ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Bullying ¿A quién culpar: niños, padres o escuelas?


Enviado por   •  5 de Junio de 2012  •  Ensayo  •  892 Palabras (4 Páginas)  •  568 Visitas

Página 1 de 4

Bullying ¿A quién culpar: niños, padres o escuelas?

Lic. Vivian Saade

La palabra “bullying” (acoso escolar) desgraciadamente se ha vuelto muy famosa en los últimos tiempos, no porque antes no existiera sino porque ahora han aumentado los casos; además de que contamos con herramientas para generarlo que en el pasado no existían, como los mensajes electrónicos vía mail o vía teléfono celular, por ejemplo.

Podríamos decir que de alguna manera, el bullying es a veces un acoso invisible para los adultos. Muchas veces, ni los profesores ni el personal de los colegios nota que se está llevando a cabo un “acoso”, porque los acosadores se cuidan de hacerlo en lugares poco vigilados por adultos (baños, pasillos, patio, camiones), además de que las agresiones no son necesariamente físicas, sino que pueden consistir en acoso intimidatorio, de chantaje, por manipulación o por medio de amenazas; por lo que es aún más difícil detectarlas.

Los expertos asocian el acoso escolar con la ausencia de reglas, falta de supervisión y control de parte de los padres o colegios, o por el contrario, con una disciplina demasiado dura, falta de comunicación entre padres e hijos, tensiones y peleas dentro de la familia.

En vez de ahondar en lo que “es” el bullying, que ya ha sido muy comentado en varias publicaciones escolares y nacionales, me gustaría enfocarme en lo que los padres y las escuelas pueden hacer para evitar estos incidentes.

Existen algunas pautas que tanto las familias como las escuelas pueden tomar en cuenta. Luchar contra el bullying es una responsabilidad de todos. Si cada parte implicada hace su papel, será más fácil combatir el problema.

La familia

Como el punto medular de la educación en todos los sentidos, es en la casa donde se tendría que transmitir valores, normas y comportamientos, así como donde tendría que establecerse lo que es reprobable y lo que es aceptable. Si nos atreviéramos a hacer un análisis profundo y verdadero de nuestros hijos, veríamos habilidades y comportamientos que nos enorgullecen pero también nos percataríamos de conductas o aficiones que no nos gustan del todo. Justificarlas, decirnos que son “cosas de niños” o darnos por vencidos y dejar de luchar contra ellas sólo lograría que éstas se reforzaran e incluso se profundizaran. A lo largo de mi carrera he insistido en que la tarea de ser padres no es sencilla, sin embargo, tomar la responsabilidad que nos toca hará que nuestro trabajo sea más efectivo y por lo tanto que nuestros hijos estén mejor preparados para tener una vida más plena. En resumen, es igual de importante observarnos a nosotros mismos como los observamos a ellos.

Los padres

Debemos observar si estamos constantemente presionando o exigiendo éxito en todas sus actividades, estar atentos a abrir canales de comunicación permanentes evitando tener “monólogos”, ya que se

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (6 Kb)
Leer 3 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com