El cuerpo humano y sus vericuetos
Enviado por Diana Hernandez • 15 de Noviembre de 2015 • Ensayo • 5.238 Palabras (21 Páginas) • 446 Visitas
Hernández Vázquez Diana Laura.
Grupo: 1502
Profesora: Irma Herrera Obregón
El cuerpo humano y sus vericuetos
“.. el cuerpo es el espacio donde se dan cita las explicaciones de una existencia que nos hace ser los humanos que somos”
López Ramos Sergio
A través de los años se han generado y concebido distintas concepciones del cuerpo, si bien gran parte de ellas han sido de corte fragmentario y reduccionistas, y es a partir de éstas que nos hemos enfrentando, como bien menciona el Mtro. Sergio López Ramos en este libro , a un camino lleno de vericuetos, a lo cual refiere por definición como un lugar por donde es difícil transitar o a asuntos complicados y difíciles, y es así como define el recorrido histórico sobre el estudio y concepción del cuerpo y a la problemática en la que se encuentra debido a ellas, pues hace explicita la realidad que se tiene del cuerpo actualmente; una concepción compleja que lo divide dependiendo el enfoque (filosofía, biología, fisiología, etc.), dando como resultado la ausencia de una visión integral y una deficiencia funcional en todo el sentido de la palabra.
Como ya se mencionaba, el estudio del ser humano se ha visto fragmentado en su comprensión, en todas y cada una de las áreas de estudio, obteniendo como resultado el alejamiento del objeto a comprender y el acercamiento a la búsqueda de la verdad en un sólo trozo de cuerpo. Ya es un hecho que la lógica de este pensamiento racionalista, caracterizado por dar valor a lo visible y desacreditar a todo aquello que parta de la intuición, representación simbólica o significados.
El pensamiento racionalista en la sociedad ha influido de manera totalitaria, pues ha permeado la construcción de las personas y su estilo de vida, es decir, las relaciones con sus congéneres y la relación que han construido con su cuerpo, lo cual también ha resultado en una obsesión por saber su funcionamiento, encontrar respuestas en su cerebro y profundizar en la lógica de la razón. Asociado al pragmatismo en la razón científica que encuentra relacionado con un trasfondo económico, farmacéutico, tecnológico, etc., y que encuentra como objetivo lo remedial y la inexpresión de emociones y necesidades del individuo. Por lo que cualquier profesional enfocado a la salud que siga la línea de racionalidad descartesiana llegará a las mismas sugerencias y conclusiones sea del país que sea, ya que su criterio de verdad y su obsesión por la universalidad es el mismo.
Es entonces que podemos dar cuenta que el hecho de conocer estructuras del cuerpo, el ADN o los procesos psico-inmunológicos no basta ni es suficiente para poder comprenderlo, pues se debe considerar los procesos históricos y emocionales del individuo. Como menciona López Ramos (2006) “No se puede afirmar que exista una única o absoluta visión del cuerpo, ya que para comprender lo corporal se debe considerar: a) el proceso social, el cual indica que lo corporal se construye en un tiempo y espacio; b) el proceso individual: El cuerpo es la expresión del gobernante”. Es a partir de ello, que propone una visión integradora en la que se considere la conjugación de emociones, con la historia, órganos, cultura, hábitos alimenticios, deseos y la vanidad originada en una cultura competitiva y planteando como solución para lograr la paz interior aplicada al cuerpo ; el cambiar la memoria del cuerpo para hacer que surja el verdadero yo de la persona, esto es, que le permita al individuo dejar de ser los deseos de los padres o de la sociedad de la que es parte. Objetivo que puede verse alcanzado a través de un enfoque psicosomático, la búsqueda de estrategias de intervención para desbloquear la memoria corporal (como ya se había mencionado anteriormente , y el restablecimiento del equilibrio perdido en los órganos y emociones los cuales se encuentran en una relación interna con el cuerpo y la propia historia familiar y personal del individuo. Dando como resultado una persona con salud emocional y corporal.
Si bien, es entonces que parece pertinente conocer de donde deviene este problemática de la concepción y estudio erróneo del cuerpo, que como ya se mencionaba anteriormente es el racionalismo causante de ella.
El racionalismo es concepto de René Descartes, es a partir de el, que se inaugura la modernidad y el pensamiento moderno, el cual en esa época fungió como la contraposición del idealismo. Descartes propuso un método para poder conocer, el cual tenía como objetivo disipar la duda. Consideraba que su método permite conocer y articularse con la realidad, la finura y la dureza de su dominio, además de posibilitar el profundizar y controlar el conocimiento tangible y verificable y que además pueda dividirse.El problema de este método es cuando se enfrenta problemas de la condición humana, los cuales ,claramente, son más complejos, es entonces que podemos dar cuenta de que ésta metodología no tiene el alcance suficiente el cual permita conocer ni tratar de manera adecuada al cuerpo, puesto que este método de conocimiento no retoma la concepción de un cuerpo cruzado por la cultura y las emociones, es entonces que la búsqueda o su estudio se vuelve reducido y no se ve a la totalidad del proceso, el cual que incluye otros elementos que están presentes en la salud , porque es desde ahí que es más factible pensar en la prevención y no solamente en un remedio temporal.
En segundo lugar el discurso argumentado de Descartes; “pienso, luego existo “ es el que permite dividir y fragmentar el cuerpo, y es así que Descartes deja en evidencia que el fragmentar al ser humano es rentable para la automatización y la simplificación de cualquier sistema de producción. Por consiguiente la razón es una parte sustancial del proceso de instituir nuevos aportes, hacerlo más finos y más exclusivos en una sociedad que instituye la competencia como sistema de trabajo, lo que confronta con la condición humana, el progreso, el desarrollo. Con la idea de desarrollo y progreso, pareciera ser que en un principio era encontrar el conocimiento, la armonía, pero esa idea ya no se mantiene, pues esa idea ahora está deshumanizada y actualmente acaba con el planeta, por ende acaba con el cuerpo del ser humano.
Dicho esto, podemos dar cuenta que una lógica fragmentaria no sirve para poder explicar esta nueva construcción del espacio-tiempo de un cuerpo, la razón descartesiana no puede explicar esa amalgama tan compleja. Si se desea una propuesta distinta, se necesita comprender que el mundo, la materia, el hombre, la sociedad y la historia pueden ser vistos de forma distinta a la lógica de Descartes, es decir, con la lógica de la fragmentación se puede hacer una lectura, pero no se tiene la posibilidad de encontrar los nuevos procesos que se están construyendo en la realidad de nuestro tiempo.
...