Ensayo : Capacitación continua para docentes en aulas inclusivas

ESTUDIANTE: María José Espinoza González

DOCENTE: Mónica Olea.

FECHA: 16 de Noviembre del  2015        

Capacitación continua para docentes en aulas inclusivas

La educación es un derecho humano reconocido por las naciones, el cual se entiende como  una instrucción primaria formal y gratuita para todos los niños y niñas en edad escolar, sin considerar diferencias ni particularidades de ningún tipo “Toda persona tiene derecho a la educación. La educación debe ser gratuita, al menos en lo concerniente a la instrucción elemental y fundamental. La instrucción elemental será obligatoria. La instrucción técnica y profesional habrá de ser generalizada; el acceso a los estudios superiores será igual para todos, en función de los méritos respectivos.” (Declaración Internacional de los derechos humanos, artículo 26). Dicho derecho les permitirá adquirir conocimientos, habilidades y desarrollarse plenamente en la vida adulta. Es así, como  durante el último tiempo las aulas de nuestro país  han ido adquiriendo un carácter heterogéneo en donde aprenden, encuentran e interactúan niños y jóvenes de diversas etnias,  cultura, religión, con necesidades educativas especiales, baja motivación, altas capacidades cognitivas y todo tipo de características  que los definen como seres humanos únicos y particulares.

Es en este contexto diverso, donde se hace necesaria una reflexión abierta y dialógica respecto a este tema, haciendo partícipe a todos los miembros de la comunidad educativa “…en muchas ocasiones el término diversidad es entendido desde un punto de vista reduccionista, circunscrito únicamente a aquellos alumnos que se apartan del común del alumnado, es decir, se asocia con situaciones extraordinarias y excepcionales” (Mendía Gallardo, 1999) con estas palabras el autor plasma la realidad que se vive hoy en día en miles de establecimientos educacionales en el territorio nacional, y frente a esto se  hace urgente una reestructuración en el sistema que debe partir desde las conciencias de las personas y más aún de los docentes que se ven enfrentados día a día a ese escenario diverso y cambiante en donde las exigencias son muchas y los recursos escasos y es eso lo que se pretende con este ensayo: plantear la necesidad urgente de una capacitación continua a docentes  en relación a las heterogeneidad en las aulas.

Educar en la diversidad es un desafío para los docentes “La adquisición de información nueva depende en alto grado de las ideas pertinentes que ya existen en la estructura cognitiva y el aprendizaje significativo de los seres humanos ocurre a través de una interacción de la nueva información con las ideas pertinentes que ya existen en la estructura cognitiva” (Ausubel, 1968) según esto este complejo proceso implica utilizar diferentes medios de  representación, aprovechar los recursos del entorno, buscar otros,  activar constantemente  conocimientos previos,  empoderarse de un rol mediador y de esta forma poder favorecer aprendizajes dinámicos y desafiantes. Sin embargo, en muchas ocasiones los profesores no cuentan con las herramientas necesarias para llevar a cabo esta tarea, es que  responder a la heterogeneidad “es un reto que tiene actualmente el profesorado, para el cual indudablemente necesita formación”. (Gimeno, 1999). De acuerdo a esto, la diversidad en las aulas implicaría un compromiso auténtico de los docentes involucrados. Si bien  la diversidad ha existido siempre por ser una característica inherente al ser humano, es en los últimos años en donde el foco se ha volcado a colegios y salas de clases con la intención de dar respuesta educativa a todos los estudiantes “Educar para este pluralismo conlleva educar desde la igualdad, en el respeto del otro, del diferente, del que procede de otra cultura, hable otra lengua, practique religión o no, padezca una discapacidad física o psíquica y sufra el rechazo por vivir en situaciones de pobreza y marginación social” (Amorós y Pérez, 1993). Pero ¿qué está haciendo  el profesor de aula para educar a este pluralismo? ¿Y si lo estuviese haciendo todo o nada? ¿las políticas públicas van de la mano con este nuevo cambio de paradigma educativo?   Ahora bien, educar en y para la diversidad no es tarea simple. En especial cuando hemos estado ceñidos por siglos a una cultura en donde los logros están vinculados al esmero por ser igual o similar a lo que consideramos “normal”,  cultura que no posee la  suficiente flexibilidad y apertura para aceptar valores distintos, costumbres distintas, hábitos distintos, miradas distintas, tonalidades distintas.

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