Inteligencia Emocional

INTELIGENCIA EMOCIONAL

Es la capacidad para reconocer sentimientos propios y ajenos, y la habilidad para manejarlos.

Se estima que la inteligencia emocional se puede organizar en torno a cinco capacidades: conocer las emociones y sentimientos propios, manejarlos, reconocerlos, crear la propia motivación, y gestionar las relaciones.1

El departamento de Recursos humanos o Talento Humano es el encargado de detectar estas habilidades en el personal que se contrate, ya que se ha observado que una empresa se afecta altamente por los trabajadores que no saben manejar sus sentimientos o enfrentar los sentimientos de los demás.

Estudios realizados en estudiantes y profesionales con un baja IE mostraban un pobre rendimiento académico o profesional, Se trata de personas impulsivas, ansiosas, desorganizadas y problemáticas.

Pero esta responsabilidad para descubrir si el personal a contratar para una empresa maneja un bajo nivel de IE es el psicólogo por medio de herramientas que le permiten evaluar sus capacidades como: pruebas Psicológicas y entrevistadas.

Esta información es apoyada por investigaciones que proponen que los rasgos que diferencian a los trabajadores más sobresalientes de aquellos otros que simplemente hacen bien las cosas, se tienen que identificar competencias tales como la empatía, la autodisciplina y la disciplina, por ejemplo. Este hallazgo condujo a cambios radicales 2

1 Daniel Goleman (1995), con su célebre libro: Emotional Intelligence,

2 David McClelland profesor de psicología de la Universidad de Harvard realiza investigación sobre la inteligencia Emocional.

Las personas con una alta inteligencia emocional son realistas respecto a las metas que se trazan y logran un equilibrio interno, apoyándose fundamentalmente en las fortalezas para minimizar las debilidades y amenazas. Son personas constructivas, es decir, son capaces de aprovechar las dificultades que se le presentan y no tomarlas como amenazas sino como fortalezas, superando todos los obstáculos que se le presentan. No se trata reprimir el sentimiento o la emoción que no nos gusta, esto puede conducir a un mayor problema, sino de adecuar las emociones para poder sacarle partida y fortalecer sus habilidades.

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