LOS 7 ESPECÍMENES MÁS INDESEABLES EN LAS AGENCIAS.

Las agencias es un hábitat poblado por especies de todo tipo. Muchas de estas especies responden a estereotipos, pero, no nos engañemos, los estereotipos existen también por alguna razón. Digiday recopila a continuación las 7 peores especies, estereotipadas o no, que es posible encontrar en una agencia:

1. El planificador de medios con ínfulas de grandeza

El planificador de medios con ínfulas de grandeza se graduó en 2011 y tiene la responsabilidad sobre grandes cuentas, una responsabilidad que cree tener por su verdadero “talento” y no por lo irrisorio de su sueldo. A este tipo de especie le encanta ir a las reuniones y marcharse cuando éstas están todavía a medias. Tiene en realidad muy poco respeto por los demás porque sabe que está del lado de los poderosos.

2. El creativo vanidoso

Al creativo vanidoso es posible encontrarlo en casi todas las grandes agencias, sobre todo las más tradicionales. Su única obsesión es la fama. Desde el punto de vista del creativo vanidoso, los éxitos de miden en función de los premios conquistados en Cannes Lions y otras certámenes publicitarios. Cada galardón conseguido en un festival contribuye a inflar su ya de por sí hinchado ego.

3. El creativo “carroza”

Hace 20 años el creativo “carroza” estaba en la cúspide de su carrera y se ganaba con creces su sueldo. Dos décadas después, aporta demasiado poco a la agencia para la que trabaja para justificar su astronómico salario, pero tiene demasiado prestigio como para ser despedido. Con el tiempo, el creativo “carroza” ha pasado formar parte del mobiliario de la oficina y, cuando abre la boca, siempre es para hablar de los viejos tiempos.

4. El líder que no hace nada

Este tipo de especie se dedica a “evaluar” nuevas tecnologías y nuevos conceptos. ¿El problema? Que, más allá de los posts que publica con regularidad para el blog corporativo de la agencia, no hace nada con esas nuevas tecnologías y esos nuevos conceptos.

5. El viejo ejecutivo de ventas

Después de pasarse años y años vendiendo espacios publicitarios para la televisión, el viejo ejecutivo de ventas se ha visto obligado a mudarse a los nuevos medios digitales donde tiene que trabajar codo a codo con compañeros de trabajo que pueden en realidad ser sus hijos.

6. El ejecutivo de cuentas

El ejecutivo de cuentas es el puente entre la agencia y los clientes, pero goza de muy poca simpatía entre sus compañeros de trabajo. A pesar de sus esfuerzos por encajar con el resto de empleados de la agencia, no es capaz de deshacerse del estigma del ejecutivo de cuentas.

7. El departamento financiero al completo

Las personas que trabajan en el departamento financiero de las agencias no se caracterizan precisamente por su alegría. Al fin y al cabo, su trabajo es hacer que todo el mundo se sienta miserable.

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