Agusto Conmte

ISIDORO AUGUSTO MARÍA FRANCISCO COMTE

Augusto Comte nació en Montpellier, Francia, en 1798, de una familia pequeño burguesa, católica y monárquica. Muere en París, en 1857. Su padre fue Augusto Luis Comte, funcionario menor, y su madre, Felicidad Rosalía Boyer. Es el creador del positivismo o filosofía positivista que se fundamenta en el empirismo que tiene como principio fundamental la experiencia, por lo que para el positivismo el concepto de ciencia es todo aquello que se puede observar, experimentar y comprobar.

Augusto Comte, es el primero que reconoce a las Ciencias Sociales como ciencias, en su libro La Filosofía Positiva, pero para nombrar a las ciencias sociales toma prestado un término de las Ciencias Naturales y le llama la Física Social, esto quiere decir que la influencia de las Ciencias Naturales como ciencias consolidadas se ve reflejada al nombrar a las Ciencias Sociales como Física Social, por lo que el mérito de Comte es haber reconocido a las ciencias sociales como ciencias. Luego ÉMILE DURKHEIM, es uno de los primeros que hace investigación en el campo de las ciencias sociales, siendo su investigación más relevante sobre el suicidio en Europa, que lo presenta en su libro titulado El Suicidio.

ÉMILE DURKHEIM

EDUCACIÓN Y SOCIOLOGÍA

Émile Durkheim nació en 1858 en Épinal, Francia. Estudió en la escuela normal superior y posteriormente fue profesor de filosofía en París. En 1902 es nombrado catedrático de pedagogía en la Sorbona. Fue uno de los fundadores de la Escuela Sociológica Francesa. En 1896 fundó la revista Anneé sociologique. Murió en París en 1917. Sus principales obras son: la división del trabajo social, Las reglas del método sociológico, El suicidio, Las formas elementales de la vida religiosa y Educación y sociología.

Enseñó pedagogía durante toda su vida, al mismo tiempo que sociología. A partir de 1887 hasta 1902, siempre dio, semanalmente, una hora de curso de pedagogía en la Facultad de Letras de Burdeos. La mayoría de los asistentes a esa hora de curso de pedagogía era personal que trabajaba en la enseñanza primaria. En la Sorbona, en 1902 fue nombrado sustituto de la cátedra de ciencias de la educación, en el que suplió en 1906, a Ferdinand Buisson. Dedicó la mayor parte de su labor educacional a la pedagogía: cursos abiertos al público, conferencias a los que laboraban en la enseñanza primaria y en los cursos a los alumnos de la Escuela Normal Superior.

Émile Durkheim aborda la educación como un hecho social, por lo que sus planteamientos sobre educación constituyen un elemento esencial de su sociología, lo que podemos constatar cuando afirma que al ser él sociólogo, es en su calidad de sociólogo que habla de la educación, por lo que para Émile Durkheim la educación es un ente eminentemente social, es decir, pone en contacto al niño con una sociedad determinada, con la sociedad en donde nace y se desarrolla. Así mismo, demuestra que en cada sociedad existen tantas educaciones especiales o tipos de educación como medios sociales diferentes hay. Incluso en las sociedades igualitarias, que tienden a eliminar las diferencias injustas, la educación varía, según las profesiones.

Argumenta, que esas educaciones especiales se cimentan sobre una base común, lo que él denomina educación común. Pero especifica que dicha educación común varía de una sociedad a otra ya que cada sociedad forma un determinado ideal de hombre y es ese ideal de hombre, que hay que alcanzar con la educación, el que debe ser el fin de la educación. Por lo tanto, para Durkheim en cada sociedad, la educación es el medio a través del cual prepara a los niños potenciando y desarrollando las condiciones esenciales de su propia existencia. En este sentido, cada tipo de pueblo tiene una educación que le es propia. Por lo que concluye definiendo a la educación como la acción ejercida por las generaciones adultas sobre aquellas que no han alcanzado aún el grado de madurez suficiente para desenvolverse en la vida social. Para Durkheim la educación tiene por objeto potenciar el desarrollo físico, intelectual y moral del niño, que exige de él la sociedad en la que nace y se desarrolla, es decir, la educación es la socialización de las nuevas generaciones.

Durkheim nos dice que la palabra educación en sentido amplio se refiere al conjunto de influencias que la naturaleza o los demás hombres ejercen sobre nosotros, bien sea sobre nuestra inteligencia o sobre nuestra voluntad. Por lo que Stuar Mill dice que abarca “todo lo que hacemos por voluntad propia y todo cuanto hacen los demás a favor nuestro con el fin de aproximarnos a la perfección de nuestra naturaleza”. Haciendo la aclaración de que en este sentido amplio de la educación, la acción de las cosas sobre los hombres es muy diferente, por sus procedimientos y resultados, de la que procede de los hombres mismos; y la acción de los contemporáneos sobre sus contemporáneos difiere de la que los adultos ejercen sobre los más jóvenes, y es la acción de los adultos sobre los más jóvenes que le asigna el concepto de educación. Por lo que señala que según Kant, “el fin de la educación es el de desarrollar todas las facultades humanas. Llevar hasta el punto más alto que pueda ser alcanzado todas las fuerzas que anidamos en nuestro interior, realizarlas lo más completamente posible, pero sin que lleguen a dañarse entre sí.

Sin embargo, Durkheim aunque reconoce que ese desarrollo armónico es necesario y deseable, afirma que no es integralmente realizable, porque se encuentra en contradicción con otra regla de la conducta humana que es la que nos ordena dedicarnos a una tarea determinada y restringida, por lo que afirma que no podemos y no debemos dedicarnos todos al mismo género de vida, ya que para Durkheim, según nuestras aptitudes, tenemos funciones diferentes que cumplir, por lo que debemos asumir lo que nos corresponde.

Según Durkheim la educación ha variado a través de los tiempos y según los países. Es decir, que la educación cambia de acuerdo al momento histórico en el que se viva, así como por el desarrollo de la misma sociedad y de la ciencia y de la tecnología. Por ejemplo, en las ciudades griegas y latinas la educación enseñaba al individuo a subordinarse a la colectividad, a convertirse en esclavo de la sociedad. En Atenas, se trataba de formar mentes delicadas, cautas, sutiles, amantes de la mesura y de la armonía, capaces de apreciar la belleza y los placeres de la pura especulación; en Roma, se forman hombres de acción, entusiastas de la gloria militar, indiferentes a todo cuanto concernía a las artes y las letras. En el Medioevo, la educación era cristiana; en el transcurso del Renacimiento, la educación es más laica y más literaria, En la época moderna la ciencia ocupa en la educación

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