ANÁLISIS DEL CONCEPTO DE JUSTICIA SEGÚN PLATON Y ARISTÓTELES
Enviado por ldmercadoc • 30 de Abril de 2013 • 1.567 Palabras (7 Páginas) • 952 Visitas
ANÁLISIS DEL CONCEPTO DE JUSTICIA SEGÚN PLATON Y ARISTÓTELES
CIUDAD DE MÉXICO, 2010
Libro I. La Justicia (Politeia).
Antes de realizar el análisis correspondiente del concepto de Justicia (Libro I) según Platón, desarrollaré previamente algunas consideraciones en el párrafo siguiente, a modo de proemio
En la Politeia de Platón se plantea, como su título lo indica, la creación de una república ideal imaginada por el Filósofo ateniense. Ahora bien, este régimen político es visto en estrecha relación con la justicia, la que es considerada tanto como una virtud esencial en la polis como en el individuo.
En la primera parte se narra la escena en que Sócrates comienza a interrogar a Céfalo- siguiendo su método de la mayéutica - sobre el tema de la ancianidad.
Sócrates hace nuevas preguntas a Céfalo. “La mayoría de los hombres dirán que son las propias riquezas las que hacen feliz en la ancianidad”. Céfalo: “el carácter tiene más que ver con la felicidad que la riqueza”. Sócrates: “¡cuál es la ventaja principal del dinero?” Céfalo: “permite a los hombres buenos pagas sus deudas a los dioses y a los hombres, antes de pasar al otro mundo”.
Siguiendo la línea de análisis anterior, podemos señalar que Céfalo representa bien su papel de quien se siente responsable, justo y de cumplidor de las normas y valores morales de su tiempo.
Se suscita por primera vez la pregunta de “¡qué es la justicia?”.¡Es simplemente decir la verdad y pagar lo que se debe?”. Polemarco sucede a Céfalo en su lugar en la conversación.
La segunda mitad de la definición de justicia, que Sócrates deduce de las observaciones de Céfalo, es ahora acogida y discutida en la forma que fu expresada por Simónides: “que es justo dar a cada cual lo debido. En la sección presente, Sócrates sonsacaba el significado de “debido”.
Polemarco, hijo de Céfalo, dice que la justicia consiste en devolver a cada uno lo suyo. Sin embargo, no puede defender íntegramente la postura de su padre y elimina de su definición la caracterización de la justicia como “decir la verdad”, lo que está sujeta a las diversas circunstancias.
Más adelante, Polemarco es inducido a decir que en la justicia “conviene beneficiar a los amigos y perjudicar a los enemigos”.
Esta aclaración le permite a Sócrates emplear el recurso de la analogía con las artes y pregunta el arte de la justicia ¡nos permite saber quiénes son nuestros amigos y quiénes nuestros enemigos? ……Y ¡cómo no engañarse en la apreciación de los buenos y los malos?
Polemarco no puede resolver estas interrogantes y dice que” amigo o enemigo es el que en realidad lo es”.
Así, pues, de acuerdo a los párrafos precedentes es posible afirmar que Sócrates lleva el tema de la justicia hasta su fundamento ético, habla de areté (perfección, virtud) e identifica la justicia con la bondad (perfección propia del hombre) la que tiene un valor en sí misma.
Sócrates nos enseña que es contrario a la naturaleza de la justicia el perjudicar a un ser humano; y después, por medio de un razonamiento similar de afinidad, prueba que nadie puede ser más injusto por alguien que es justo.
A continuación viene la furiosa reacción de Trasímaco contra el método de investigación de Sócrates de preguntar más que de responder, por lo que debe él ahora contestar qué entiende por justo.
Trasímaco sostiene que la justicia es “el interés del más fuerte”. Así, pues los gobernantes son más fuertes que aquellos a quienes gobiernan: y en cada estado hacen aprobar leyes en su propio interés: y lo que se hace en su propio interés, a eso llaman justo.
Respecto de lo anterior, es probable que Platón nos presente a Trasímaco como el portavoz del realismo político, llevado hasta sus últimas consecuencias, donde el fundamento de la justicia está en la voluntad del legislador y a diferencia de Céfalo, Polemarco y Sócrates que lo justo es valioso en sí mismo, Trasímaco no considera que en la sociedad exista algo valioso en sí mismo, sino que sólo hay utilidad o inutilidad.
Trasímaco piensa que los únicos que se comportan de manera coherente son los gobernantes, mientras los gobernados se reprimen a sí mismos en la satisfacción de sus deseos, al supeditarlos a unos supuestos valores.
Ahora que se ha explicado el significado de la definición, Sócrates procede a criticarla, señalando que si se asume que los gobernantes buscan su propio beneficio, aun así ellos a menudo se equivocan, y pueden promulgar leyes que sean perjudiciales para ellos mismos.
Trasímaco responde que el verdadero gobernante en cuanto tal sabe acerca del arte de gobernar y no comete errores. Sócrates, le replica que si se trata de un arte, de un “saber- hacer”, entonces no buscará su beneficio personal, pues en cuanto arte ,
...