Arco Reflejo

El arco y actos reflejos

Los reflejos medulares son respuestas rápidas y automáticas a cambios en el medio ambiente y permiten al cuerpo conservar la homeostasis. Incluye dos neuronas o más entre las cuales viajan los impulsos desde un receptor a la médula espinal y de ésta a un órgano efector (músculo o glándula).

El arco reflejo es la unidad anatómica del sistema nervioso y el acto reflejo es el trabajo realizado es decir, la unidad fisiológica del sistema nervioso.

En un arco reflejo encontramos las siguientes estructuras:

Un receptor que es el elemento anatómico de la neurona sensitiva que capta el estimulo, lo transforma en impulso nervioso y lo transmite a una neurona sensitiva o aferente que conduce el impulso nervioso del receptor a la neurona de conexión.

La neurona de conexión internuncial o de asociación que se encuentra en el sistema nervioso central y en ocasiones no se asocia como por ejemplo en el reflejo rotuliano o pateral que es cuando se aplica un golpe rápido en el tendón que está debajo de la patela (rótula).

Una neurona motora o eferente que conduce el impulso nervioso de la neurona de conexión al efector; es el órgano que responde al estímulo y puede ser un músculo o una glándula; por lo tanto, hay arcos reflejos con dos y tres neuronas.

El reflejo de estiramiento o miótatico es monosináptico, por ejemplo en el reflejo rotuliano o patelar en el que el impulso pasa de una neurona sensitiva a una neurona motora, regresa por el músculo efector que está en la parte anterior del muslo (cuadríceps femoral o cuadríceps crural) que se contrae y extiende la pierna como respuesta; en este tipo de reflejos únicamente participa al médula espinal. También se presenta cuando cuando hacemos algún movimiento de flexión para alejarnos de estímulos que nos pueden perjudicar o cuando nos rascamos (reflejo de rascado) ante alguna irritación.

El reflejo flexor es bisináptico porque se llevan a cabo dos sinapsis, por ejemplo, se presenta cuando tocamos algún objeto caliente y retiramos de inmediato la mano.

También está el reflejo extensor cruzado que es contralateral, ya que el impulso entra a la médula por un lado y sale por el opuesto. Por ejemplo cuando te lastimas un tobillo y flexionas la rodilla de forma que te apoyas con el otro pie.

Hay reflejos en los que intervienen estructuras más complejas como el tallo encefálico (cerebral) y cerebelo; por ejemplo, cuando caminamos o corremos gritamos al quemarnos o picarnos. Por último hay reflejos en los cuales participa la corteza cerebral por ejemplo, al curarnos una herida o una quemadura. También hay reflejos adquiridos o condicionados que se logran por medio del adiestramiento, aunque algunos son funciones vegetativas y originalmente involuntarias como cuando aprendemos a controlar el vaciamiento

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