Cuento para chicos de la delincuencia

Cuento para chicos de la delincuencia

Título: Andrés y su familia

Autor: Devyani Villanueva

Había una vez un niño que se llamaba Andrés que Vivian en Chincheros Cuzco, pero de ver tanta

 pobreza que no llovía y sin la lluvia no podían sembrar al ver eso decidieron viajar a la capital en

 busca de un nuevo futuro para Andrés y su familia entonces cuando llegaron todo era totalmente

nuevo y estaban asombrados por tanto carro edificios por todos lados los padres de Andrés ya

habían venido antes, pero él muchacho nunca entonces los padres decidieron ponerles a estudiar  

pero aparte ya no les alcanzaba la comida que habían traído de su natal se puso a buscar trabajo el

padre en el mercado en todos lados gano en el mercado unos cuantos soles, pero le hicieron un

cuento chino como se dice en otras palabras y perdió sus monedas y llego sin nada a la casa luego

el vecino del frente le dijo que había trabajo en una construcción en el centro de lima todo bien

hasta allí Andrés tendría para la propina del colegio la mama para la comida entre otras cosas pero

 no contaban con la delincuencia que es pan de todos los días en nuestra capital ellos pensaban

que era como en su pueblo uno la obra ´para los que trabajaba era producto de coimas que los

delincuentes cobraban al ingeniero a la empresa y así también le pagaban menos al padre de

Andrés el primer sueldo llego a salvo y Andrés y su familia eran felices, pero al salir un día el padre

del muchacho después de tener un día casi matado había cobrado su semana e iba feliz subió al

 carro no hubo asiento entonces se tuvo que ir parado como estaba cansado no sintió sus

pertenencias solo sintió un pequeño jaloneo o empujón y fue tan rápido que no se percató que el

delincuente le había sacado su pago de semana al bajar del carro se dio con la fatal sorpresa que

no tenía ni un sol para pagar el pasaje en el micro llego a su casa todo desganado muerto de

 cansancio de ira sin poder hacer nada se fue   la tienda a fiar a la vecina una cerveza y se agarró a

 tomar Andrés escuchaba desde la tranquilidad de su cuarto que era separada por una cortina casi

vieja del dormitorio de su padre Andrés tenía un hermanito Erwin que no tenía ni idea de lo que

pasaba en su humilde familia Andrés tenía doce años y con los doce años ya entendía el

sufrimiento la pobreza y odiaba más a los delincuentes por robarle el pan que se llevaría a la boca

fruto del esfuerzo de su padre.

Al siguiente día el padre no fue a trabajar y la madre no tenía que dar de comer al pequeño Erwin

que lloraba por un pan la madre desesperada corrió en busca de préstamo al vecino de frente de

la casa al costado, pero todos le negaban porque veían que no tenían trabajo, pero alcanzo para un

sol de pan que le regalo una de ellas y avena que tenía en casa dio de comer a los niños y se fue al

 mercado en busca de trabajo encontró a una señora muy refinada que le ofreció trabajo en su

casa en san isidro así fue ella tenía que viajar horas de san juan de Lurigancho hasta la Javier prado

 con pershing por allí quedaba la casa, pero como siempre en todos lados discriminación y

delincuencia abundan la señora se quejaba de toda la señora llevaba al pequeño Erwin mientras

Andrés iba al colegio y el padre solía emborracharse entonces el niño iba con ella, pero el inquieto

 niño rompió uno de los jarrones carísimos traídos de Suecia y la señora se enojó tanto que no le

pago nada de lo que había trabajado y le voto sin reparo alguno la señora llego y de pena se

enfermó Andrés al ver esto su, madre enfermo

 su padre borracho su hermanito llorando y muriendo de hambre se desesperó tanto que salió a la

calle corriendo y encontró unos amigos o no tan buenos para su mala suerte en el mal momento

de su vida unos más grandes otros tenían su edad y ellos tenían la solución en sus manos lo que

 querían de él era muy fácil para ellos que ya estaban acostumbrados a la pereza y al veguerío   la

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