LA RECETA ANTE LA CRISIS ES EL SENTIDO COMÚN
Enviado por DaBeat • 15 de Diciembre de 2012 • 530 Palabras (3 Páginas) • 427 Visitas
A estas alturas no le voy a decir que hay pócimas mágicas. Usted y yo sabemos que no existen fórmulas mágicas, como tampoco existen las varitas. Contra una crisis que cada vez afecta a más sectores y también a diferentes niveles cabe imperar el sentido común.
El objetivo de este escrito no es el de dar una solución mágica contra la situación, como he dicho, no existe, pero sí exponer unas bases que considero que son de sentido común para la empresa que le cuesta vender porque sus clientes son más recelosos de gastar.
Cuantas veces habremos escuchado que el sentido común es el menos común de los sentidos: Una importante empresa multinacional con oficinas en Barcelona ha decidido realizar las reuniones de hasta dos horas por videoconferencia durante el año 2009. Hasta ahora, sus directivos se desplazaban en puente aéreo a la sede central en Madrid a primera hora de la mañana, reunión a las 10 y sobre las 12 o 13 horas, almuerzo y a las 16 horas vuelo de vuelta a Barcelona. Realizar estas reuniones mediante videoconferencia es de sentido común (para más INRI, la compañía que les comento es de telefonía).
¿Qué acciones deberían realizarse dentro de la empresa con SENTIDO COMÚN?
1. Control de Costes. Más aún, OBSESIÓN por controlar los costes. Sé que esto no es nuevo, pero ahora, más que nunca, es necesario: reducción de mermas, reducción de consumo energético, adecuación, repito, adecuación de plantillas (no necesariamente reducción ni sobrecarga de trabajo)
2. Aminorar el ritmo de las inversiones. Las inversiones deben darse en los momentos adecuados y las situaciones de crisis no lo son. No digo que no deba invertirse, no digo que deban pararse las inversiones. Sin inversiones no hay mejora, ni de producto, ni de procesos, pero sí deben priorizarse.
3. Optimizar la gestión de los clientes. Mediante herramientas tipo CRM. No olvide que el origen de todos los ingresos son los clientes. En momentos de crisis, el cliente gasta menos (aún no afectándole directamente) y lo que gasta, mira muy bien donde lo hace.
4. Promoción de ingresos adicionales. Señores, presten atención, lean detenidamente, fíjense bien: I M A G I N A C I Ó N. No se dejen llevar por la situación, tomen las riendas, sean imaginativos para ofrecer productos con valor añadido, productos novedosos que llamen la atención. Por favor no se limiten a hacer rebajas de hasta el 75%. Eso es lo fácil, lo hace todo el mundo. Diferénciese de la competencia. Le aseguro que sus clientes se lo agradecerán, confiarán en usted, le comprarán y hablarán de usted.
5. Flexibilidad comercial. Antes los clientes venían, había mucha competencia, sí, pero bonanza económica. Los clientes salían a comprar. Hoy tiene que ser usted, señor empresario, quien debe salir a vender. Pero no se encasille, recuerde el
...