El Mundo Como Yo Lo Veo
Enviado por Wanderer2 • 27 de Enero de 2014 • 721 Palabras (3 Páginas) • 239 Visitas
” Cuán extraños somos los mortales! Cada uno de nosotros está aquí para una breve estancia; con qué objetivo no sabemos, aunque a veces lo percibamos (creamos saber algo…). Pero sin necesidad de una reflexión muy profunda, a través de la experiencia de la vida cotidiana, unos sabe que existe para otra gente – en primer lugar para aquellos, de cuyas sonrisas y bienestar es totalmente dependiente nuestra propia felicidad, y después para otros muchos, desconocidos para nosotros, a cuyos destinos estamos atados por lazos de compasión. Cien veces cada día me recuerdo que mi vida interior y exterior están basadas en los trabajos/logros de otros hombres, vivos y muertos, y que yo debo esforzarme para dar en la misma medida que he recibido y todavía recibo…
“Nunca he considerado la comodidad y la felicidad como fines en si mismos – esta es la base crítica que llamo el ideal de una pocilga. Los ideales que han iluminado mi camino, y una y otra vez me han dado de nuevo coraje para afrontar la vida alegremente, han sido la Bondad, la Belleza, y la Verdad. Sin el sentido de parentesco con los hombres de mente parecida, sin el trabajo con el mundo objetivo, lo siempre inalcanzable en el campo del arte y los esfuerzos científicos, la vida me habría parecido vacía. Los objetos trillados de los esfuerzos humanos – bienes, la fama, el lujo – siempre me han parecido despreciables.
“Mi sentido apasionado de justicia social y la responsabilidad social siempre contrastaron extrañamente con mi falta de necesidad de contacto directo con otros seres humanos y comunidades humanas. Soy realmente ‘ un viajero solitario ‘ y nunca he pertenecido, plenamente (de todo corazón), a mi país, mi casa, mis amigos, ni tan siquiera a mi familia más directa; ante todos estas ataduras, nunca he perdido el sentido de la distancia y ni la necesidad de soledad … “
” Mi ideal político es la democracia. Deje a cada hombre ser respetado como un individuo y a ningún hombre ser idolatrado. Es una ironía del destino que yo mismo haya sido recipiente de admiración excesiva y reverencia de mis prójimos, por ningún defecto (culpa), y ningún mérito, más que los propios. La causa de ésto bien puede estar en el deseo, inalcanzable para muchos, de entender las pocas ideas a las cuales llegué a través de incesantes “luchas”. Soy bastante consciente de que en cualquier planteamiento para alcanzar sus objetivos, un hombre debe pensarlo/plantearlo y dirigirlo, y generalmente asumir la responsabilidad. Pero el conducido no debe ser obligado/coaccionado, ellos deben ser capaces de escoger a su líder. En mi opinión, un sistema autocrático de coacción pronto degenera; la fuerza atrae a los hombres de moralidad baja… Lo realmente valioso en el espectáculo de la vida humana no me parece que sea el estado político, sino el individuo creativo, sensible, la personalidad; esto solo crea lo noble y lo sublime, mientras
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