Entrevista

FECHA: Mayo 9 de 2014

NOMBRE: Néstor Andrés Zuluaga

EDAD: 20 años

SEXO: Masculino

OCUPACIÓN: Estudiante y trabajaba los fines de semana con un tío

ESCOLARIDAD: BachilleratoDOMICILIO: Cartago

MOTIVO: Joven adolescente quien sufrió el divorcio de sus padres cuanto tenía 9 años de edad a causa de una infidelidad de la madre, es el mayor de dos hermanos, se hizo joven siendo conocedor de la situación, cuando tenía aproximadamente 15 años se fue a vivir con su abuela materna y comenzó con malas amistades que lo indujeron a consumir drogas, su tío ayudó a ingresarlo a un centro de rehabilitación pero de allí se fugó. Su tío le dio trabajo en una fábrica y allí aprendió a trabajar la madera pero cometió faltas graves desde hurto hasta enfrentamientos con compañeros de trabajo y su propio tío. Pasado algún tiempo su tío nuevamente lo ingresó a otra fundación siendo suacudiente allí terminó su bachillerato e ingresó a prestar servicio militar y está ejerciendo las labores que aprendió en la fábrica de su tío, hasta ahora todo aparenta estar normal. Tomamos el judeocristianismo o cristianismo, tradiciones religiosas que se diferencian entre sí, principalmente por el simple hecho de que la primera sigue esperando a un dicho Mesías, como primer ejemplo para el estudio de la muerte en los dogmas religiosos. El cielo o el infierno. Son los dos conceptos que resumirían mejor a la concepción cristiana de la muerte. Una vez que morimos, en función de cómo hemos vivido, recibiremos nuestra recompensa o castigo, es decir, el cielo o el infierno, respectivamente. La religión cristiana establece otra, “vida” después de la muerte, .Este destino no es alcanzable por todo nuestro ser, y será el alma que tendrá la buena o la mala suerte, de alcanzar esta supuesta segunda oportunidad para vivir. Como hemos dicho, nuestro cuerpo quedará atrás, y se descompondrá en la vida terrenal y será el alma quien pasará al Juicio Final que hemos comentado en la Edad Media, en el que se decidirá su destino dependiendo de la vida que ha llevado en su existencia corpórea sobre la tierra .De esta concepción podemos extraer la idea de tres fases de nuestra existencia, fases que deben ser cumplidas para que esta teoría cristiana tenga sentido. Debe haber una existencia terrenal, para que el alma y el cuerpo, vehículo del alma, pueda realizar ciertas acciones. Esta fase debe ser seguida por otra que establezca la muerte de la persona, es decir la expulsión del alma de su cuerpo, y que a la vez de tiempo a ser juzgada. Finalmente, la tercera fase, consistiría en nuestra existencia después de la muerte y después de haber sido juzgados.

Esto nos lleva a la primera conclusión sobre como la muerte afecta a nuestro yo, Suponiendo y

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