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Análisis de la introducción de psicología de las masas


Enviado por   •  7 de Agosto de 2017  •  Síntesis  •  1.731 Palabras (7 Páginas)  •  432 Visitas

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Universidad Arturo Michelena[pic 1]

Facultad de ciencias económicas y sociales

Carrera: Comunicación Social

Cátedra: Psicología social de la comunicación

Psicología de las masas:

El instinto gregario

Integrantes:

Capote Jeraldine

González Aileen

Lárez Glorielsy

Mendoza Gheraldine

Tineo Francis

San Diego, Marzo del 2017

Análisis de la introducción de psicología de las masas

        Las diferencias entre la psicología individual y la psicología de las masas, que frecuente nos hacen entender que mueve un estado trascendental en la psicología general, llegará a  un punto de estudio en el que se demostrará que no poseen oposiciones realmente significativas sino que ambas se complementan. ¿Por qué? Sencillamente porque en su vida anímica, el individuo necesita de otros. Este requiere un modelo a seguir, que lo ayude e impulse; a pesar de que la psicología individual busca la manera de llevar al ser por los caminos correctos para lograr el alcance de una satisfacción de moción pulsional, también se ve inmerso en la psicología de las masas, relacionándose entre ellas.

Los lazos o familiaridades que posee con las personas que habitan su entorno, que preferencialmente han sido estudiados por el psicoanálisis, están en el deber de declararse como fenómenos de masas. Freud, considera a la pulsión social, como no originaria e irreducible, y contemplando la posibilidad de que su origen pueda hallarse en el seno de la familia. Debido a esto, se crea un conflicto entre los fenómenos mencionados y otra sucesión llamada “narcisismo”, la cual da a comprender que el deleite pulsional se despoja de la influencia de otros sujetos. Por consiguiente, esta oposición (de autistas, Bleuer, 1912) está estrechamente vinculada con la psicología individual, y esta, a su vez, no puede separarse de la psicología social, porque se completan una a la otra.

En las relaciones con las personas que hacen vida en su espacio existe una influencia que genera cada una de ellas para el individuo en sí, y esto logra que tomen un rol más importante. Sin embargo, cuando se indaga sobre la psicología social o de masas, este retira como objeto principal dicho asunto, y posiciona la búsqueda de la atribución compartida entre el sujeto y una cantidad de seres humanos con los que está inmerso por alguna razón específica o una razón ajena.

Esto da como resultado el significado de la psicología de masas: estudia al hombre como parte de un grupo, de un conjunto, de un todo. Lo analiza desde la perspectiva de una multitud organizada en una masa durante un periodo y un fin determinado.

Ahora bien, luego de aclarar que lo que al principio formaba una sola unión, se puede proceder a reflexionar sobre las exteriorizaciones de los fenómenos dentro de una pulsión especial, que ya no conduce sino a una pulsión social; aunque podemos refutar que es complicado adjuntarle el factor de los números a algo que es más grande que una cantidad, que produjo por sí mismo una nueva pulsión inactiva en todo. Así que, nos iremos por otro sendero, estudiando otras posibilidades: ¿la pulsión social puede que no sea procedente e insubordinado? y ¿sus comienzos pueden hallarse en un círculo especial, como el de la familia?

Al fin y al cabo, la psicología social es nueva, pero abarca muchísimos inconvenientes y traza al investigador innumerables tareas, que al día de hoy ni siquiera están bien esbozadas. El simple hecho del que se agruparan las distintas formas de constitución de las masas o la representación de los fenómenos que se manifiestan, demandan una ardua investigación y exposición. Se abordan algunas cuestiones que sólo estudia el psicoanálisis, pero que amasan un interés muy particular en la psicología profunda.

Análisis del capítulo IX: Instinto Gregario

 El instinto gregario, en su definición más simple: la manifestación de la tendencia que tenemos todos los seres humanos de crear masas mucho más amplias cada vez más, por el simple hecho de que el hombre, sin alguien a su lado, se siente incompleto, solo. Por ello, es un instinto innato de cada individuo. Este instinto del hombre por mantenerse en sociedad, rodeado de personas que compartan su mismo estado. Sin embargo no es nada más rodearse de personas sino pertenecer a ellas, sentirse parte activo de un grupo para poder diferenciarse del resto.

Esto provoca, a su vez, que los miembros de esa masa, busquen la justicia social. ¿Qué quiere esto? Sencillamente, su objetivo es la exigencia de la realización consecuente de la igualdad; nadie se impone sobre nadie, todos tenemos lo mismo, ninguno debe destacarse sobre el otro: se niegan muchas cosas para que también los demás deban renunciar a ellos, o en su defecto, no puedan exigirlas.

El instinto gregario nace primero de una hostilidad hacia los demás individuos, La masa excluirá al que no cumpla con las mismas características, lo rechazará, optará por aquel que no se diferencie y pueda pertenecer libremente y con todas las semejanzas del grupo y luego, se identifican por el amor hacia un objeto en específico. Por esto se deriva su objetivo, o todos tenemos lo mismo o nadie tiene. Esta exigencia de igualdad es la raíz de la conciencia moral social y del sentimiento del deber. De no poder pertenecer el sujeto cambiará su estilo y se moldeará a las necesidades del grupo. La masa no solo se encarga de deducir quien pertenece o no sino también de una u otra forma de moldear al sujeto a que este se adapte a ellos. 

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