Exportación de piña 2022

ANANAS COMOSUS

La piña, ananá o ananás, se deriva de su parecido con los frutos de los pinos, mientras que de su nombre científico Ananas proviene del tupí nanas, que significa “fruta excelente”, y comosus significa “copetudo”, evidentemente por la disposición de las hojas alrededor de tallo. Es una fruta típica de las zonas tropicales y la principal especie comestible de la familia de las bromileáceas: proveniente de América del Sur, distribuida gracias a exploradores españoles y portugueses, y cultivada de forma comercial por primera vez en Hawai; actualmente cuenta con 24.8 millones de toneladas de producción anual alrededor del planeta.

Con su delicioso sabor agridulce, esta fruta ha conquistado las papilas gustativas de todo el mundo desde su introducción en otros países, tiene una aplicación culinaria y se puede comer fresca, en jugos, ensaladas, postres, aderezos para pizza, platos de pollo, pescado u otras carnes, se preparan incluso bebidas alcohólicas, pero es muy nutritiva y contiene mucha vitamina C. Siempre que exista un sistema de riego, los cultivos se pueden sembrar durante todo el año, seleccionando semillas por tamaño y tipo para estandarizar cada área. Las plantas se desarrollan de manera óptima cuando la temperatura anual está entre 24 y 27°C. Se requiere un suelo fértil, permeable y bien drenado con un pH de 5 a 6, y se debe evitar la siembra en arcilla mal estructurada.

México se encuentra entre los 10 primeros productores de piña en el mundo, con una producción promedio de 741,000 toneladas en la última década, suficiente para satisfacer la demanda del país y generar un excedente que le permita posicionarse en el mercado internacional. Los principales estados productores de piña en México son Veracruz, que concentra el 64.9% de la producción del país; Oaxaca, 12.8%, Tabasco, 6.2%, Quintana Roo, 4.6% y Jalisco, 2.8%. El valor comercial total de la producción de piña es de aproximadamente 2,000,899 pesos, y el consumo anual per cápita en México es de 6.3 kg. Con un volumen de exportación promedio de 73,000 toneladas, México fue el séptimo mayor exportador de piña fresca o deshidratada del mundo entre 2016 y 2020, representando el 1,9 % de las ventas mundiales de la fruta tropical. Según la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), las ventas al exterior son principalmente a Estados Unidos, con un valor de unos 30 millones 602 mil dólares, y una tasa de participación del 99,6%. Corea del Sur fue el segundo destino de las exportaciones mexicanas con una participación de 0.2%, seguido por Rusia, Canadá, Francia, Japón, Italia, Panamá, España, Emiratos Árabes Unidos y Holanda, se ha dado el aumento de la demanda en 16 países que incluyen integrantes del TLCAN, el TPP y el TLCTN, así como China y miembros de la Unión Europea y otros países con los que México no tiene acuerdo de libre comercio. Asimismo, México es el noveno productor de frutas tropicales en el mundo, produciendo un millón de toneladas de 209,000 toneladas el año pasado, 16.2% más que en 2019. La producción de estos frutos en el país se ha incrementado. En 2017 alcanzó las 945,000 toneladas; SAGARPA dijo que aumentó en 1 millón de toneladas en 2018 y alcanzó 1,041,161 toneladas un año después. La producción de estos frutos es estable durante todo el año, pero durante el período de junio a agosto, la producción representó el 33,7% de la producción total del país, o cerca de 350,000 toneladas. El consumo nacional per cápita es de 7.7 kg.

Costa Rica encabeza la lista de producción mundial con aproximadamente 2,930,661 toneladas de piña al año, seguido de Brasil, que se cree es el origen de la fruta, con 2,694,555 toneladas, y Filipinas en tercer lugar con 2,612,474 toneladas Los siguientes 6 posicionamientos son: China, India, Tailandia, Nigeria, Indonesia y México.

A pesar de la situación general desfavorable del sector agropecuario mexicano durante el periodo 1980-2000, nuestro país ha logrado consolidar el mercado internacional de frutas tropicales como un importante exportador de papaya, mango y aguacate. Sin embargo, la piña es un caso especial entre las frutas tropicales porque en dicho periodo atravesaba por una crisis. Varios factores internos y externos contribuyeron a ello. Por un lado, la falta de competitividad de los productores nacionales, la cual afectaba no solo la comercialización de la producción a nivel internacional sino también a la parte nacional, mientras que países americanos como Costa Rica y Honduras y países asiáticos como Tailandia, Filipinas y Taiwán, desarrollaron nuevas tecnologías en los últimos años, esto les permitió ingresar al mercado estadounidense, que es nuestro principal destino de exportación. Por otro lado, los cultivos del país se vieron afectados no sólo por el atraso tecnológico, sino también por los altos costes de producción, por el aumento desproporcionado de la tierra cultivable, que no correspondía al consumo interno y se mantenía prácticamente sin cambios, lo que dificultó colocar en el mercado interno los excedentes de producción que se generaron. También, este caso se agrava junto a que la piña procesada importada estuvo sujeta a prácticas comerciales desleales o mediante contrabando. La producción se concentra en cinco estados (Veracruz, Oaxaca, Tabasco, Nayarit y Jalisco), donde hay pocos productores y el desarrollo asociado del sector agrícola fue apoyo patrocinado por el Estado. Aunque la falta de suministro temporal en otros países es un factor positivo para la producción local, ésta resultó afectada por largos periodos de estabilización del mercado.

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