flexibilidad para afrontar imprevistos. ¿Entonces que hace falta para ser tenaz, luchador,...? Pues un poco difícil de explicar pero depende de ambiente donde hayas nacido y crecido, donde has sido educado… Esto no quiere decir que sea genético. Normalmente son personas, que han tenido dificultades para conseguir las cosas, son personas que siempre han estado luchando para conseguir lo que han querido. El escritor nombra una frase que dice Ferrán Soriano que dice” El emprendedor nace y se hace” Si tampoco estas en ese caso, deberás de haber tenido una buena disciplina y realizar un buen esfuerzo, y ponerse uno mismo retos para tener una cierta capacidad de sufrimiento para llegar a ser un buen emprendedor.

En esta parte nos habla de lo importante que es tener a un socio con nosotros, o sea otro emprendedor, con ilusiones y que tiene exactamente la misma participación que nosotros, y junto al que tenemos que tomar todas y cada una de las decisiones; no es un simple recurso económico, aquí nos habla de la persona. La pregunta a la que se refiere el autor respecto a este tema es muy clara; ¿Por qué nos asociamos a esa persona? Y nos da una respuesta clarísima, por miedo, justificando esa respuesta. Dice el emprendedor tiene “miedo a que las cosas vayan mal, a no tener en quien apoyarse, miedo a no ser capaz de hacerlo todo, a cometer errores, miedo en definitiva, a estar solo” Con lo cual consideramos a nuestro socio un recurso; soluciones: Si está pensando en tener socios porque necesita dinero, hable con el banco. Si está pensando en tener socios porque solo no puede con todo, emplee a un trabajador Si está pensando en tener socios porque hay un área que no domina, subcontrate ese servicio Si está pensando en tener socios porque necesita comentar ciertas cosas, contrate un coach Si está pensando en tener socios porque tiene miedo, haga deporte. Y la prueba de que es que son mejores todas las soluciones anteriores, es que en una entrevista realizada al emprendedor, responden a la pregunta de: ¿solos o acompañados? un 95% de las personas responden que solos. El autor nos expone algunos testimonios de los que podemos sacar ventajas de no tener socios como. -Las decisiones que hay que tomar en determinadas situaciones son más rápidas. -Los empleados deben de tener claro quién es el jefe -Se puede actuar con más libertad -Puedes actuar según impulsos e intuiciones, que a veces no puedes justificar de forma racional. Aunque hay veces que es necesario tener socios, y es cuando: -No tenemos madera de emprendedor -No tenemos capital suficiente y el banco no nos lo concede -Desconocemos el sector en el que vamos a emprender -Y en caso de que el emprendedor debido a una enfermedad, o a su edad vaya a necesitar un sustituto, siendo esta última más lógica. El autor compara la situación del emprendedor, en caso de tener un socio, con la de realizar un viaje en un submarino, porque en algunas ocasiones, se comparten sensaciones como son, acabarse conociendo las intimidades del compañero, vivir momentos agobiantes, situaciones en las que parece no haber salida... Con lo cual al buscar a la persona que va a realizar este viaje con nosotros debemos buscar una persona con unos principios morales y una ética similares a los nuestros. La mejor manera que tenemos de conocer estas cosas es mantener una conversación con la otra persona, y no asociarnos con alguien que no conozcamos bien. Otra de las cosas que conviene que tenga nuestro socio, es que nos complemente, en cosas que nosotros tenemos debilidades, para que una empresa funcione tiene que tener diversidad de talentos. No por amigos, ya que este proyecto, incluso puede deteriorar la amistad. Hay que conseguir un socio que tenga valor y que aporte ideas que merezcan respeto. También hay que acordar unos objetivos comunes, tener claro lo que los dos unidos quieren lograr. En este asalto nos explica cómo hay que tomar la primera medida. Habrá que pactar cómo vamos a separarnos cuando aún somos amigos, aunque es difícil pensar en esa posibilidad todavía, es indudable que llegara sino es en medio del ciclo de la empresa, será a la jubilación. Es mejor hacerlo antes porque no sabemos cómo puede llegar a ser la separación, puede ser de sentido común o puede ser de malas maneras, haciéndolo de esta manera el reparto será más justo porque al empezar hay poco que perder. Es difícil dar el primer paso, pero a la larga será mejor. Pero en este apartado nos explica como hay cosas que no se pueden solucionar fácilmente, como son los clientes que son de la empresa y a la hora de repartirlos surgen problemas, pero habrá que poner todos sobre la mesa y llegar a un acuerdo, flexible, ya que luego se irán dando cuenta de que es bueno hacer algunos cambios. Después de este punto tan importante pasamos a hacer el reparto de las aportaciones generales, el autor nos dice, varios métodos que se han inventado pero que no han llegado a funcionar, por eso es mejor darle a cada uno su valor correspondiente. Dinero Las aportaciones dinerarias se valoran en acciones, a estás se les remunera un beneficio, cuando lo haya, de esta manera ganaremos dinero y tendremos control en la empresa. Activos Cualquier cosa de valor, maquinas, locales, productos, patentes que se van a explotar, todo tiene valor. En este caso lo mejor es que se pague el precio justo y la empresa se quede con ello. También puede ocurrir que la empresa en ese momento no tenga dinero, en esa situación, el socio le podrá conceder a la empresa una especie de crédito a la empresa y cuando haya beneficios se le abona la deuda. Trabajo El trabajo se remunera con salario y punto, por eso siempre habrá que saber cuánto vale el trabajo que el socio está haciendo en el negocio. ¿Por qué la relación profesional que comenzó sólo hace cinco años, con ilusión termina como el rosario de la aurora? Por las desavenencias, y es que aunque al principio, todos actuamos de muy buena fe aportando todo lo que tenemos, haciendo todos los clientes que podemos…llega un momento en que cada socio en solitario empieza a hacer sus cuentas en solitario. Y se da cuenta de que el dinero se comparte y no importa quién lo ha generado. Y ahí es donde tenemos el primer motivo de desavenencia. La segunda fuente de conflictos es la eficacia y la eficiencia. Y es que empiezas a tener la sensación de que tu compañero trabaja despacio, que su cliente no vale la pena… En tercer lugar tenemos el estilo profesional, el modo de vestir, la decoración, la manera de atender a los clientes… En el cuarto nos encontramos con la desconfianza, este es el peor. La duda lo mata todo, es un veneno que mata la relación que tenemos poco a poco, por eso hay que tener absoluta confianza. Y por último, el devenir. Un cúmulo de las anteriores más no tener claros los objetivos que, ya se deberían haber acordado con anterioridad y la perdida de ilusión o la perdida de ambición son indicaciones de que la cosa llega a su fin.

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