INTELIGENCIA EMOCIONAL EN LAS ORGANIZACIONES. En la actualidad el mundo se ha venido enfrentando a diversos cambios económicos, tecnológicos, sociales, entre otros, que obligan a las organizaciones a ir al ritmo de estas transformaciones

INTELIGENCIA EMOCIONAL EN LAS ORGANIZACIONES

     En la actualidad el mundo se ha venido enfrentando a diversos cambios económicos, tecnológicos, sociales, entre otros, que obligan a las organizaciones a ir al ritmo de estas transformaciones. El mundo moderno exige que los integrantes de estas organizaciones además de contar con adecuados niveles de capacitación técnica e intelectual, también posean mayor disposición y adaptación al cambio y a la interrelación con otras personas y otros aspectos diferenciadores como lo son la empatía, la iniciativa, la capacidad de persuasión, habilidades que en general forman lo que se conoce como inteligencia emocional.  

     De este modo, el rol de las emociones juega un papel importante en el desarrollo de las organizaciones y el concepto de inteligencia emocional nos ayuda a describir o entender lo esencial que estas resultan ser. Daniel Goleman describe la inteligencia emocional como “ las habilidades para motivarse y persistir frente a las decepciones; controlar el impulso y demorar la gratificación, regular el humor y evitar que los trastornos disminuyan la capacidad de pensar; mostrar empatía y abrigar esperanzas “ ( Goleman, inteligencia emocional, 1995). Siendo así, es necesario entender y hacer entender que la inteligencia emocional genera ciertas competencias que influencian de algún modo en la aptitud de una persona para enfrentarse a las presiones del entorno.

     La inteligencia emocional determina la capacidad para aprender las habilidades emocionales prácticas y la competencia emocional es aquella que determina que tanto se traslada ese potencial al momento de realizar un trabajo, de acuerdo a esto el hecho de tener una alta inteligencia emocional no es garante de tener un alto desempeño, solo nos muestra que se posee la facilidad para desarrollar las competencias que permitan conseguir el éxito. Son muchas las competencias emocionales que existen, según el libro la practica de inteligencia emocional de Goleman son 25 que están reunidas en 5 grupos, sin embargo no es necesario para el trabajador sobresalir en todas ya que sería algo muy complicado, pero si basta con que sea capaz de desarrollar aquellas que están en función a el tipo, el cargo y ambiente de lugar en el que labora.

     Es imposible que el empleado se desligue de sus emociones puesto que esto es inherente a la naturaleza humana y la dificultad para manejar estas puede afectar negativa y considerablemente la vida cotidiana de una persona, entre esto su trabajo, los resultados pueden generar situaciones bastante complejas, tanto para los trabajadores como para los directivos.

     Uno de los aspectos a favor de la inteligencia emocional mencionados en el libro comportamiento organizacional de Stephen Robbins y Judge Timothy (2009) es la idea de que tiene una base biológica, es decir, que está relacionada con el desarrollo de las funciones de la corteza frontal lo que quiere decir que la inteligencia emocional se puede aprender y mejorar a lo largo de la vida, con el pasar de los años la persona llegara a ser más consciente de sus estados de ánimo, manejar de mejor manera las emociones angustiosas y comprender las emociones de los demás. Este proceso de desarrollo se logra exitosamente si se cuenta con una adecuada tutoría y se es consciente de que estas habilidades no se mejoran comprendiéndolas sino practicándolas.

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