Enfermedad Holandesa
Enviado por vanessauruena • 18 de Noviembre de 2013 • 1.470 Palabras (6 Páginas) • 453 Visitas
MACROECONOMIA
AUTOR:
DIEGO FERNANDO URUEÑA AVILA
UNIVERSIDAD COOPERATIVA DE COLOMBIA
ASIGNATURA. MACROECONOMIA
ADMINISTRACION DE EMPRESAS
ESPINAL TOLIMA
2013
MACROECONOMIA
AUTOR:
DIEGO FERNANDO URUEÑA AVILA
TALLER
ENFERMEDAD HOLANDESA
PROFESOR:
FRANCIA CRUZ
UNIVERSIDAD COOPERATIVA DE COLOMBIA
ASIGNATURA. MACROECONOMIA
ADMINISTRACION DE EMPRESAS
ESPINAL
2013
LA ENFERMEDAD HOLANDESA
A diario, vemos como los mercados mundiales se establecen y varían, se especializan y se desarrollan, algunos en la producción de tecnología, otros en la industria petrolera, y unos más en la industria de materias primas; se tiende a creer que un país abundante en un producto, puede especializarse, explotar el recurso, y empezar a exportar indiscriminadamente, generar muchas entradas de divisas y así, generar el desarrollo y fortalecer la economía del país. Pero la realidad es otra, cuando los países, de repente empiezan a basar su economía en una sola materia prima corren el riesgo de caer en la temida enfermedad Holandesa
La enfermedad Holandesa es el nombre dado al efecto que tiene sobre el tejido industrial de un país la sobreabundancia de recursos naturales, esto viene acompañado por una paradoja; algo que se cree bastante bueno, como naturalmente lo es la abundancia de recursos, puede desencadenar terribles consecuencias, al suponer un riesgo en el futuro, a hacer depender el sistema económico de la nación de estos recursos, y de su valor en el mercado mundial. En palabras del FMI podríamos definir este mal como “un fenómeno intrínseco a los países que tienen petróleo o minerales cuya posesión contrae el crecimiento a largo plazo. La maldición crea oportunidades de enriquecerse sin esfuerzo, favorece la corrupción y genera un clima adverso a la inversión”.
La enfermedad holandesa le debe su nombre a Holanda, cuando en la década del 1960, las riquezas de este país aumentaron considerablemente a consecuencia del descubrimiento de inmensos yacimientos de petróleo en el mar del norte. Como resultado, el Florín (Moneda Holandesa en ese entonces) se aprecio bastante, esto perjudico la competitividad de las exportaciones no petroleras del país y se llego a una crisis irónica, porque, a pesar de que Holanda gozaba de una buena cantidad de recursos, basaron su economía en estos yacimientos, descuidando sus otros sectores tradicionales de producción, y finalmente en un mediano plazo, se llego a la crisis. Se afirma que los países más propensos a poseer la enfermedad Holandesa, son los países petroleros, debido a que al ser el petróleo un elemento tan valorizado hoy en vida, un aumento en el precio de este, provoca fuertes entradas de divisas y como consecuencia la apreciación o revaluación de sus monedas hasta el punto de amenazar con asfixiar al resto de la actividad económica. Sumémosle a esto, el hecho de que el petróleo es un elemento bastante codiciado, al hallar grandes yacimientos de este, los países, invierten bastante en la explotación, y los mercados tradicionales del país por ejemplo, la industria manufacturera, se descuidan por completo, creyendo que basándose solo en la actividad económica petrolera, traerá más ventajas, que todas las demás industrias, se cae en la especulación y se termina por derrumbar la economía de la nación.
Recientemente se dice que algunos países de Latinoamérica podrían contagiarse del mal Holandés, debido a ser productores y exportadores de materia prima, están más propensos a esto, pero debemos conocer más a fondo la actividad económica del país en cuestión, para determinar si en sus preocupaciones debe estar la ‘enfermedad Holandesa’ o por el momento no, como analizaremos en Chile, Colombia y Argentina. Chile, país ubicado en el extremo suroeste de Suramérica, ya sufrió una vez esta enfermedad, esto después de la guerra del pacifico, a raíz de la anexión de los territorios Cali cheros de Bolivia y Perú, el tipo de cambio real que hablando en pesos de 2003 tuvo un precio de $449 en 1879 (era un índice más bajo que lo normal) cayó a $293 en 1890 y se recupero en gran parte gracias a la primera guerra mundial. Hay que agregarle a esto que la producción agrícola se redujo a casi la mitad y la manufactura tampoco
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