Todo suceso tiene un porqué y toda adversidad nos enseña una lección

INTRODUCCIÓN

“Todo suceso tiene un porqué y toda adversidad nos enseña una lección…”

(Robin, 2012)

Dentro del libro “el monje que vendió su Ferrari”  se da una lección de vida, una reflexión de las acciones cotidianas que a lo largo de la vida vamos creando como fundamentales o importantes en nuestro ser. Al leer esta fábula espiritual, uno puede ver lo equivocado que está en la toma de muchas decisiones o la falsa perspectiva que se tiene sobre algunos hechos o circunstancias, con esto me refiero a que muchas veces uno cree que al tener mucho vale mucho, o que el tener mucho es sinónimo de felicidad, cuando la realidad muchas veces va muy alejada de esos paradigmas sociales.

Este libro nos deja ver que el tener éxito va mas allá en la cantidad de cosas materiales que tengamos en nuestro poder, va más allá de una cuenta de ahorros o de números en el banco, creo que el éxito depende de muchos más factores que solo económicos, pues como dicen llegamos sin nada y sin nada nos vamos la vida y el éxito desde mi punto de vista, está más relacionado a como disfrutaste, que tanto gozaste la vida y sobre todo si dejaste algo bueno para la sociedad.

Por otra parte, dentro de este libro el autor nos hace reflexionar sobre muchas de las acciones que queremos o debiéramos tomar en nuestras vidas, ya que, como lo menciona la frase con la que se da apertura a este ensayo, cada acción tiene un suceso en nuestras vidas, es por eso que debemos ser metódicos y razonables a hora de determinar algo para nuestras vidas pues, tal vez lo que en su momento por una mala decisión era algo increíble o con futuro a lo largo del tiempo resulta ser una mala decisión.

“El monje que vendió su Ferrari” una gran fabula; muchas veces nos quejamos porque no tenemos el celular del año, porque no vestimos ropa de marca o no podemos comer en el restaurante de moda o visitar el antro del mes, y pensamos porque no podemos ser ricos y no tener que ahorrar para hacer todo lo anteriormente mencionado, pero no vemos nuestra vida desde otra perspectiva en donde pudiéramos observar lo afortunados que somos, al tener salud, comida, amigos, una familia completa, sana y unida, no vemos que tenemos una pareja a nuestro lado que nos ayuda a ser mejor persona, son cosas tal vez tan banales, tan básicas que no vemos que las tenemos, este libro nos relata la historia de un hombre cuya vida sería perfecta a la vista de los demás, tenía una gran casa, un buen prestigio, una vida llena de éxitos laborales, tenía el coche del año, tenía todo lo que uno puede creer que es realmente la felicidad, pero no era así, su vida estaba llena de estrés, de vacío, de cansancio, de soledad, a tal punto que tenía que elegir entre su vida o sus lujos y prefirió empezar a vivir, porque lo pongo como empezar a vivir, porque la vida va más allá de estar encerrado en una oficina más de 12 horas al día, la vida va más allá de números en la cuenta del banco, la vida es disfrutar, reír, conocer, tener con quien compartir.

Así mismo, esta libro nos muestra que a veces el tomar un respiro, un viaje, el simplemente dejar la rutina nos hace ver las cosas de otra manera, él toma la decisión  de viajar a la india, de conocer otra cultura y por ende otra forma de ver la vida, él se da cuenta que por estar metido en querer ser alguien en la vida, dejo de vivir.

El libro nos muestra 7 virtudes: la primera es dominar la mente no solo es saber tomar decisiones si no nutrirla, con un buen libro, con información relevante, documentales, aprendiendo algo nuevo tal vez un idioma incluso viajando, la segunda es perseguir el propósito, esto va más encaminado a definir nuestras prioridades en la vida, tal vez sea una casa, una familia, un coche, un negocio, sea cual sean tus propósitos en la vida, la tercera practicar el kaizen es siempre ser contante, si uno quiere ver resultados en algo debe ser contante, si quiere tener un cuerpo marcado uno debe de ser contante en las rutinas, lo mismo pasa con los propósitos de vida que nos hemos planteado, si queremos una casa debemos de ahorrar para ella y por consiguiente trabajar, no solo podemos estar viendo el televisor, esperando que nos saquemos la lotería, la cuarta vivir con disciplina, va encaminada o de la mano con la constancia, esta virtud nos refiere que debemos de trabajar en conjunto con las demás virtudes para que todo funcione de manera adecuada, la quinta respetar el tiempo propi, el tiempo no lo podemos parar y mucho menos regresar debemos de saber aprovechar el tiempo que tenemos ya sea haciendo algo que nos nutra que nos ayude a crecer de manera personal o haciendo que nos haga realmente feliz, es por ello que debemos de hacer buenas inversiones del mismo, puesto que no hay marcha atrás, la sexta servir desinteresadamente a los demás, no esperemos que las personas hagan algo por nosotros solo porque nosotros le ayudamos, hay que aprender a hacer las cosas sin interés propio y más que nada sin esperar nada a cambio, si nosotros quisimos ayudara alguien porque nos nació, por que quisimos hacerlo, no porque en algún momento íbamos a recibir algo de la misma magnitud, y por último la séptima abrazar el presente, solo tenemos una vida, el tiempo no se detiene y eso lo tenemos que tener en cuenta cada día de nuestra vida es por eso que debemos de ser más conscientes de lo que hacemos pero sobre todo aprender a ser felices y a disfrutar de lo que tenemos.

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