La libertad en Ignacio de Loyola

La libertad en Ignacio de Loyola

Libertad según la RAE es la “facultad natural que tiene el hombre de obrar de una manera o de otra, y de no obrar, por lo que es responsable de sus actos”. Desde hace mucho tiempo el término libertad ha sido muy importante, es un derecho que posee toda persona, y es uno de los más violados en la actualidad. La libertad ha ido evolucionando y tomando distintos significados para cada ser humano, tiene distintas percepciones, por lo que es una expresión ambigua. Si bien es cierto, hay muchos casos donde se conoce a la libertad como hacer  cosas que están prohibidas, alterando el orden o dañando a terceros, pero más que eso, la libertad es un valor que siempre está presente, pero que no todos se dan cuenta porque no es de esa manera en la que la perciben. Existen varios ejemplos de vida y como la libertad ha hecho grandes cambios en ellos, como por ejemplo San Ignacio de Loyola, un hombre que tenía un pensamiento muy distinto porque su libertad se basaba en Dios y en el cristianismo.

La libertad desde la perspectiva ignaciana hoy en día es un ejemplo que la sociedad debería de tener para poder vivir felizmente. La libertad es la capacidad que tiene el ser humano de hacer o elegir algo de forma propia, sin que estas decisiones hayan sido influenciadas por otras personas. En la Antigua Roma, la libertad tenía una concepción bastante estática, era la idea de lo dado y era muy preciada. Existían dos tipos de libertad para los romanos, una por agregación de cosas, la cual consiste en que el ser humano va acumulando o agregando cosas a su vida para que se le diera la capacidad de ser libre, y la libertad cristiana o por desagregación, la cual consistía en despojarse de todos los bienes para no depender de ellos y ser libre, prácticamente eran dos tipos de libertades muy contrarias. Un claro ejemplo en la antigüedad, era San Pablo quien pensaba que no poseer todo lo de este mundo era lo que lo hacía libre, y así también lo acercaba a Dios, porque lo que el poseía solo era basura que no significaba gran cosa. Esta libertad por desagregación permite que uno tenga una mejor relación con Dios, con su hijo Jesucristo y que se cree una unión con todos los hombres y mujeres, porque todos somos uno solo en Cristo Jesús. Esta libertad de Pablo, era la misma libertad de Ignacio de Loyola; quien era proveniente de una familia noble, que tenía muchas aspiraciones, pero sobre todo la libertad por agregación como todo noble la tenía. Ignacio era un funcionario de la nobleza y sabía realizar muchas actividades, como por ejemplo utilizar una espada, con la cual lucho en las guerras, y después de un accidente en la guerra es que encuentra su verdadera vocación y  funda la Compañía de Jesús. Luego de un tiempo de meditar lo que buscaba en la vida, se dio cuenta que los logros que había realizado, no le ayudaban en nada para su vida y mucho menos para encontrarle un sentido; fue en ese momento en que inicia la libertad ignaciana, una libertad que tenía a Dios como centro de todo. Ignacio vivió en el tiempo en que inician los descubrimientos en el mundo, en el que se descubrían cosas nuevas, y en el que la Iglesia había tenido muchos impactos de poder, por lo que él propone en una oración que la libertad tenía que ir guiada según nuestro propósito en el mundo y lo que nos conduce a nuestra finalidad por lo que fuimos creados.  Fue así como en el momento de su meditación y creación de la oración, San Ignacio le entrega al Señor su libertad:

“Tomad, Señor y recibid toda mi libertad, mi memoria, mi entendimiento y toda mi voluntad.
Todo mi haber y mi poseer, vos me lo disteis, a vos Señor lo torno.
Todo es vuestro disponed a toda vuestra voluntad. …………………….                                                      
Dadme vuestro amor y gracia que ésta me basta.”

El actuar con este tipo de libertad, hace que uno se identifique con todos, como un solo mundo, sin distinción alguna porque todos son creación del Padre, tal como lo decía San Bartolomé de las Casas. Era una idea de libertad civilizatoria que incluía a todas las personas, que los hiciera vivir como hermanos, una idea fundamental de lo que era y es el ser humano. Por su puesto que no todos estaban de acuerdo con sus ideologías, pero de eso se trata esta vida, de despojarse de todo lo carnal para poder vivir en la voluntad de Dios, sin importar lo que las personas piensen.

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