Científicos mexicanos

1. astrónomo mexicano especialista en estrellas variables. Fue director de los observatorios astronómicos de Tacubaya y de Tonantzintla.

Nació en México D.F. y se licenció por la Facultad de Filosofía de la universidad de esta ciudad. Escribió numerosos artículos científicos y se dedicó sobre todo al estudio de estrellas brillantes. Se ha dado el nombre de galaxias de Haro a un tipo de galaxias descubiertas por él; también llevan su nombre (asociado al del astrónomo estadounidense G. Herbig) los objetos Herbig-Haro, pequeñas nebulosas muy brillantes. Descubrió también estrellas azules cerca de los polos galácticos, nuevas nebulosas planetarias y estrellas de alta luminosidad. Entre 1961 y 1967 fue el primer vicepresidente latinoamericano de la Unión Astronómica Internacional.

2. Guillermo González Camarena, científico e inventor mexicano, nació el 17 de febrero de 1917 en Guadalajara, Jalisco y muere el 18 de abril de 1965 en un accidente automovilístico en Las Lajas, Veracruz.

Inventa en 1940 un sistema para transmitir televisión a color, el Sistema Tricromático Secuencial de Campos. Él inventó también más tarde en los años 1960 un sistema más simple para generar color, el Sistema Bicolor Simplificado. González Camarena lanzó la televisión a color en México años antes que la implementación del NTSC.

3. José Javier Sánchez Mondragón

Nació en la Ciudad de Puebla el día 3 de marzo de 1952. Es físico egresado de la Facultad de Ciencias de la UNAM y recibió su doctorado de la Universidad de Rochester, Nueva York, en los Estados Unidos de América, en 1980. Actualmente es investigador titular en el INAOE e investigador nacional nivel III del SNI.

El Dr. Sánchez Mondragón dió inicio al campo de la electrodinámica cuántica de cavidades con su tema de tesis doctoral. En dicho trabajo predecía, por un lado, el concepto de revivals (1980), que demuestra indudablemente el carácter corpuscular de la radiación electromagnética y , por el otro, el concepto del desdoblamiento del espectro de resonancia fluorescente (1983), que demuestra que la emisión espontánea puede inhibirse o incrementarse, dando cuenta de su carácter reversible.

La primera versión fue corroborada experimentalmente en el Instituto Max Planck de Alemania en 1987, mientras que a la segunda se le dedicó una nota especial en la revista Nature, con el título ``How empty is the vacuum''. Las contribuciones originales del Dr. Sánchez Mondragón fueron publicadas en dos artículos en revistas científicas de circulación internacional, los cuales se han convertido en unos clásicos en el área de la óptica cuántica con más de 300 citas, y sus conceptos han trascendido hacia otras áreas de la física. El Dr. Sánchez Mondragón ha publicado, además, cerca de 56 artículos con arbitraje anónimo, así como capítulos en libros y memorias

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