La construcción de los cimientos de una firma

¿Por qué empresario en un minuto? Porque el mejor de todos los consejos fue dado en menos de un minuto, el libro empresario en un minuto, que se basa en tres simples secretos.

LA CONSTRUCCIÓN DE LOS CIMIENTOS DE UNA FIRMA

Desde niño, el sueño de Jud McCarley era tener su propia empresa, pero estuvo muy cerca de echar a perder oportunidad de hacerlo realidad aun antes de obtener su grado de secundaria, debido a una mala experiencia fue a dar a la cárcel.

Jud recibió un consejo de su padre Reginald McCarley, cada vez que tuviera la oportunidad de aprender de alguien excepcionalmente brillante o exitoso, no perdiera las joyas que de esa persona recibía.

Su entrenador de futbol Knapp le dio un consejo, le dijo que tomara un minuto de vez en cuando para escribir las cosas importantes que le sucedían. Jud empezó a escribir frases, cosas que aprendía y pensamientos importantes, siempre recordando lo que le había dicho su entrenador sobre redactarlos breves y concisos, por eso decidió llamarlos pensamientos en un minuto.

Tambien recibió un consejo de su abuela, ella le dijo que si quería una vida exitosa y equilibrada, los valores eran los vehículos que te lo conducirían hasta ella.

CRECER EN CONOCIMIENTO

Jud trabajo medio tiempo en ventas en una tienda de confecciones, pero soñaba con tener su propia empresa.

El doctor Avery Tonning, profesor de ventas y marketing de jud , Ademas asesor académico, sabía que de la pasión de Jud por las ventas lo animo a asistir a un seminario de Dirk Gardner presidente del National Sales Forum.

El primer conferencista “Tremendous” Jones quien dijo “dentro de cinco años ustedes, serán los mismos de hoy, salvo por la gente que conozcan y los libros que lean”. El siguiente orador fue Zig Ziglar, le enseño a Jud: “puedes obtener los que desees en la vida si ayudas suficientemente a otros a obtener lo que desean”. El tercer conferencista Fue Bill Gove, su enseñanza fue la siguiente “a todos nos gusta comprar, pero a nadie le gusta que le vendan”. El ultimo orador fue el doctor Kenneth McFarland, dijo: “si ustedes pueden vender y vender bien, nadie nunca podrá impedir que tengan un futuro próspero El éxito solo se puede obtener cuando concurren la oportunidad y la preparación. Recuerden eso y podrán disfrutar de una vida de grandes logros”

Jud soñaba con tener su propia empresa pero se dio cuenta de que su verdadera pasión estaba en motivar a los demás y ayudarles a tener vidas exitosas.

Jud se dirigió al señor Garder y le comento que él podría ayudarle a vender sus seminarios. Gardner quien le dijo que lo guiaría en el proceso de ventas si prometía trabajar duro asegurándole éxito.

EL APRENDIZAJE DEL OFICIO

En su nuevo empleo en el National Sales Forum, Jud debía encargarse de la promoción de talleres. En sus dos primeras semanas, Jud hizo muchas llamadas, pero no se estaban traduciendo a muchas ventas.

Dirk Gardner inicio con Jud un intenso proceso de coaching personalizado. Le dijo la humildad nos permite admitir que no tenemos todas las respuestas, nos permite aprender y crecer.

Faltando un mes para el siguiente seminario Importante en filadelfia, Jud busco la tarjeta de “Tremenduos” Jones y marco su número. Jud lo invito a cenar, se reunieron en un restaurante allí “tremenduos” Jones le recordó que para crear una empresa exitosa, primero hay que dominar los elementos esenciales del negocio y se ofreció a ser su mentor.

LA ADQUISICIÓN DE LA FIEBRE EMPRESARIAL

Jud Después de haber trabajado tres años en el National Sales Forum, sentía que era el momento de fundar su propia empresa.

Por ello decidió pedirle un consejo a “Tremenduos” Jones, Sheldon Bowles dice que cuando uno quiere crear una empresa, tiene que hacerlo con algo que lo apasione, esto lo llama LA PRUEBA DE LA ALEGRIA. ¿Qué te apasiona hacer? Lo que más me gusta es motivar a los demás, respondió Jud, por eso he soñado con poner mi propia empresa de conferencias “Judson McCarley And Associates”.

Esto me lleva a una segunda cosa que aprendí de sheldon: uno tiene que encontrar a la gente que esté dispuesta a pagar la pasión que lo llena, esto lo llama

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