EL DESARROLLO FÍSICO, COGNITIVO Y PSICOMOTOR

Nuestro crecimiento está muy marcado.

0-18 meses nuestro cerebro comienza a crear, de forma exagerada, millones de neuronas, pero no solo eso, sino que además conforme van apareciendo, éstas van relacionándose unas con otras para poder llevar a cabo cualquier tipo de acción que se les ordene. Este crecimiento neuronal excesivo que se da en los primeros meses de vida, nos va a permitir llevar a cabo cualquier movimiento de manera eficiente. Por ello podemos afirmar que nuestras acciones no son más que una explosión y conexión entre neuronas. De este modo, comprendemos que el ser humano, en esta edad, es capaz de aprender habilidades y capacidades extraordinarias con una gran facilidad, cosa que en unos años será poco probable.

Ahora bien, a partir de los 18-20 años, comienzan a morir muchas de ellas, pero las que sobreviven se ramifican con tal de permitir esa intercomunicación. Así las relaciones entre unas y otras que posibilitaban la ejecución de cualquier movimiento en el organismo humano, quedarán más limitadas y la acción se llevará a cabo, pero de una manera más deficitaria. Es por todo esto por lo que al nacer, y durante los primeros años de vida, el ser humano trata de aprender -con la interacción del medio- todo aquello que le permitirá desenvolverse y sobrevivir en el medio. Con esta introducción a la biología, queremos dar a entender que nuestro cerebro sigue un desarrollo cognitivo progresivo muy marcado y que éste va acompañado de la concepción de una serie de destrezas motrices que giran en torno también a una evolución física del individuo. -Nuestras neuronas, poco a poco, nos van a permitir realizar acciones cada vez más complejas, comenzando claro está por movimientos simples como levantar un brazo o girar la cabeza, y acabando por llevar a cabo cualquier destreza como podría ser conducir un automóvil, donde debemos coordinar varias extremidades de nuestro cuerpo.-

La maduración del cerebro, condiciona y posibilita los progresos en la motricidad (tanto fina como gruesa) y el control del propio cuerpo (cosa que ya nos diferencia del resto de especies vivas).

DESARROLLO FÍSICO Y MOTRIZ

El desarrollo físico va a condicionar que las destrezas motrices del individuo se lleven a cabo. A medida que el bebé va creciendo, éste va teniendo más control sobre su propio cuerpo, lo que posibilita que lleve a cabo movimientos que en un principio no lograba realizar. La consecución de los objetivos que puede conseguir un adulto no se obtendrán hasta pasado un largo proceso que intentaremos desarrollar a continuación: Durante los primeros meses de vida los movimientos todavía no son muy precisos puesto que el bebé no tiene el propio control de su cuerpo. El niño por primera vez se abre a un mundo totalmente nuevo y por conocer: no solamente las cosas y las personas que le rodean son todo un descubrimiento para él, su propio cuerpo también es una herramienta nueva que desconoce y que por el momento no controla bien. Esto ocurrirá durante un corto periodo de tiempo ya que día tras día, éstos exploradores irán aprendiendo y presentando mejorías gracias a su interacción con el medio externo. Además todas esas neuronas de las que hablamos anteriormente posibilitarán el aprendizaje y permitirán el "hacerse" del ser como individuo.(Existen en materia psicológica unas etapas claras y marcadas que dan a conocer qué destrezas puede conseguir un individuo en ciertas edades. Aquí veremos de manera estructurada como poco a poco serán capaces de introducir cambios y mejorías en su cuerpo. )

TIEMPO PARTES DEL CUERPO MOVIMIENTO

1-3 meses Boca, ojos y oído Succión, para tomar la leche, movimiento

de los labios y lengua. Abre y cierra los

párpados, sigue la luz. Sonrisa social. Se

asusta con ruidos.

3-5 meses Cuello, espalda y brazos Empieza a tener la cabeza recta y a rotarla en diferentes direcciones.

Puede estar sentado, si se apoya en un cojín o en una mecedora.

Puede agarrar pequeñas cosas usando toda la mano.

6-9 meses Torax, piernas y manos Puede estar sentado sin ayuda. Ahora las

manos están libres para explorar todo el

entorno: hay voluntad de coger y llevar los

objetos a los ojos y a la boca. Empieza a

tener preferencia por una de las dos

manos.

9-12 meses Pies, lengua y dedos Hay cada vez una mayor coordinación

entre las partes del cuerpo. Empieza el

movimiento: el niño se arrastra por el

suelo, empieza a ponerse de rodillas, gatea

(cada vez menos frecuente desde que

duermen boca arriba) y finalmente

empieza a levantarse. Utiliza los dedos,

sobre todo el pulgar (haciendo la pinza)

con mayor precisión, siendo capaz de

coger cosas muy pequeñas, como una

hormiguita, o de hacer rotar los objetos

entre sus dedos, para estudiarlos mejor.

Ya produce una buena variedad de sonidos

Normalmente desarrollarán antes la motricidad gruesa (brazos, piernas) que la fina (dedos), ya que ésta última necesita de una gran precisión para ser accionada correctamente. Todo este aprendizaje motriz le permitirá al bebé no solo dominar su propio cuerpo sino también utilizarlo para expresar emociones, sentimientos, etc. -A partir del primer año, los movimientos motrices empezarán a estar más coordinados, aunque no en su totalidad.- El paso más difícil ya habrá pasado, lo único que quedaría sería diseñar una serie de actividades para mejorar los movimientos de motricidad del individuo, con el fin de adelantar el proceso. Estimularlo para que aprenda cuánto antes mejor.

DESARROLLO COGNITIVO

El desarrollo intelectual del individuo va a permitir que éste pueda tener el dominio total de su cuerpo (ya que el cerebro es el que da las órdenes a todo el organismo). Pero no solo eso, sino que también, va a poder adquirir destrezas (memoria, lenguaje…) y desarrollar sus propios sentidos (vista, olfato…) de una manera eficiente.

Todo este aprendizaje es posible tras un largo camino, puesto que los seres humanos, a diferencia del resto de animales, aprendemos a vivir –no estamos determinados-. Podemos estar madurando toda nuestra vida y creer que todavía no somos lo suficiente adultos como para guiarnos por nosotros mismos. Necesitamos, por así decirlo, de los demás para sobrevivir. Este largo camino, comienza desde el momento de nuestro nacimiento, y acaba cuando nuestro corazón para de latir. A lo largo de nuestra existencia, se dan una serie de cambios y evoluciones que desarrollaremos a continuación. Según la teoría de Jean Piaget

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