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CONCEPTUALIZACION:

Las ventas a plazo son operaciones que implican la enajenación de bienes corporales muebles mantenidos por el vendedor como mercancías, las cuales, por su cuantía o el tipo de persona que los demandan, requieren que sean financiados y sistemáticamente amortizados durante mas de un periodo contable, tiempo durante el cual el vendedor realizara su utilidad, así se diferencia de la comercialización de bienes que originan ventas que se reflejan dentro de un solo ciclo operacional.

De acuerdo con Cabrera Rayo (Libro de Auditoria y Planeación Tributaria), las ventas a plazos constituyen un sistema de venta mediante la “modalidad de pagos por instalamentos (cuotas) cuyo plazo de recuperación abarca dos o más periodos fiscales y que dicha operación sea financiada directamente por el vendedor.”

Otras tratadistas las definen como aquellas donde el comprador hace un pago inicial y cubre el saldo en cuotas periódicas, que debe ser en un intervalo de tiempo mayor a un periodo gravable o contable.

Las ventas a plazos son una oportunidad grande para las empresas, entrar a otorgar créditos, con una serie de ventajas que pueden mejorar la situación financiera, siguiendo ciertos procedimientos legales que luego describiremos.

Cuando hay buena situación económica las ventas a plazos, es una estrategia excelente para obtener un mayor volumen y superar las metas, mejorar la rentabilidad y la productividad, pero en tiempos de recesión puede ser un factor para incrementar las perdidas operacionales.

CARACTERISTICAS

a. Para que puedan ser catalogadas como ventas a plazos, el vendedor debe llevar contabilidad por el sistema de causación y tener negocios donde prime un sistema organizado, regular y permanente de sus operaciones bajo esta modalidad.

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