ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Distanciamiento Social E Adultos Jovenes, Adultos Medios Y Adultos Mayores


Enviado por   •  21 de Noviembre de 2012  •  5.366 Palabras (22 Páginas)  •  926 Visitas

Página 1 de 22

Distanciamiento Social en Adultos Jóvenes, Adultos Medios y Adultos Mayores

Ingrid L. Guevara, Yolanda K. Cabezas, José M. Ortiz

Departamento de Psicología

Universidad Centroamericana

“José Simeón Cañas”

01 Julio 2010

Antiguo Cuscatlán, El Salvador.

Resumen

El presente trabajo se tratara sobre el distanciamiento social hacia los adultos mayores de parte de los adultos jóvenes y adultos medios. Los historiadores sociales argumentan que las actitudes negativas hacia los adultos mayores se difundieron a mediados del siglo XIX y que para fines de ese siglo la caracterización cultural de los ancianos cambió de favorable a desfavorable. A lo largo del tiempo se han propuesto diferentes explicaciones teóricas sobre el envejecimiento, en nuestra investigación expondremos las más importantes; estas teorías son: las teorías biológicas, las teorías psicológicas y las teorías sociológicas. En este estudio entenderemos por vejez a la población de personas mayores o ancianas, normalmente jubilada y de 65 años o más. Distanciamiento social se entenderá como la discriminación y aislamiento que padecen las personas mayores por parte de su grupo familiar y de toda la sociedad. En la presente investigación se tratará de comprobar si existen diferencias en el distanciamiento social entre los adultos jóvenes, adultos medios y adultos mayores, para ello se utilizo la asignación de grupos etareos que fueron: adultos jóvenes, adultos medios y adultos mayores, se utilizó una muestra de 145 adultos seleccionados de manera aleatoria de los cuales 64 fueron hombres y 81 eran mujeres. Para la obtención de los resultados utilizamos el estadístico Anova para el análisis por ítems; que reporto diferencias significativas intergrupales solamente en uno de los ítems, por lo que podemos concluir que los ítems del 22 al 27 no resultan con diferencias significativas con respecto al distanciamiento social a excepción del ítem 22.

Palabras claves: vejez, distanciamiento social.

Distanciamiento Social en Adultos Jóvenes, Adultos Medios y Adultos Mayores

Los historiadores sociales argumentan que las actitudes negativas hacia los adultos mayores se difundieron a mediados del siglo XIX y que para fines de ese siglo la caracterización cultural de los ancianos cambió de favorable a desfavorable. La extensión de las actitudes viejistas coincide con la rápida expansión industrial y económica y favoreció a los intereses de los dueños de los negocios interesados en tener una fuerza de trabajo maleable constituida por trabajadores jóvenes mal pagos. Algunos investigadores sostienen que la emergencia de actitudes viejistas fue de naturaleza ideológica para legitimizar la discriminación en el mercado laboral. En un sentido amplio, las actitudes viejistas sirven al propósito ideológico del avance de los grupos dominantes para devaluar los méritos de los adultos mayores y disminuir la legitimidad de sus demandas políticas e intereses sociales (Moragas, 1998).

La expansión de las actitudes negativas hacia la vejez tiene componentes tanto culturales como ideológicos. Las actitudes negativas están asentadas en profundas creencias y patrones culturales tales como la glorificación de la juventud, la conceptualización del individuo como un sujeto libremente autónomo, el ideal de una libre competición económica y la reducción del valor humano a cálculos económicos. Estos valores culturales están implícitos en expresiones comunes tales como "hacélo o cállate", "no te metás en lo que no te da el cuero" y "solo sobreviven los fuertes". Estos patrones y creencias penalizan a los adultos mayores y favorecen la percepción reduccionista de los problemas sociales relacionados con la edad. Por ejemplo, la tendencia es a ver los problemas experimentados por los ancianos como "problemas individuales" y a ignorar sus bases en las estructuras históricas, culturales y sociales (Mira & López, 1961).

La tendencia a culpabilizar a la víctima es un componente importante del viejismo y en otros tipos de discriminación. Si un viejo no es feliz con una nueva situación en la que vive, el estereotipo cultural lleva a atribuir esta infelicidad del viejo a su terquedad o rigidez. Esto ocurre a pesar del hecho que la infelicidad puede estar perfectamente justificada bajo ciertas circunstancias. Si una persona mayor está aburrida, el estereotipo dictaminará que es un problema personal del adulto mayor porque, después de todo, los adultos mayores no son creativos y ni perezosos. A pesar de que las causas están enraizadas en condiciones sociales, culturales, históricas o económicas, la tendencia es a hacer al anciano personalmente responsable por sus problemas. Esta tendencia está relacionada con la dificultad general que muchos de nosotros tenemos para entender a la gente y a sus circunstancias en términos de los amplios contextos que los estructuran (Bourhis Leyens y Philippe, 1996).

La raíz cultural de la tendencia a culpar a la víctima está relacionada con un componente clave de las actitudes negativas: la estereotipia. La estereotipia es un componente psicológico social por el cual atributos negativos, que de hecho existen en un pequeño porcentaje de los miembros de un grupo, son generalizados y usados para categorizar a todos sus miembros. Por ejemplo, el hecho que un pequeño porcentaje de adultos mayores sea frágil y dependiente es tomado como un atributo general del volverse viejo. A pesar que los hechos muestran que la mayoría de los adultos mayores no son frágiles, la "fragilidad" se convierte en una característica que define el hecho de volverse senil. Las características personales de los individuos mayores son ignoradas y las personas mayores son etiquetados de acuerdo a este estereotipo negativo basado en su afiliación grupal. La estereotipia es discriminatoria porque niega el sentido del sí mismo y devalúa la singularidad ontológica del individuo. La estereotipia provee además la racionalización psicosocial para otros tipos de discriminación, tales como la evitación interpersonal y la discriminación laboral (Bourhis y otros, 1996).

Cuando los individuos mayores experimentan problemas tales como la pérdida de un trabajo o una enfermedad son individualmente culpabilizados por estos problemas. También aquí el proceso culpabilizador está relacionado con la estereotipia y con la negación de las características individuales. La situación social de los adultos mayores es, entonces, paradoja. Las cualidades individuales

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (35 Kb)
Leer 21 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com