Diagnostico De Un Caso

EMMANUEL HERNANDEZ RODRIGUEZ

Diagnóstico del caso

Maricela González de Dios

El alumno de primer grado de telesecundaria, tiene 13, vive en la comunidad de San francisco, Calcahualco. Una localidad altamente marginada y de escasos recursos, donde la mayoría de la población vive de los programas de gobierno como Oportunidades y 70 y Más, además de la producción de carbón y cosecha y venta de frutos de temporada.

Los papás de Emmanuel son personas jóvenes, su papa tiene 38 y su mamá 35 años de edad. Se dedican a las actividades antes mencionadas y su mamá es ama de casa, tiene 3 hermanos y una hermana, de los cuales dos varones son mayores que él.

En cuanto a las características particulares de Emmanuel, es un niño de estatura baja, tez morena, cabello negro y complexión delgada, físicamente Emmanuel es un niño normal como cualquier otro de su edad, al caminar se encorva un poco y mira siempre fijamente hacia el suelo. Por lo que en ocasiones demuestra alguna preocupación.

Dentro del aula, su mayor preocupación es la fluidez del lenguaje, la comunicación oral y escrita, así como enfrentar las burlas y risitas de sus compañeros durante las clases; cada vez que lee o participa en las clases, Emmanuel muestra deficiencias en su expresión oral, se le dificulta hablar de manera fluida, “tartamudea” como se dice comúnmente. Esta dificultad en el lenguaje y la comunicación le ha ocasionado ser un joven introvertido y poco participativo, un alumno quieto, callado, en pocas palabras un alumno pasivo.

Por lo que en varias ocasiones lo pongo a leer en voz alta, en voz baja, de manera individual o para el grupo, cada vez que demuestra su dificultad, los compañeros se ríen y les hago que guarden silencio y le pido a Emmanuel que continúe, como minimizando la situación que para él es quizás bochornosa.

He platicado de manera indirecta con el resto del grupo acerca de las deficiencias, poniéndome como ejemplo y explicando que en algunas ocasiones es muy normal que se nos dificulte expresarnos fluidamente por los nervios o estrés. Tratando de que el grupo no se burle de su compañero.

Aunque Emmanuel, presenta esta problemática de lenguaje, me resulta sorprendente porque comprende muy bien las matemáticas, cualquiera podría pensar que es un niño con problemas académicos, quizás no pueda leer bien, pero las matemáticas las comprende muy bien.

Por lo que en esta asignatura, donde demuestra mayor seguridad de conocimiento y además gusto, trato de preguntarle en repetidas ocasiones, considero que ayudará a fortalecer sus debilidades en comunicación oral, suponiendo sin conceder, que el alumno tenga dicha dificultad de lenguaje, podría ser por inseguridad o miedo a enfrentar burlas, por lo que es una ventaja que tenga facilidad de comprensión por las matemáticas; aprovecho al máximo esta habilidad.

Sus fortalezas son que a pesar de que sus compañeros se ríen cuando se equivoca, si le pido que siga leyendo lo hace y lo que le pregunto contesta aunque no sepa, por iniciativa no participa, pero si le pregunto siempre contesta, a diferencia del resto del grupo que cuando no saben se quedan callados, aunque les pregunte varias veces.

Emmanuel ha sabido sobrellevar su deficiencia ya que desde el preescolar mostraba las características ya mencionadas.

En una ocasión le pedí que participara en una pastorela y se aprendió los diálogos de la misma; participando satisfactoriamente, a lo cual reconocí su esfuerzo y participación, es lo que me satisface de este alumno, que si le pido que participe en actividades donde tiene que comunicarse, aunque le cueste lo hace, demostrando que tiene interés por superar el problema de lenguaje.

Lo que hago también para fortalecer sus habilidades lingüísticas es platicar más seguido con él y prestarle mayor atención en su desempeño escolar, cuando estamos en el aula no hago distinción de sus compañeros sino que disimuladamente me acerco a él para orientarlo o corregirle algo que haya dicho o hecho de manera diferente a lo solicitado.

Además le dejo que realice lecturas en casa y que comente con sus papás lo que leyó, previamente platiqué con ellos para que le prestaran atención y juntos lograran superar deficiencias. Asimismo le encargo que escriba lo que comentaron sus papás acerca de la lectura y que copie y reseñe algunos cuentos.

Lo que hacemos los docentes con alumnos que presentan estas NEE es que recurrimos a las prácticas del lenguaje en español, como lectura compartida con los padres, reseñas, comentarios orales y escritos, mayor atención al alumno con NEE, adecuación de las planeaciones en cuanto al tiempo y las estrategias.

Es decir si mi alumno presenta problemas en

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