PRODUCTIVIDAD DEL TRABAJO Y VENTAJA COMPARATIVA: EL MODELO RICARDIANO
Enviado por Ilberth Rodriguez • 2 de Octubre de 2019 • Tesis • 1.607 Palabras (7 Páginas) • 174 Visitas
PRODUCTIVIDAD DEL TRABAJO
Y VENTAJA COMPARATIVA:
EL MODELO RICARDIANO
os países participan en el comercio internacional por dos razones básicas, y ambas
Lcontribuyen a que obtengan ganancias del comercio. En primer lugar, los países co
mercian porque son diferentes unos de otros. Las naciones, como los individuos, pueden
beneficiarse de sus diferencias mediante una relación en la que cada una hace aquello
que sabe hacer relativamente bien. En segundo lugar, los países comercian para conseguir
economías de escala en la producción. Es decir, si cada país produce solo una gama limi-
tada de bienes, puede producir cada uno de esos bienes a una escala mayor y, por tanto,
de manera más eficiente que si intentara producir de todo. En el mundo real, los patrones
del comercio internacional reflejan la interacción de estas dos razones. Sin embargo,
como primer paso para entender las causas y los efectos del comercio, es útil considerar
los modelos simplificados en los que solo se presenta una de dichas razones.
El concepto de ventaja competitiva
El dia de San Valentin de 1996, a menos de una semana de las cruciales elecciones primarias del
20 de febrero en New Hampshire, el candidato presidencial republicano Patrick Buchanan se de-
tuvo en una floristeria para comprar una docena de rosas para su mujer. Aprovechó la ocasión
para pronunciar un discurso en el que denunciaba el incremento de las importaciones de flores
en los Estados Unidos que, según afirmó, abocarian a la desaparición de los cultivadores de
flores estadounidenses. Es cierto que una creciente proporción del mercado de rosas de invierno
en los Estados Unidos es cubierta hoy por importaciones provenientes de América del Sur, en
particular de Colombia. Pero, żes algo negativo de por sí?
Una economía con un factor productivo
ducir el papel de la ventaja comparativa en la determinación del patrón de comer-
cio internacional, comenzaremos por imaginar que tenemos una economia, que denominamos
nuestro país, que solo tiene un factor de producción. (En el capítulo 4 ampliaremos el análisis
a modelos con varios factores.) Supondremos que solo se producen dos bienes, vino y queso.
La tecnologia de la economía de nuestro país puede ser resumida por la productividad del traba-
jo en cada industria, expresada en términos de requerimientos unitarios de trabajo, el número de
horas de trabajo necesarias para producir un kilogramo de queso o un litro de vino. Por ejemplo,
se requiere una hora de trabajo para producir un kilogramo de queso, y dos horas para producir
un litro de vino. Debe observarse, a propósito, que definimos los requerimientos de trabajo por
unidad como la inversa de la productividad: cuanto más vino o queso puede producir un traba-
jador en una hora, menor será el requerimiento unitario de trabajo. En lo sucesivo llamaremos
aur y aco a los requerimientos unitarios de trabajo en la producción de vino y queso, respectiva-
mente. Los recursos totales de la economía se definen como L, la oferta total de trabajo.
El comercio en un mundo con un factor productivo
Es fácil describir el patrón y los efectos del comercio entre dos países cuando cada uno de ellos
tiene un único factor de producción. Aun así, las implicaciones de este análisis pueden ser sor-
prendentes. Para quienes no han reflexionado sobre el comercio internacional, muchas de estas
implicaciones parecen contradecir al sentido común. Incluso este modelo tan sencillo del comer-
cio puede ofrecer alguna luz sobre algunas cuestiones del mundo real, como, por ejemplo, qué
hace que la competencia internacional y el comercio entre países sean justos.
Determinación del precio relativo después del comercio
Los precios de los bienes intercambiados internacionalmente, como los demás precios, están
determinados por la oferta y la demanda. Sin embargo, al analizar la ventaja comparativa de-
bemos aplicar este análisis de la oferta y la demanda con cuidado. En algunas ocasiones, como
en el contexto del análisis de la política comercial de los capítulos 9 a 12, basta con centrarse
en la oferta y la demanda de un solo mercado. Para valorar los efectos de las cuotas de im-
portación de azúcar de los Estados Unidos, por ejemplo, es razonable utilizar el análisis del
equilibrio parcial, es decir, estudiar un solo mercado, el del azúcar. Sin embargo, cuando estu-
diamos la ventaja comparativa es fundamental tener en cuenta las relaciones entre mercados
(en nuestro ejemplo, los de vino y queso). Dado que las exportaciones de queso de nuestro país
solamente se realizan a cambio de vino, y las exportaciones de vino del extranjero a cambio
de queso, sería incorrecto que estudiaramos los mercados de queso y vino de forma aislada.
Lo que necesitamos es un análisis del equilibrio general que tiene en cuenta las interrelaciones
entre mercados.
Una forma útil de tener en cuenta los dos mercados a la vez consiste en centrar el análisis no
en las cantidades de queso y vino ofrecidas y demandadas, sino en su oferta y demanda relativas,
VENTAJA COMPARATIVA EN LA PRÁCTICA: EL CASO DE BABE RUTH
Todo el mundo sabe que Babe Ruth era el me-
jor bateador de la historia del béisbol. Sin
embargo, solo los auténticos aficionados a este
deporte recuerdan que Ruth también fue uno
de los mejores lanzadores de todos los tiempos.
Como Ruth dejó de lanzar la pelota a partir de
1918 y jugó en el campo exterior durante todo
el tiempo en el que marcó nuevos récords con el
bate, la mayoría de la gente ni siquiera sabe que
sabía lanzar. ¿Qué explica la
fama sesgada de Ruth como
...