No son tipos de TOC

¿Cuándo no es un TOC?

El TOC como sus componentes básicos que son las obsesiones y las compulsiones pueden presentar  algunas semejanzas con otros trastornos diferentes de forma que en algunas ocasiones puede resultar fácil confundir cual es el trastorno que realmente padece el paciente.

Por una parte,  se encuentran modalidades de intrusiones cognitivas normales. Estas son:

• Pensamientos intrusos normales, análogos a obsesiones (PIO). Los pensamientos intrusos presentar características similares a las obsesiones ya que tienen caracteres repetitivos, involuntarios, son molestos e inoportunos. A su vez éstos también abarcan temas similares a las obsesiones tales como el orden, la contaminación, impulsos, imágenes, etc.

Sin embargo, éstos se diferencian en aspectos importantes como: se expresan con una frecuencia menor que las obsesiones (una vez al mes o menos), por tanto resulta mucho menos molesto y no interfieren o interrumpen las actividades cotidianas.

• Pensamientos automáticos negativos (PAN). Tratan de autoevaluaciones negativas sobre uno mismo o de lo realizado: en otros casos adquieren la forma de expectativas de autoevaluación negativas; otras veces son deseos o intenciones y en otras ocasiones tratan de expectativas negativas sobre el propio futuro, las relaciones con los demás, etc.

Muchas personas con TOC pueden experimentar PAN ya que las personas que padecen TOC suelen tener una valoración negativa acerca del contenido de sus obsesiones y/o compulsiones. El PAN es un síntoma predominante en la depresión.

• Ideas delirantes. Consisten en creencias no fundadas sobre temas muy diversos, que poco o nada tienen que ver con los temas obsesivos más habituales (por ejemplo: creen que la pareja le es infiel, que posee poderes o capacidades especiales, etc.), estas creencias son además autorreferentes, haciendo referencia a aspectos de la vida de uno mismo que son considerados muy importantes para su propia supervivencia. Las ideas delirantes son un síntoma fundamental de un amplio conjunto de trastornos mentales, mayoritariamente graves y vinculados al espectro psicótico (esquizofrenia, trastorno bipolar, depresión mayor, etc).

• Pseudoalucinaciones. Son alucinaciones carentes de la experiencia de objetividad, descritas como visiones, y percibidas por el ojo u oído internos (Jaspers, 1919). A diferencia de lo que sucede con las obsesiones no conllevan estrategias de neutralización.

• Los tics. Un tic es una vocalización o un movimiento motor súbito, rápido, recurrente, involuntario, no rítmico y estereotipado. Se pueden confundir los tics con algunas compulsiones simples, la diferencia fundamental entre los tics y las compulsiones se basa en la finalidad del comportamiento: el tic no es un comportamiento finalista, es decir, no tiene ningún tipo de motivación, no es premediato mientras que las compulsiones tienen el fin de neutralizar o impedir su aparición y además son voluntarios.

Por otro lado, el síndrome de la Tourette se caracteriza por la presencia de tics múltiples y complejos que tienen lugar en varias modalidades (verbal, gestual, motora). Las tasas de coocurrencia entre este síndrome y el toc son muy elevadas, especialmente en niños y adolescente, entre el 30 y el 40% (Golsmith, Shapira, Phillips y McMalroy, 1998).

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