La Adolescencia

EL SIGNIFICADO EVOLUTIVO DE LA ADOLESCENCIA Y LA PUBERTAD

INTRODUCCION

El estudio del adolescente desde la teoría psicoanalítica implica un análisis profundo desde diferentes perspectivas que se juegan en este tiempo decisivo para el desarrollo de la personalidad que venía formándose desde los tiempos de la sexualidad infantil y el cual marcará la instauración del desarrollo de la formación de síntomas que constituyan determinadas patologías.

Como sabemos la adolescencia puede ser analizada también distinguiendo las etapas genéticas en el ceno mismo de este periodo del desarrollo, son raras las descripciones generales sin embargo marca diferentes aspectos relacionados con los comportamientos, las formas de pensar y sentimientos, se mencionan a diferentes autores que mediante observaciones realizadas dan a conocer de qué edad a qué edad abarca la adolescencia y cuales son algunos aspectos que influyen en la maduración de cada uno de ellos pasando por la etapa llamada pubertad en la cual sufren cambios en el organismo tanto hombres como mujeres. A continuación se dan a conocer los estadios que la mayoría de dichos autores coinciden en que son 5 y marca con claridad cuáles son sus características.

También se habla de un proceso de individuación en el cual marca una parte emocional respecto a los padres ya que muchas beses optan por no escuchar es aquí cuando el padre o la autoridad debe solo dar un consejo para que pueda tomar una decisión y no el padre quiera tomarla por el por consiguiente el acercamiento a las relaciones de amistad y de pareja; y que en ocasiones lleva a ciertos comportamientos que recuerdan algunas conductas propias de la infancia. Se menciona también como es que el niño y la niña dejan de serlo ya que sufren diferentes cambios como lo son físicos, emocionales, psicológicos, conductuales en los cuales influyen el entorno en el cual se desenvuelve, en el que realiza sus actividades, las costumbres de la familia, el estado socioeconómico en el que se encuentra.

DESARROLLO

La adolescencia abarca desde los 12-13 años hasta aproximadamente hasta el final de la década de la vida, etapa de transición en la que ya no se es niño, pero en la que aún no se tiene el status de adulto.

Es una interesante etapa de la vida, es una palabra que procede del verbo latino adoleceré, que significa crecer, ir en aumento, desarrollarse. También se dice que “Es un periodo psicológico que se prolonga varios años más y se caracteriza por la transición entre la infancia y la adultez”. El término denota el periodo desde el inicio de la pubertad hasta la madurez suele empezar en torno a la edad de catorce años en los varones y de doce años en las mujeres. Aunque esta etapa de transición varía entre las diferentes culturas, en general se define como el periodo de tiempo que los individuos necesitan para considerarse autónomos e independientes socialmente. La adolescencia en distintos momentos históricos, se da cuando Filósofos griegos de la antigüedad, habían identificado unos años de la vida de las personas que se caracterizaban por la indisciplina, por poner en cuestión la autoridad de los padres, a tener deseos sexuales, etc. La población era escasa minoría de entre 13-20 años. A finales del siglo XIX los niños se incorporaban al mundo del trabajo entre los 7 años y los comienzos de la pubertad. Pocos eran los que estudiaban entre la edad 10- a 12 años, ya que no existía una cultura adolescente, ni adolescencia ya que no era tomada en cuenta en el desarrollo. A finales del siglo XIX, con la industrialización; se hizo importante la capacitación, la formación y el estudio. Los hijos de los obreros siguieron incorporándose al mundo del trabajo a edades muy tempranas, mientras que los hijos de clases medias altas se quedaron en las aulas, aumentaron y elaboraron programas específicos y más complejos. Conforme fue avanzando el tiempo los hijos de los obreros se fueron incorporando a ese estilo de vida, según avanzaba el siglo, se fue introduciendo en países occidentales el concepto de escolaridad obligatoria, que se ha ido alargando hasta llegar a nuestra actualidad. En nuestra cultura occidental, la incorporación de los adolescentes a los estatus adultos se ha retrasado notablemente, formándose como consecuencia un grupo nuevo que, desarrolla además sus propios hábitos y maneras, y que se enfrentan a problemas propios.

La adolescencia entendida como una etapa de "crisis", como conflicto social, y otras perspectivas de explicación: Stanley Hall el pionero en el estudio de la adolescencia al publicar en 1904 su obra Adolescente. Para Hall, la adolescencia representaba un momento crítico en el desarrollo humano por corresponder con el momento de la evolución de la especie humana que suponía el paso del salvajismo al mundo civilizado. Este encabalgamiento de la adolescencia entre la infancia y la adultez teñiría este período de tensiones y sufrimientos psicológicos, debido a los conflictos entre los impulsos del adolescente y las demandas planteadas por la sociedad.

Margaret Mead realizó observaciones en Samoa, en Oceanía conclusión de que los chicos y chicas de Samoa que atraviesan los cambios de tensión especial, de turbulencias o dificultades. Por el contrario, parece que en la Samoa que Mead observó, todo llevaba a realizar una transición fácil y sin problema, de forma que la adolescencia era una época de la vida agradable y feliz. Una creciente capacidad para pensar de manera abstracta, hacia la consideración de diversas hipótesis alternativas ante una misma situación o problema, así como de una capacidad también creciente para poner a prueba esas hipótesis, contrastándolas con la realidad y viendo cuáles de ellas resultan confirmarse en los hechos y cuáles no. si a los dos años se produce –según la descripción piagetiana—el tránsito de lo práctico a lo simbólico, con la llegada de la adolescencia se va a producir el tránsito de la reflexión ligada al aquí y ahora propia de los años anteriores, a una reflexión más abstracta, más alejada de lo concreto, más teórica. Este período suponía el término del estado de latencia y resurgir de los impulsos sexuales tras la pubertad, con lo que el desarrollo psicosexual alcanzaba una meta final: la fase de la sexualidad genial. El adolescente experimentaba un rebote del complejo de Edipo que debía superar distanciándose emocionalmente de sus padres y orientándose hacia los iguales, entre quienes iba a escoger un objeto sexual aceptado socialmente. El incremento de las pulsiones sexuales utilizados por el yo se mostraron insuficientes, por lo que serían necesarios mecanismos adicionales que serían

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