Figuras de apego

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Figuras de apego.

• Angelo Covili
• Annais Hidalgo
• Nicolás Hernández
• Sofía Suárez
• Andrés Veas
• Carmen Yévenes

Profesora Erika Días.

26 Octubre 2016.

Muchos niños dirigen su conducta de apego varias figuras, pero no todas reciben el mismo trato, sino que establecen un vínculo más fuerte con una figura en particular, la que en la mayoría de los casos se trata de la figura materna. El apego materno es aquel que se genera luego del parto y que garantiza un desarrollo emocional adecuado del niño, marcan su forma de relacionarse con las demás personas, durante toda su vida. Sin embargo, cabe mencionar que este afecto no siempre se desarrollará necesariamente madre biológica.

Figura de apego central: El niño busca esta figura de apego cuando está cansado, hambriento, enfermo, o se siente alarmado, y cuando no sabe el paradero de este, ya que quiere permanecer a su lado en todo momento. Esta figura está representada por quien le brinda el afecto y cuidados maternos que necesita, por lo que suele ser la madre, pero no siempre es así ya que depende de la composición del hogar en que vive, y puede ser cumplido por el padre, abuelos, hermanos, madre no biológica, etc.

Según Bowlby “(…) en una absoluta mayoría de casos los niños hayan escogido a la madre biológica como figura de apego central. Sin embargo, hubo algunas excepciones (…), algunos establecieron un apego con la madre y con el padre, pero siempre preferían al padre; en el caso del niño, incluso cuando se sentía cansado o enfermo.” (1998, p. 401)

Figura de apego subsidiaria: Son secundarias, y se trata principalmente de compañeros de juego, que el niño busca cuando está de buen humor. Las más corrientes son el padre y los hermanos mayores, a veces los abuelos, un vecino, u otro niño. También es factible que dicha figura cumpla tanto este rol subsidiario como el de figura de apego central, en distintos momentos. Por ejemplo, la madre a veces puede actuar como compañera de juegos y otras como figura principal de apego. Además, estas figuras de apego adicionales pueden variar con el tiempo.

Por otra parte, aquellos niños que muestran un fuerte apego por su figura central, son más capaces de desarrollar vínculos parecidos con otras personas, se desarrollan mejor socialmente, mientras que los niños que establecieron lazos débiles con dicha figura, suelen concentrar toda su conducta social en una única figura, son más inseguros y se les hace más difícil establecer vínculos afectivos con otros.

Apego en objetos inanimados: Si bien hemos hablado de figuras humanas, el apego a objetos también es importante en la vida de un bebé. Es común que el niño adopte un apego hacia un biberón o chupete, el cual succiona sin ningún fin nutritivo. También puede aferrarse a una manta o juguete suave con el que se va a dormir. Si este apego es demasiado prolongado, puede ser indicio de seguridad.

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